Neruda
en el corazón... de Stalin
Víctor
Bustamante
Hay
un libro de Neruda, “Veinte poemas de amor y una canción desesperada“, que fue,
y es, uno de los libros más leídos; este libro agarra con esa perversidad del
amor adolescente que se muere si una mujer te deja. Sobrecoge, y cada que se
lee encuentra uno momentos definitivos y algo esenciales, Neruda todo lo que
tocaba lo convertía en poesía, así lo han definido muchos de sus amigos.
Después hay un intento de leer otros de sus libros “La barcarola“, “El hondero
entusiasta“ y “Residencia en la tierra“ pero ya no existe ese fervor, se hace
melosa su manera de escribir. Y no podemos quedarnos en la adolescencia
poética: muchas imágenes bellas y poco trasfondo, pocas ideas. De tal manera es necesario abrir otras
puertas, otros abismos. Claro que me refiero a las indagaciones personales no a
los poetas de la comodidad y los bizcochitos del éxito.
A
esa afición por su poesía se le añade otro libro de memorias: “Confieso que he
vivido“, donde el poeta habla fragmentariamente de su vida, esbozo de una
autobiografía promocional donde él cuenta lo que le interesa: su egolatría.
Allí los personajes, con quienes conversa y visita, son de relevancia a nivel internacional. Entonces
ocurre algo, busco su estadía en Colombia con uno de los que se llaman, entre
comillas, grandes amigos, Ciro Mendía, no lo menciona, a pesar de que Ciro
añade, en una crónica, que Neruda vivió en su finca de Caldas unos dos o más
meses, y se bañaba desnudo en la piscina, y que además allí escribió su
diatriba a Laureano Gómez. Pero a Neruda parece que le diera amnesia, no lo
menciona para nada, entonces, poco a poco, uno cae en cuenta que la intención
de éste es auto fabricar su imagen junto a personas importantes del mundo y
sobre todo con poder. Desde ahí ese libro adquiere ese tono falso que se va a
cristalizar en otro libro de memorias publicado de una manera póstuma: “Para
nacer he nacido“.
He
mencionado fabricar su imagen, y ahí descansa toda la dimensión del propio
Neruda: dedicar parte de su vida para aparecer como una persona intachable, un
líder de los pobres del mundo, un emblema para los desposeídos. Pero esta es
una de sus fachadas, ya que hay muchos Nerudas que poco a poco fueron
apareciendo. El primero que me llamó la atención fue el gran Gombrowicz, quien
alguna vez lo observó en un hotel lujoso, con todos los fastos del poder, lo
cual hacía tabla rasa de sus verdaderos motivos ideológicos que le servían solo
como mascarón de proa. Entonces Neruda fue cayendo en esa serie de
intelectuales definidos como publicistas del comunismo del cual era uno de sus
líderes a nivel mundial, y así junto a sus memorias observamos que Neruda solo
le interesa Neruda y la publicidad para su acervo político-intelectual.
También
están las fotos, que ya son historia, Neruda con gorra y ruana caminando por la
pista del Estadio Nacional de Chile de la mano de Allende. Ese estadio que se
convertiría en prisión para los militantes de izquierda y donde los militares
tantas personas ajusticiaron, incluso al gran Víctor Jara, luego están las
dolorosas fotos del saqueo a Isla Negra, casa del poeta, y la sorprendente
manera de una dictadura masacrar a su pueblo.
Pero
el trasfondo apareció poco a poco, y la figura de Neruda comenzó a derrumbarse.
Para algunos, de un escritor, solo interesa su obra lo demás es parte de la
cotidianidad, algo que se puede olvidar. No, no creo que un crítico justifique
esto, en un poeta. En un escritor prima la comunión entre vida y obra. Un poeta
que escribió unos versos tan sugestivos, unos poemas tan fuertes e intachables
llenos de toda la derrota y de la melancolía del amor no podía apartarse de esa
imagen. Neruda sí lo hizo, y esos versos escritos con tanta desazón y
lágrimas crean esa dualidad; es algo
oscuro del poeta que lo dejan en ruinas en cuanto a su concepto y ética personal:
Uno no se explica como escribió “Canto a Stalingrado” y la “Oda a Stalin”. No fue un acto valiente, no fue capaz de
tener cordura. Ya que Stalin, si se mira el espejo negro de la historia posee
el mismo carácter de Hitler, fueron un par de genocidas de sus propios pueblos
y sedientos del imperio del mal.
El
nunca ingenuo Neruda dice, en su “Oda a Stalin”:
“Y
allí velamos juntos, un poeta,
un
pescador y el mar
al
Capitán lejano que al entrar en la muerte
dejó
a todos los pueblos, como herencia, su vida.”
Por
supuesto olvidó, como el Padrecito Stalin había sido el culpable de asesinar
millones de rusos. Nada menos que Neruda lo que realiza es una apología a la
maldad. Lo que parecen olvidar quienes lo homenajean.
Pero
la historia de los que se alardean de ser emblemas de los desposeídos del
mundo, nunca podrá tapar esas ejecuciones sucias. Es inexplicable como Neruda
le escribió esos textos a Stalin donde lo eleva a la calidad de dios en el empíreo del
comunismo, pero también es cierto que hay frases de algunos militantes que lo
justifican: era necesario esa insidia e insania para cambiar el rumbo de la
historia. Esas palabras aun se suelen escuchar por ahí para santificar a esa
miríada de asesinos. De esa manera la historia nunca los absolverá.
También
los biógrafos de Neruda le han fabricado otra imagen para que su poesía
prevalezca sobre sus pilatunas políticas, le han escondido al público las
verdaderas hazañas del poeta para alabar
otros dictadores. Veamos:
“Neruda
representó como diplomático en Asia al gobierno dictatorial del conservador
Carlos Ibáñez entre 1927 y 1931, para después servir en Argentina y España a
Arturo Alessandri, otro líder populista muy lejano ideológicamente de él. Años
después expresó su apoyo a Mao Tse Tung, y aun brindó con éste y con su
silencio ante los crímenes en China“. (1)
Pero
cuando se lee “Confieso que he vivido”, es el idilio total, un poeta
disfrutando del mar Pacífico, rodeado por el paisaje de las regiones remotas
del mundo, claro que Neruda nunca iría a contar de qué manera fue a parar allí
como diplomático.
Alabó
a Batista de una manera grosera, para después hacer lo mismo con Castro. A
quien alabó con su libro “Canción de
gesta”, siempre Neruda estaba dispuesto a sacrificar su poesía para atesorar
dictadores, de ahí al elogio del mal hay otro paso. Neruda siempre lo dio sin
tapujos, no en bien de la humanidad sino en bien personal. Cuando el caso
vergonzoso de Castro hacia el poeta Heberto Padilla y “su autocritica”, y la
actitud de Neruda es de una grosería lamentable.
Ya
sabemos porque Nicolás Guillen no soportaba a Neruda, por traidor, aunque
Neruda decía que este envidiaba su poesía. Guillen songo sorongo sabía de estos
artículos de alabanza de Neruda a Batista.
“El
texto publicado el 27 de noviembre de 1944 en el diario oficial comunista El
Siglo con el título 'Saludo a Batista. Palabras de Pablo Neruda en la
Universidad de Chile'. Neruda afirma:
"Otra hora ha llegado al mundo, la hora del pueblo, la hora de los hombres
del pueblo, la hora en que Batista se confunde con los héroes populares de
nuestra época, Yeremenko, Shukov, Cherniakovsky y Malinovsky, que hoy golpea y
deshace las puertas de Alemania, los guerrilleros de España y de China, Tito y
la Pasionaria. A Batista, en esta hora que también, por desgracia, se ha
caracterizado por incubar traidores y cobardes, lo ponemos en el marco de los
americanos totales".
Y
sigue: "Batista, como hombre del pueblo, ha comprendido mejor que muchos
demagogos el papel de los intelectuales, y honra a toda América (…) Los
chilenos damos hoy la mano a Fulgencio Batista… Saludamos en él al continuador
y restaurador de una democracia hermana". Y así todo, hasta definir a Batista como libertador, uno
de los grandes "que han ayudado a que su fulgor nos ilumine en el camino de
la libertad y de la grandeza de América". (2)
Ahí
está el Neruda dominado por ese concepto, ser un intelectual que se balancea
como un péndulo para mantenerse erguido en su pasión política. Luego, como he
comentado, sin ruborizarse sería castrista.
Ahora
muchos vates con bate que nunca combaten sino que son poetas de escritorio con todo el peso que da, no su ingenuidad
sino su perversidad, escamotean las
hazañas nerudianas, para elogiar lo que ellos llaman lo “telúrico americano”,
pura fantasía. No creo que le celebren las lágrimas de “Los veinte poemas de
amor y una canción desperrada” por que son poemas para adolescentes, y ellos,
de ninguna manera se le acercan en su dinámica poética. No sé si le celebran
esos poemas sucios, despreciables como
la “Oda a Stalin“o “Canto a Stalingrado“ o “Nuevo canto de amor a
Stalingrado“ o “Canción de gesta“
dedicada al dictador más sangriento y
duradero en toda la historia de Latinoamérica.
“En
el Boletín de Sesiones del Senado de Chile se recogen los discursos parlamentarios
de Neruda en 1945. En uno de ellos, Lenin es el “gran genio de este siglo”.
Otro discurso, del 5 de junio de 1946, en un homenaje al líder soviético
Mikhail Ivanovich Kalinin, dice fue “hombre de vida noble”, “gran constructor
del porvenir”, que personificó un hijo del pueblo, un gran capitán de la causa
popular, un gran estadista, el gran patriota de una noble nación y un gran
bolchevique. “Su recuerdo –concluye Neruda– permanecerá como un ejemplo de
acción, de abnegación, de pureza y de lucha para todos los defensores del
pueblo, en todos los países de la tierra”.
Pero
todo esto que afirma Neruda cabría preguntárselo a los más de cuarenta millones
de muertos por la dictadura estalinista, a los del Gulag, o a las decenas de
miles de prisioneros polacos masacrados a sangre fría el 5 de marzo de 1940 en
el bosque de Katyn, cerca de Smolensk, tras la orden expresa de ejecución
firmada por ese héroe de Neruda –Kalinin– y su otro tirano favorito –Stalin–“.
(3)
También Pablo Neruda mentó la madre por ser
"cómplices franquistas", a los
españoles que no lucharon en el bando republicano, incluidos poetas tan
honrados como Dámaso Alonso o Gerardo Diego.
Ahí
están pintados esos llamados intelectuales vacíos de reflexión y rebelión, como
Neruda quien vivió y ambicionó todo el poderío de la nomenklatura en diferentes
periodos políticos sin ninguna enmendadura de su parte.
No
sé el Movimiento Poético Mundial a cual de los rostros del poeta celebra,
porque la obra de un escritor es una sola, indiscutible y noble, donde los
instantes luminosos nos sorprenden y donde su parte sucia nos deja en ascuas y
en mitad de la carretera y desdice del escritor.
A
Borges nunca le dieron el Nobel por ensalzar a Pinochet, a Neruda se lo dieron
a pesar de alabar a alguien comparable a Hitler, Stalin, esa bestia negra,
genocida, de la historia que coayudó como Castro, también alabado por Neruda, a
destruir el legado de Marx.
Y
sigue Neruda para la posteridad de cantarle al mal:
Stalinianos.
Llevamos este nombre con orgullo.
Stalinianos.
Es esta la jerarquía de nuestro tiempo.
En
sus últimos años la paloma
La
Paz, la errante rosa perseguida, se detuvo en sus hombros
y
Stalin, el gigante, la levantó a la altura de su frente.
Así
vieron la paz pueblos distantes.
...
.
Bibliografía:
1, 2 y 3 Acereda, Alberto. Textos escondidos
de Pablo Neruda
214 comentarios:
«El más antiguo ‹Más antiguo 201 – 214 de 214Ya que no saben y no pueden ser poetas los “neonadaistas” uribistas, de la línea de José Obdulio Gavioria y J.J. Rendón, se dedican a la propaganda negra, a la desinformación, a la deformación, a la difamación, a la maledicencia, a la calumnia, a sembrar la cizaña, a introducir el malestar y la desconfianza, a fabricar el rumor como arma de desprestigio para dañar, disociar, roer, con una versión falsa que expresa la perversidad de quienes la transmite y el morbo del que lo repite. Están haciendo su recorrido como detractores a la vista de todos, pero todo tiene su límite. Tarde o temprano, como a todo delincuente, les llegará la cuenta de cobro. Hay están las manos metidas de los uribestias, que todo lo hacen así desprestigiando a la poesía que ha alcanzado su mayor prestigio en Medellín..
Ya que no saben y no pueden ser poetas los “neonadaistas” uribistas, de la línea de José Obdulio Gavioria y J.J. Rendón, se dedican a la propaganda negra, a la desinformación, a la deformación, a la difamación, a la maledicencia, a la calumnia, a sembrar la cizaña, a introducir el malestar y la desconfianza, a fabricar el rumor como arma de desprestigio para dañar, disociar, roer, con una versión falsa que expresa la perversidad de quienes la transmite y el morbo del que lo repite. Están haciendo su recorrido como detractores a la vista de todos, pero todo tiene su límite. Tarde o temprano, como a todo delincuente, les llegará la cuenta de cobro. Hay están las manos metidas de los uribestias, que todo lo hacen así desprestigiando a la poesía que ha alcanzado su mayor prestigio en Medellín..
Con la alquimia de la revolución y su poesía hay que ir contra la enfermedad y la decadencia capitalista. Contra toda burocratización de la vida. No hay un sólo medio de acción que no debamos emplear y eso incluye al amor, a la poesía… no humillados, no hambrientos, no ignorantes, no explotados. Contra los intereses bancarios, la plusvalía, las burocracias, los monopolios, las “buenas conciencias”, los redentores, las sectas y los represores. Contra la barbarie y sus noticieros, los decretos presidenciales espurios, los recortes salariales, la desecación del poder adquisitivo… Contra el genocidio en los hospitales públicos, o privados, sin medicamentos, sin gasas, sin platos, sin solidaridad. Contra la miseria intelectual en las escuelas públicas, en las universidades públicas, en los institutos de investigación. Contra el crimen organizado por las burguesías en los recibos de teléfono, la luz, el agua, el gas… Contra el hambre, el desempleo, la vejez náufraga, la niñez desvencijada, el futuro ciego, el pasado amnésico. Contra el capitalismo esquizofrénico, sus bajezas y su odio. Contra el capitalismo bandolero de ojos gélidos. Contra este tiradero de almas machacadas por los lagartos de la usura. Contra la poesía fabricada para la vanidad salivosa. Contra todo engendro vomitado a destajo en trances de cursilería negociable. Contra la palabrería santificada entre genitales de calenturas patrioteras. Contra los retruécanos eyaculatorios de poetastros y sapos neonadaistas complacientes con la burguesía. Hay riesgos como nunca en las circunstancias presentes. Es imposible prolongar esto que vivimos, es inútil aferrarse a este muladar. Somos reos de la miseria y la barbarie.
Duerme el corazón en mi pecho, esperando, con paciencia, gritar aquello que lleva dentro. Cosiendo y descosiendo sus labios en noches cuando solo le escucho yo. Me estremezco entre mis brazos, al son de la lluvia. Iluminada únicamente por la luna temiendo la oscuridad.
Y quizá, solo quizá mi Invierno se cuele por un resquicio congelándote eternamente.
Hay que ir el 30 de octubre, favor llevar varias cruces de Maroro para un responso en memoria de los 40 millones de asesiandos y nadie lo sabia....
HOMENAJE MUNDIAL A PABLO NERUDA
Conferencia de RAÜL HENAO: "Las alturas de Machu Picchu de Pablo Neruda".
Presentación de la Revista Prometeo # 93
Martes 30 de Octubre. 6 y 30 p.m.
Auditorio de Confiar Cooperativa Financiera (Calle 52 # 49-40, Avenida Primero de Mayo, Medellín)
Invitan:
Movimiento Poético Mundial
Festival Internacional de Poesía de Medellín
Es de veraz muy transcendental que el ahora nerudiano, de afán, Raúl, “Claveles Rojos”, Henao lleve una pipeta de oxigeno para que analice las alturas de Macchu Picchu porque allá estaremos. Y también le recomendamos que lea a Tagore y que no llore.
“En Neruda toda su obra es plagio total, hasta los títulos: del Canto Secular, de Horacio él “asimila” el Canto General, del poeta argentino Luis Enrique Ramponi saquea Macchu-Picchu plagiándola y copiándole a La Piedra Infinita; copia a Tagore y a Carlos Sabat Ercasty en los 20 Poemas y El Hondero Entusiasta, a Baudelaire, Rimbaud, Chenneviere y saqueándome fabrica, pre-fabrica, contra-fabrica el ágape nupcial de su poética en retórica pálida; me imita la épica social en versos de asno, y los endecasílabos de gran pacotillero que De Luigi le advierte, cortados en pingajos, son plagios de plagiario y son plagios plagiados o copiados con vil intención de comercio”.
En lo que terminó el gran poeta Hermético de Medellín, Raúl, “Claveles Rojos“, Henao, dando conferencias sobre Neruda. La próxima, y la tiene que dar, es sobre la KGB.
La mala noticia: De cuando Pablo Neruda plagió a Miguel Ángel Macau sólo está a la venta en Bogotá y su edición es reducida puesto que la publica una editorial independiente. En todo caso, si alguna librería lo llevara a Chile, no dejaré de avisarles.
La buena noticia: Su autor me ha permitido reproducir las estrofas de los poemas en conflicto. Sírvanse hacer de jueces ustedes mismos, estimados lectores:
“Los nautas”,
tercera estrofa
Amo el amor de los marineros
que besan las mujeres y se van,
dejando una promesa de naufragios
para huir y no volver jamás.
Vienen a la vida entre los brazos
de los trigueños cantos del azar,
y una noche se acuestan con la muerte
en el lecho letal de la mar.
Tercera parte y quinta estrofas de “Farewell”
Amo el amor de los marineros
que besan y se van.
Dejan una promesa.
No vuelven nunca más.
En cada puerto una mujer espera,
los marineros besan y se van.
Una noche se acuestan con la muerte
en el lecho del mar...
los neo y su nao naufraga
los neo nadita de nada
los neo nada que ver
Este blog está cerrado por inventario.
Solo se encontró veneno en el depósito.
La década de los sesenta y sobre todo el año 1968 del pasado siglo son recordados como una época de insurgencias donde se cuestionó, efímera o profundamente esa es otra cuestión, al orden establecido. Lo que se deja de lado es que fue también una época de crueles represiones y desilusiones que dejaron sentado para las jóvenes generaciones que se creían protagonistas del cambio que el poder es represivo y se ejerce más allá de los principios que defiende o dice defender. Uno de los casos, el más cercano a nosotros, fue la matanza ocurrida en México, en Tlatelolco, en que estudiantes universitarios fueron asesinados por órdenes de un Gobierno heredero de la Revolución Mexicana. El otro, la invasión de las tropas del Pacto de Varsovia, léase de la Unión Soviética y de sus países satélites, a Checoeslovaquia que vivía unos meses de una nueva experiencia, la democracia, que fue bautizada como la Primavera de Praga.
La Primavera de Praga no fue una revuelta nacionalista. Fue el intento de hacer de la democracia la piedra angular del socialismo como señala Teodoro Petkoff en uno de sus libros. Porque democracia nunca existió en el modelo político y económico asumido por la Unión Soviética, y trasladado sin más a los países que fueron liberados y ocupados por sus tropas durante la II Guerra Mundial.
Es tan verraco Raúl “Claveles Rojos” Henao que en la conferencia sobre las bajezas de Neruda en Machu Pichu, irradiará el surrealismos hacia el estalinismo y no le dará vergüenza.
De tal manera de pierde el ultimo poeta independiente de la historia del país.
just stopping by to say hi
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