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| Guillermo Alvarez |
Poemas /
Guillermo Alvarez
Un viento helado con sus brisas
Se ha llevado mis temores
se ha llevado mis lágrimas
se ha llevado mis fulgores
se ha llevado mis sonrisas
Y me va llevando con él
Tiempo cruel
Tiempo cruel
Que destellen por los aires mis sesos sin ideas
Que en incendio y fuego mis pasiones ardan
Acelera el pulso de mi sangre y se revienten mis venas en acuarela de adioses sin macabras o embusteras carcajadas
Embriagante licor: atúrdeme y aligérame.
No puedo, no puedo esperar
Ya debo cruzar los umbrales sin pórtico
Y en sintonía con el hermético no leer relatos de pueblos y patrias de papel
No me llevaré nada, porque no voy de viaje, me voy y me quedo en el afuera en el eterno inmanente fluir del río
Llévame
........
Nos disparan a los ojos
Nos quieren cegar los ojos
Nos quieren robar los sueños
Pero en la oscuridad
Con más ímpetu late el corazón en resistencia
Porque pierdo el ojo pero no los sueños
Y a la marcha vengo a ofrendar mi corazón
...
Al son del río voy
con todos los musgos
Huyendo a los dioses
Con todos sus dones
Desdivinizado soy
Plebeyo, pagano y paria
Bastardo hijo de ramera
Pero de fuertes cojones
soy en mi fe sin plegaria
Ni credo ni catecismo
Tiro saetas no tablas
Estoy afuera del abismo
Bordeo el acantilado y escucho mudas palabras
La deconstitucion
La arrogante ignominia
Cínica, perversa y cruel
Matizada con la macabra carcajada del verdugo que funge presidente
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