LA CONEXIÓN CATALANA / Darío Ruiz Gómez

 LA CONEXIÓN CATALANA

Darío Ruiz Gómez

Alirio Uribe – Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo de las Farc- -coloca su rostro mofletudo de piel rosácea que recuerda inevitablemente a uno de esos funcionarios  que el cine  sobre el estalinismo  en  la Unión Soviética nos ha dado a conocer. Beria era así, el temible funcionario que ciegamente seguía las órdenes del Dictador ya que era lo único que sabía hacer. Ahora sentado frente a las cámaras del noticiero NTV cuando la presentadora le indaga sobre los sucesos de la plaza de los Héroes y la llamada Primera Línea,  va repitiendo el mismo discurso-disculpa al cual recurre en cualquiera de los casos  en los cuales aparece  sindicada  las FARC. “Es mentira que esos muchachos sean terroristas ya que el entrevistarlos descubrimos  que eran repartidores de comida a los pobres,  hijos de familia, virginales estudiantes”. Por lo tanto nosotros debemos decir, “lo que vimos no lo vimos”  y por lo tanto  los documentos de t.v son falsos, fake news de Duque ¿De dónde emergen esos atletas que después de cambiarse de ropa se lanzan como  robots  a arrasar a los grupos de policías, a destrozar los negocios de pequeños comerciantes, las vidrieras de grandes almacenes y después olímpicamente  regresan a sus campamentos? Tuvimos  por delante un hecho de violencia movido con presteza por la mano de los estrategas de una política  desestabilizadora  sincronizada a través de las plataformas rusas en Venezuela y que calificarán eufemísticamente  como “estallido social”.  Ya sobre esto he escrito mucho pero lo que quiero en este caso donde todo un Viceministro entra a un tanque y da la orden de libertad para dos muchachos sorprendidos por la policía in fraganti, donde un atónito Director de la Policía ante su vehículo seriamente averiado por los pedruscos lanzados por los terroristas no atina a dar una explicación clara y condenatoria de lo que constituye un atentado terrorista es demostrar  que no son hechos espontáneos realizados por jóvenes inocentes sino estrategias fríamente calculadas por un extremismo fascista.

En una  de las primeras multitudinaria marchas  de la Primera Línea y al llegar al Portal de las Américas – tal como lo señalé en su momento- me llamó la atención una  bandera  de la CUP – Candidatura de Unidad Popular- catalana el grupo más leninista  y que predicó y ejerció la violencia más intensa contra la Guardia Civil, contra la ciudadanía, hispanoparlante, el comercio; todos ellos  jóvenes de la clase media y de la aristocracia,  buscando “la desestabilización de  Europa” y que se conectó con los más importantes grupos de terroristas en el mundo. Por lo tanto comencé a investigar hasta dar con una entrevista hecha a una de sus más enérgicas dirigentes y  que defendió el terrorismo y admitió  la conexión con las Farc. En el importante diario democrático  “Voz populi” encontré este lunes 24  de octubre el encabezado de una noticia: “Un CDR –Comités de Defensa de la República- intermedió entre la CUP y las FARC en pleno desafío independentista”  Se trata de Robert Morrat Segura quien narra esta conexión cuando informa que “debió  asistir a la presentación de un libro  sobre las FARC escrito por un periodista colombiano y él fue el encargado de hacer la presentación” Se cumplía  la política de la CUP de tener conexión con un grupo terrorista que se identificaba  con su lucha y a la cual como se vio ha seguido prestando asistencia técnica. Preguntas pertinentes: ¿Quién fue el periodista de las FARC autor del libro que Morrat  presentó y que hizo de estafeta entre los dos grupos terroristas? ¿Porqué las prisas de las FARC para borrar esta conexión con ese grupo terrorista?