¿QUÉ ES EN
DEFINITIVA MEDELLÍN?
Darío Ruiz Gómez
“Medellín” es el
sobrenombre de un siniestro narcotraficante
en un film de Villeneuve, a Chomsky el gran pensador se le atribuye la
expresión de que Medellín es un invento de la DEA, y desde luego en la película
sobre la azarosa vida como narcotraficante de Barry Seal, Medellín es el eje de
su vida de traficante. Medellín no ha dejado de estar presente en el imaginario
de series de t.v internacionales sobre
narcotráfico al lado de Nueva York, Chicago, en el Nápoles de Saviano
que parece filmado en las calles de nuestra ciudad, con los muchachos lanzados al sicariato. Un remake, tiene uno la
impresión, de una película de Víctor
Gaviria. Y ahora en España se vuelve a hablar del modelo Medellín del
narcotráfico a raíz del dominio de la droga en la zona de Algeciras. Y de
nuevo la Comuna 13 haciéndonos revivir infaustos recuerdos del pasado de suma
violencia que vivimos entre masacre y masacre sin que hasta hoy hayamos sido
capaces de ir más allá de unos estereotipos creados por la imaginación de
otros buscando escenarios propicios para replantear las eternas historias de las ambiciones que degradan hasta cero la
noción de lo humano. Comenzó el zafarrancho y de frente nos impactaron los efectos directos de esos desafueros, la
destrucción de nuestro hábitat, el escupitajo a nuestras tradiciones necesarias, la agresión
contra nuestros párvulos en las escuelas, contra nuestra adolescencia, contra
nuestra democracia y naturalmente contra nuestra ciudad, la agresión al libre
derecho a la circulación por cualquier territorio. Y un crimen de lesa
humanidad que no ha dejado de crecer: los desplazamientos de población con
fines de especulación urbana. ¿Ha
entendido nuestra justicia la gravedad de un trastorno social que ha ido deteriorando cada uno de nuestros estratos sociales; o lo sigue mirando como un problema para Inspectores y jueces? Recordemos
la relación directa que se establece siempre entre una economía tercerizada y el crecimiento de la corrupción oficial pero también recordemos que esta tercerización
es el triunfo de la economía impuesta por las mafias en su invasión de los espacios públicos. La destrucción de
las ciudades es una catástrofe indicativa de la degradación de una sociedad.
¿Cuántos desplazados del Chocó, del bajo Cauca traen a Medellín semanalmente los
coyotes ilusionándolos con la promesa de que tendrán vivienda, subsidios? ¿Cómo llamar a ese terrible espectáculo de
desorden, promiscuidad, riesgo que supone la invasión despiadada de las
laderas? ¿Cuál ha sido la respuesta a este peligroso desorden urbano? ¿Podemos
seguir refiriéndonos a un Medellín a
escala humana que fue desbordado hace tiempos por la presencia de otras etnias,
de nuevos poderes económicos en juego? ¿Y los más de cincuenta mil muertos que
dejó la guerra de Pablo Escobar es un pasado olvidado o un problema que nos
implica a todos sin excepción y nos hemos negado a asumir?
¿Cuál ha sido la respuesta
urbanístico a esta atomización del territorio? ¿Está integrada a la malla de la
ciudad la Comuna 13 – al igual que todas las demás Comunas- o es otro gueto producto de la terrible inequidad social
que vivimos? Medellín con su dispersión urbana con su desconocimiento de los ciudadanos, y de la ciudadanía es una no
ciudad. Y esta distopía ¿quiénes la piensan o asumen o se hacen responsable de
ella? ¿Dónde están los filósofos, los sociólogos, el pensamiento político? La
crisis de esta ciudad es una crisis moral que no puede seguir tratándose por
las autoridades como un caso de policía, como un problema de pobres.
1 comentario:
dònde encontrar un antinauseas?
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