Foto de Manuel Mesías |
CUESTIÓN DE INVASORES E
INVADIDOS
Darío Ruiz Gómez
En una interesante
conversación entre la directora de un programa cultural de TV Capital y un
antropólogo narró éste su trabajo con un grupo de campesinos de la Sierra
Nevada que al darse cuenta de las más que notorias ventajas les otorga a la
etnias la Constitución de 1991 decidieron de común acuerdo convertirse en un
grupo étnico indígena y para ello necesitaban , claro está, de inventarse un
pasado, de diseñase unos trajes prehispánicos –como de siempre lo han tenido
por ejemplo los arhuacos- una música, una arquitectura y unos ceremoniales. En
un video vi los deplorables resultados de este intento de involución histórica,
los caricaturescos trajes, las caricaturescas ceremonias “ancestrales”
Recordemos una vez más la esperpéntica ceremonia a orillas del Titicaca en que
un sacerdote inca ungió como el Manco Capac sobre la Pacha Mamá a Evo Morales
quien renunciaba a su educación cristiana para habitar entonces en los espacios
de las ancestralidades incas. Lo que siguió a esta ceremonia fue conocer el gusto
de Evo por los hoteles de lujo, por la vida de gran refiné mientras los
verdaderos herederos de los incas siguen sumidos en el atraso y la miseria.
¿Qué beneficios económicos y sociales les ha llevado al pueblo indígena de
Chiapas el Comandante Marcos, un blanco que fuma su pipa londinense por entre
un hueco de la máscara que lo oculta? Una cosa es la cultura indígena y otra la
ideología política del indigenismo explotado por líderes de ocasión a través de
un perverso identatarismo tal como lo he venido analizando. La comunidad Misak
que antes conocimos y admiramos como el pueblo guambiano, habitantes de un
paisaje de gran belleza y con tierras otorgadas por el Gobierno en una
extensión de más de dieciocho mil hectáreas irrumpe a través del llamado Paro
Nacional Armado como la desafiante avanzada del movimiento de derribo de
monumentos conmemorativos de figuras como Belalcázar acusado de genocida y de
violador de las mujeres indígenas. Recientemente en la llamada toma de la
Capital los Misak en un grupo pequeño pero muy belicoso intentó destruir los monumentos a Colón y a la Reina
Isabel la Católica alegando a través de su portavoz “La necesidad urgente de
castigar a estos genocidas y violadores borrándolos de nuestra historia” El
“Black lived Matter” norteamericano en versión Misak, la
fatal fobia a lo que suene a España en el populacherismo de López Obrador.¿ Un hijo de la sagrada
Pacha Mama, en bluyines, en medio de las
balaceras en los mares de coca de poblaciones tan castigadas como Caldono o
Toribío? En la Constitución de 1991 se permitió a nombre de “el derecho de las
culturas indígenas a su propia identidad, borrar una conquista como la ley
universal para permitirles regresar a algo tan monstruoso como el cepo o los
cincuenta azotes por un asesinato.
El deber de un observador de
estos movimientos consiste siempre en hacer preguntas sobre temas despertados
por estas manifestaciones de un indigenismo manipulado: ¿Al recuperar sus
territorios su deber no consistía y consiste en establecer una sociedad que
respetando su pasado pudiera dar libre paso a las conquistas del progreso como
el derecho de cada quién a elegir libremente un destino en el pluralismo?
¿Cerrar fronteras y aislarse no es conducir a una comunidad a la autodestrucción?
¿Puedo yo libremente ir a Caldono, Silvia, Toribío y exhortar a las comunidades a elegir sus verdaderos
representantes? ¿Puede en una democracia permitirse que se establezca la
dictadura de un grupo recurriendo a falsos derechos étnicos? Si no ustedes ni
yo podemos invadir cualquier territorio
indígena para ofrecer otros discursos distintos a los impuestos por sus
dictadores; cómo puedo permitir que ellos
invadan y atropellen territorios que no
son los suyos destruyendo monumentos erigidos por una cultura que es distinta a
la suya porque existe la cultura de
origen hispánico, una lengua a la cual nos sentimos honrados de pertenecer, una
herencia cristiana. De manera que con violencia y demagogia no pueden aspirar a
que se les guarde el debido respeto y a que continuemos aspirando a una
integración de las comunidades desde la equidad y sobre todo desde la libertad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario