tag:blogger.com,1999:blog-20228956393948372352024-03-06T01:00:07.269-05:00Neonadaísmo2011Este blog, en permanente construcción, hace parte de una revisión de los textos iniciáticos nadaístas con el propósito de mantener nuestra fe intacta en algunos de ellos. Podríamos decir que es una versión remasterizada, con inyecciones letales de cinismo y humor negro, de esta doctrina creada, simultáneamente, en Medellín y Cali.
Mantenemos la fe intacta en la creación libre. Somos icoñoclastas por naturaleza.
neonadaismo@gmail.comVíctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.comBlogger1523125tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-3575023939440456032024-03-06T00:59:00.003-05:002024-03-06T00:59:23.419-05:00Casa de Guillermo Cabrera Infante en Londres<p style="text-align: justify;"> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdagwmOF6TBwkLQ-maG2FEi5uDrAP5yi9Jb4MoN0YeWm5gQDwwryIYlhq087ycMsh14b9stTkQ_hkpCyrUEcKuKCG9hCjCxe4-TFMzBzJ88r61zTG1cjIdytis-mNgvZjdw7icyQfLrI3PNwEbAMNGabrdQNRsFd9YmnPaiHr22LKsp_iowyB8S43e2To/s850/Guillermo-Cabrera-Infante.webp" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="532" data-original-width="850" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdagwmOF6TBwkLQ-maG2FEi5uDrAP5yi9Jb4MoN0YeWm5gQDwwryIYlhq087ycMsh14b9stTkQ_hkpCyrUEcKuKCG9hCjCxe4-TFMzBzJ88r61zTG1cjIdytis-mNgvZjdw7icyQfLrI3PNwEbAMNGabrdQNRsFd9YmnPaiHr22LKsp_iowyB8S43e2To/w640-h400/Guillermo-Cabrera-Infante.webp" width="640" /></a></div><br /><p></p><p style="text-align: justify;"><span style="color: #ffa400; font-size: large;">Casa de Guillermo Cabrera Infante en Londres</span></p><p style="text-align: justify;">No , aquí no hay ninguna placa azul. " " Increíble. Vivía aquí, según tengo entendido. “ Bueno , no. Sin placa azul. Quizás algún día… ” Quizás algún día, me repito. Quizás algún día… ¿Tengo la energía para iniciar una campaña de placa azul para honrar y celebrar la vida y obra de uno de los escritores más destacados de Cuba? ¿Uno que hizo de Londres su residencia durante décadas? He salido de la estación de metro de Gloucester Road, buscando el número 53 de la calle del mismo nombre. Un rayo de sol al final de la tarde se desliza por las columnas encaladas en esta zona acomodada del suroeste de Londres. Estoy de camino al Goethe Institut para ver el estreno de “ Victoria ”, pero primero necesito echar al menos un vistazo a lo que creo que fue la casa del fallecido escritor cubano Guillermo Cabrera Infante. Lo encuentro fácilmente, rodeado discretamente de casas adosadas a ambos lados. Quiero tomarle una foto pero me doy cuenta de que el dueño ha llegado al mismo tiempo. Sólo uno de nosotros es el intruso y después de una breve sesión de preguntas y respuestas sobre la inexistente placa azul, me doy la vuelta para reanudar mi caminata. Pero no sin antes robarnos un momento fotográfico. Después de todo, me convenzo, es lo que Cabrera Infante hubiera querido. El hombre nacido en Gibara que se enamoró de La Habana y sus encantos cuando tenía doce años habría aprobado mi pequeña transgresión. Construyó una destacada carrera literaria escribiendo sobre los innumerables personajes que desafiaron el status quo, ya sea antes o después de Fidel. Su obra más conocida, Tres Tristes Tigres (literalmente, Tres tigres tristes , en honor a un famoso trabalenguas español) fue un homenaje a la vida nocturna de La Habana. Borrachos, drogadictos, prostitutas, proxenetas, artistas y políticos llenaron sus páginas. Es lógico que me haya detenido frente a su antigua morada mientras el crepúsculo me envuelve y una puesta de sol teñida de magenta adorna mágicamente Londres. Las sombras se alargan. Quiero explicarle al dueño de la casa que el hombre que vivía aquí, en 53 Gloucester Road, fue comparado a menudo con James Joyce ( TTT fue llamado en algún momento la respuesta cubana a Ulises ) y, sin embargo, siempre me ha parecido engañosa esa comparación. Joyce se centró en el Dublín diurno, mientras que Cabrera Infante se centró en La Habana por la noche. Camino por Exhibition Road recordando lo que más me atrajo de Tres Tristes Tigres . No fue sólo la trama, o la falta de ella, o la atmósfera seductora de los bares y cabarets que frecuentaban los personajes de Cabrera Infante. Fue, sobre todo, el homenaje del autor a la lengua, a la bella y a menudo incomprendida –en ocasiones ridiculizada– lengua vernácula cubana.</p><div><div>Con el sol que desaparece rápidamente detrás de mí, me hago de nuevo la pregunta: ¿tengo energía para una campaña de placa azul? Quizás algún día, quizás algún día…</div></div><div><br /></div><div><i>De Diario Urbano</i></div><div><i><br /></i></div><div><i><br /></i></div><div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0Fh1h62qyvVzqELf7k4woAaebni5ABdy6hFqhcujcmamW_q3r2s2pGw_mSX3o7D9P30IjMJTqwrgK4AEb9mSG1SWPCWH-A9etCoVWWdiH3jeR7c_LWb9oYgxCrA_8lzRoGKN_a0UikbyffOh16Ffr-qCp5zzFIpGnnwG-jUGGTF3I930WntoJlks2oug/s504/Gloucester+Road%20-%20copia.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="504" data-original-width="337" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi0Fh1h62qyvVzqELf7k4woAaebni5ABdy6hFqhcujcmamW_q3r2s2pGw_mSX3o7D9P30IjMJTqwrgK4AEb9mSG1SWPCWH-A9etCoVWWdiH3jeR7c_LWb9oYgxCrA_8lzRoGKN_a0UikbyffOh16Ffr-qCp5zzFIpGnnwG-jUGGTF3I930WntoJlks2oug/w428-h640/Gloucester+Road%20-%20copia.jpg" width="428" /></a></div><br /><i><br /></i></div><div><i><br /></i></div><div><i><br /></i></div><div><i><br /></i></div><div><i><br /></i></div>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-68035472451022307972024-03-06T00:09:00.003-05:002024-03-06T00:09:37.634-05:00<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh_TrSnb8Q2BcbPJJQlOT8udPLdP1Or_vFoc9nIrYvIGAsUxx5Zmlky3esquMqioX4uAaYy0eSzJZFZEGgwUa1X_uV0c2daYsg_l2rKt8RKD1YPYdY9DbZfAIPiyWzPZQwEJUiK-GqchSvcqCJ4eJRLMbGKQwtOyA9r9ksewML-PAEhjLAIZahEIRFRpTI/s432/45.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="432" data-original-width="290" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh_TrSnb8Q2BcbPJJQlOT8udPLdP1Or_vFoc9nIrYvIGAsUxx5Zmlky3esquMqioX4uAaYy0eSzJZFZEGgwUa1X_uV0c2daYsg_l2rKt8RKD1YPYdY9DbZfAIPiyWzPZQwEJUiK-GqchSvcqCJ4eJRLMbGKQwtOyA9r9ksewML-PAEhjLAIZahEIRFRpTI/w430-h640/45.jpg" width="430" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><b><span style="color: #ffa400;">ESCRIBIRLO PARA NO MORIR</span><o:p></o:p></b></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><span style="color: #fcff01;">Efraín Alzate Salazar <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">La escuela de la ternura Aquellos días cuando fuimos por
primera vez a la escuela nunca se olvidan, por tanto, significan una ruptura de
un ritmo de vida hogareño con los cuidados de la madre y las travesuras con los
hermanos que, aunque sean mayores, están ahí para ser alcahuetes de picardías y
mentirillas. De niño soñaba con una escuela linda con ruidos y cantos, con
maestros y maestras alegres, y leyendo cuentos y fábulas en donde los animales
son como personas. Mi madre sabía leer y escribir y su letra era bonita cuando escribía
su nombre en las notas </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">que mandaba a la escuela a la maestra.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Recuerdo los cuentos que me leía en voz alta cuando yo no
conocía las letras. En la casa en el campo, hubo una cartilla que se llamaba La
alegría de leer. En ella había un cuento que mi madre leía y me daba mucha
tristeza porque era la historia de “El molinero, su hijo y el borrico”, sentía
deseos de llorar al saber que el burrito se caía patas arriba en un torbellino
de agua porque no era <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">capaz con la carga tan pesada. Mi madre decía que eso era
un cuento para indicarles a las personas que a los animales había que tratarlos
con amor. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Cuando aprendí a leer ese libro siempre estaba en mis
manos porque sus cuentos tenían bonitos dibujos y era feliz leyendo despacio
por sílabas hasta que terminaba.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Mi escuela fue una sorpresa y un mundo de preguntas con
pocas respuestas. Los niños no podíamos preguntar sino responder a lo que la
maestra preguntaba. De niño quería saber muchas cosas, pero no era posible. La
maestra siempre nos tenía ocupados haciendo dibujos o planas de escritura que normalmente
eran con respecto a la escuela, a mi familia y a la naturaleza. “Mi mamá me
ama, mi mamá me mima”. Esta última no era verdad porque mi mamá no tenía tiempo
para dedicarle a un niño, ya que éramos muchos en la casa y no había atenciones
especiales para nadie. Aun así, escribíamos la frase una y otra vez hasta
llenar la plana tal como indicaba la maestra. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Ya en la vida de adulto conocí un poema de un amigo que
me llevó de inmediato a la maestra que me enseñó a leer, aunque la maestra a
quien él se lo dedicó fue a la señorita Gilma, pero así de linda era mi maestra
la señorita Blanca: <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Usted tenía las manos
de ternura y tiza Señorita Gilma. Qué lección tan preciosa escondía bajo su
falda pulcra. Usted tenía los ojos grandes como los soles que pintaba en el
tablero</i> (Fragmento del poema La maestra de escuela) (Rendón C, 1987).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Al llegar a la cumbre de la vida, a ese momento en que es
posible hacer un sencillo inventario de las cosas que se han hecho o se han
dejado de hacer, acudiendo con alegría a los recuerdos, es placentero poder
contar aquello que se ha convertido en parte de nuestro equipaje y que seguirá
enriqueciendo la memoria por siempre: las vivencias de la infancia, y dejar de
paso un mensaje <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">de imaginación y alegría a los maestros que asumen la
bella tarea de enseñar a los niños el alfabeto, el amor y de vida. Guardamos en
los repliegues más hondos de nuestro ser todo aquello que nos hizo más felices,
o también los eventos que más dolor nos ocasionaron. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">En esta autobiografía quedan plasmados los pasos dados
desde la infancia por alguien que llegó a ser “feliz maestro de escuela”, y que
además recorrió los diferentes escenarios de la educación intentando dejar una
huella en niños y jóvenes. La señorita Blanca es el referente amoroso de un
niño que guardó en la memoria los trazos y dibujos del amor convertido en
letras de colores. Es posible que de niño nos enamoremos de la maestra que nos
trata con amor, pero es ese amor limpio que fluye de los meandros más ocultos
del sentimiento humano, y se queda para toda la vida. Lo más lógico es que uno
guarde por siempre el sentimiento del amor por aquello que le proporcionó
alguna felicidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">De niño experimenté también el trato rudo y el castigo
doloroso por parte de maestros que consideraban que esa era una forma de educar
y de enseñar. En mi caso, solo lo guardé para contarlo, aunque aún resuenan en
mi oído los insultos y agresiones que recibía y que hoy creo que fueron
momentos de tristeza en la escuela en donde solo debe haber espacio para la
alegría, el canto y el juego con los niños. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Estos castigos no eran aislados, sino que obedecían a una
estructura escolar en la que se formaban los hombres y mujeres para un país de sometimiento
a los poderes establecidos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">En estos tiempos de la escuela de “La letra con sangre
entra”, el castigo doloroso con todos los malos recuerdos que se quedan, no era
entonces un acto salvaje de violencia, ni de venganza individual, tampoco de
represión institucional; el castigo escolar se encontraba ligado de modo
indisoluble con los fines sociales asignados al hecho de mantener juiciosos y
agrupados a los niños fuera de su hogar. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">En
esencia el castigo estaba vinculado con los fines político económicos como la
formación de hábitos de obediencia, disciplina y trabajo. </i>Sáenz, Javier.;
(Saldarriaga, 1997). <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">En la escuela de mis años infantiles se practicaba con
tranquilidad la pedagogía del dolor, era algo válido en los manuales de trabajo
docente y no era mal visto ni por la familia ni por quienes regulaban la
educación. Creo que la sociedad que se buscaba forjar para la época era la de
la sumisión, la aceptación y el silencio. El coscorrón, el reglazo, las
cuclillas, el dejar sin el <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">recreo, eran prácticas cotidianas, pero a estas acciones
tristes se calmaban con el mero recuerdo de la ternura y el amor de la maestra
que me enseñó a leer y este es el que perduró en mi mente. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">La señorita Blanca era mi refugio cuando sentía la
tristeza por los tratos agresivos de la maestra que me enseñaba a multiplicar y
a dividir. Con mis ojos bañados en lágrimas me dejaba ver de la señorita Blanca
para que me diera un momento de consuelo al abandono en que me sentía con la
castigadora maestra que enseñaba matemáticas con una regla gruesa para quien se
equivocara. En mi vida de maestro de escuela, siempre he considerado que la
educación empieza con la vida y no acaba sino con la muerte. (Efraín., 2020)<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Bibliografía.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Efraín., A. S. (2020). Escribirlo para no morir. De la
tesis de grado para Optar el titulo de Mg en Educación. Rionegro. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Repositorio. Universidad Católica de Oriente. ( apartes)<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Rendón C, E. (1987). La ciudad sonámbula. Medellín:
Lealon.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Saldarriaga, O. y. (1997). Mirar la infancia. Pedagogía,
moral y modernidad en Colombia 1903-1946. Bogotá: Ed. foro<o:p></o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-39770087871323263322024-03-05T23:47:00.002-05:002024-03-05T23:47:20.594-05:00Una conferencia hace cien años. Destruir prejuicios es el papel del pensamiento universitario / Rafael Rubiano Muñoz<p><span style="font-size: large;"><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7Gwgsepqsn-SXazAsgS1mME5xOtlDku6kXET021uQLWJrVa8vNsjy137xu5DyDuDkJ8i38lgJySmgxO8GR8CGpAhPAghon2vMd78nb7ukwA7ycXy9yvWQ_oKLlaMz-0z3wSuOLEA4foVQipdBVGQn-0ScnPc2qwnnrd_Sq5N3w-Bw1YYg8O90TLn301U/s507/unnamed.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="507" data-original-width="366" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7Gwgsepqsn-SXazAsgS1mME5xOtlDku6kXET021uQLWJrVa8vNsjy137xu5DyDuDkJ8i38lgJySmgxO8GR8CGpAhPAghon2vMd78nb7ukwA7ycXy9yvWQ_oKLlaMz-0z3wSuOLEA4foVQipdBVGQn-0ScnPc2qwnnrd_Sq5N3w-Bw1YYg8O90TLn301U/w462-h640/unnamed.jpg" width="462" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Wieslaw Walkuski</td></tr></tbody></table></span></p><h2 style="background-attachment: initial; background-clip: initial; background-image: initial; background-origin: initial; background-position: 0px 0px; background-repeat: initial; background-size: initial; border: 0px; box-sizing: content-box; clear: both; color: var(--on-bg-dark); font-family: Merriweather, serif; line-height: 1.4; margin: 0px; outline: 0px; overflow-wrap: break-word; padding: 0.5em 0px 0.3em; vertical-align: baseline; word-break: break-word;"><span style="color: #ffa400; font-size: x-large;">Una conferencia hace cien años. Destruir prejuicios es el papel del pensamiento universitario</span><span style="font-size: x-large;"> / </span></h2><p><span style="color: #fcff01; font-size: large;">Rafael Rubiano Muñoz</span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">El 10 de abril de 1924, Baldomero Sanín Cano (1861-1957)
expuso una conferencia en el Salón de <i style="mso-bidi-font-style: normal;">la
Unión Ibero-Americana </i>en Madrid ante un selecto y prestigioso grupo, entre
ellos fueron invitados la mayoría de embajadores de los países sur y
centroamericanos, así mismo asistieron connotados letrados europeos de esos
tiempos. El rionegrero después de haber sido ministro de hacienda durante el
gobierno frente nacionalista de Rafael Reyes, fue enviado a Londres en febrero
de 1909 para resolver el litigio de la explotación de esmeraldas por compañías
inglesas en nuestro suelo. La conferencia la tituló: <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Las revoluciones hispanoamericanas</i> (1), no por casualidad ese año
se celebraron, los cien años de las independencias latinoamericanas con la
batalla de Ayacucho que cerró la amplia coyuntura emancipadora tras la invasión
de Napoleón Bonaparte en 1808 a España. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Sanín quien a partir de la <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Primera Guerra Mundial</i> se incorporó al diario La Nación de Buenos
Aires, primero como periodista cubriendo la conflagración armada con Salvador
de Madariaga, luego se convertiría en agente y representante del diario desde
1923 y se desplazaría a Buenos Aires en 1925, se ocupó en esa conferencia - y
hacía una década en decenas de artículos-, a confrontar las raíces
intelectuales del imperialismo colonial occidental, criticaría las bases
culturales del nacionalismo racista europeo y unos años antes con la revista <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Hispania</i> (1912-1916) editada en Londres,
junto a Santiago Pérez Triana quien fue exiliado por Miguel Antonio Caro
durante la <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Regeneración</i> – otros
liberales fueron encarcelados y se les aplicó la pena de muerte – se plegó al
antiimperialismo norteamericano, tras la guerra de 1898, el colombiano defendió
la España secular y liberal e hizo una tarea de promover y salvaguardar la
identidad de los latinoamericanos ante la voracidad de las <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">potencias de la época. Dichas potencias aspiraban a
invadir nuestras tierras en busca de recursos naturales y poder político, Sanín
atacó con solvencia jurídica y política la Doctrina Monroe que era dominante y
fue un adalid del derecho internacional como medio para regular las guerras y
los conflictos mundiales, entre otros compromisos que asumió.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Por la pérdida de Panamá en 1903, Sanín fue decidido
antiimperialista y en particular crítico de los Estados Unidos en su política
exterior, porque pese a ello admiró sus letrados e intelectuales. Embajador,
periodista, docente, conferencista, intelectual comprometido y actor
fundamental de la cultura impresa latinoamericana, Sanín llegó a saber 9
idiomas, fue traductor del alemán a finales del siglo XIX en Colombia, incitó a
José Asunción Silva y a Guillermo Valencia a leer autores daneses, italianos,
franceses y de otras latitudes y conformó la generación modernista
latinoamericana lo que se evidencia al revisar la <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Revista Contemporánea</i> (1904-1905) impreso que dirigió en Bogotá.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Este insigne letrado, un liberal de izquierda muy
moderado, se centró en dos propósitos en esa conferencia: 1) Demostrar a su
audiencia la variedad de prejuicios existentes sobre los latinoamericanos, en
especial, los que nos juzgaban como raza inferior y ante todo como bárbaros
proclives a la anarquía y la violencia. 2) contrario a lo que se presumía
sostuvo que en nuestras tierras existía un pensamiento latinoamericano, a la
altura de lo más refinado y avanzado del pensamiento europeo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">La exposición está compuesta de fina ironía y de un excelso
humor, sin vulgarizar y con datos y cifras establece de modo comparativo las
desiguales condiciones que durante el siglo XIX y lo corrido del XX,
instituyeron la percepción de nuestro suelo como uno proclive al vandalismo,
las trifulcas, los disturbios, las guerras y las revoluciones, porque como lo
señala en unos de sus párrafos: “Entre 1870 y 1880 empezó la prensa europea a
distribuir mañosamente la especie de que las Repúblicas americanas de origen
español eran el hogar de las revoluciones, y que allí la vida, por esa razón,
era un tormento… De la Prensa y de los labios de la gente maleante esta idea ha
pasado a las obras científicas, y ha tenido dos protagonistas especiales en
Europa: el uno, el doctor Benjamín Kidd, en Inglaterra; y el otro, Gustavo Le
Bon, sabio más conocido, a quien los periodistas solemos citar con muchísima frecuencia
en las gacetillas y hasta en los artículos de fondo”. (2)<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">El sociólogo y filósofo anglo-irlandés y el sociólogo y
físico aficionado francés, son agudamente discrepados por Sanín, juzga sus
incruentos equívocos con relación a nuestras tierras, su gente y cultura y le
increpa al mismo tiempo al señalar la crueldad y la violencia que algunos
países como Francia, Inglaterra, Alemania, primordialmente agenciaron al punto de
verse involucrados en la más espantosa de las confrontaciones armadas en el
mundo, la de 1914. Advierte que pese a un lento desarrollo social y económico,
el pensamiento y la cultura latinoamericana, la función de los letrados y
letradas ha sido preponderantemente –habrá excepciones claro – la unión y la
fraternidad de nuestras naciones, por el contrario, Europa inventó tras la
primera guerra mundial, el odio racial y el patriotismo enfermizo y fanatizado
e idolatrado, no un patriotismo racional y crítico.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Recuérdese que Sanín escribió en 1914 el ensayo: “El
descubrimiento de América y la Higiene”, donde apoyado en la obra del padre
jesuita Joseph Gumilla destronó el prejuicio de la inferioridad espiritual y
cultural de los americanos ante la conquista española. Esa tarea la hicieron
Miranda, Bolívar y Bello también, por eso Sanín es continental. Valga decir que
ese escrito nunca lo citan (ni lo citarán) los mercenarios intelectuales de la
decolonialidad, naturalmente. Así que en esa conferencia, nuestro compatriota
hizo una tarea que por el contrario ningún político, diplomático, dirigente,
comerciante, comprensiblemente ningún <i style="mso-bidi-font-style: normal;">decolonial,
postcolonial o mercenario</i> del nuevo pensamiento latinoamericano de hoy, adobado
con las epistemologías del sur, hizo o ha hecho tan dignamente como el casi campesino
de Rionegro-Antioquia y es destruir prejuicios y dogmas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Cualquier miembro del <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Alma
Mater</i> si en términos de ética y moral pertenece a la UdeA está llamado a
ser promotor y actor esencial de romper prejuicios y la misión de la educación superior
es demoler formas de pensar y construir miradas diferentes de la realidad. Se constata
que Sanín dictó clases sobre historia española y latinoamericana en Oxford, Cambridge
y Edimburgo, apoyado por el crítico James Fritz-Maurice Kelly. En Madrid igualmente
dictó cursos sobre nuestras tierras y estableció lazos y redes con lo más
selecto de la inteligencia europea y latinoamericana de la época, basta
mencionar con el socialista español Luis Araquistaín, con el anarquista polaco
argentino Samuel Glusberg (Enrique Espinoza), con el socialista norteamericano
Waldo Frank y con el demócrata republicano Joaquín García Monge, entre otros y
otras más del mundo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Ahora, de nada sirve el basto y amplio saber y
conocimiento, son insulsos los títulos que se pregonan, - valga añadir que en
las universidades colombianas hay una devoción irracional y una idolatría por
los títulos de doctorado-, porque jamás el título de doctorado permitirá cumplir
la función neuronal de <i style="mso-bidi-font-style: normal;">desdogmatizar y
desprejuiciar</i>. Hay variedad de doctores y doctoras que vienen en peores
condiciones mentales e intelectuales a la universidad y hubiese sido preferible
que no hubiesen hecho el doctorado, es muy vergonzoso irse en unas condiciones
y llegar en otras desmejoradas, decía Sanín, y agregó que hay quienes viajan “y
vuelven como las maletas”, o dicho desde otro grande, Dostoievski, afirmó que
en Rusia hay “muchos científicos sin obra científica”. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Si el docente en su función intelectual no tiene la
capacidad para destruir dogmas y menos aún tiene la audacia de propender porque
sus auditorios miren con otros ojos y otros lentes la realidad no tiene
correspondencia ni hace mérito al llamado del Alma Mater. A propósito, en la
revista <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Hispania</i> de Londres, Sanín
escribió un artículo titulado: “Las universidades y el espíritu nuevo”, donde planteó
que una renovación a profundidad de los claustros de enseñanza universitaria no
se puede atar y anclar a asuntos curriculares o pedagógicos exclusivamente,
pues lo primero que es fundamental transformar es la capa profesoral, quiere decir,
cambiar sus actitudes y sus mentes, sus formas de pensar, porque de nada sirven
cambios administrativos, si no hay cambios en el pensar y el hacer de quienes
enseñan. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Aprender a desaprender lo aprendido, quiere decir, los
primeros en edificar un deber ético y moral de desprejuiciarse son los mismos
profesores y profesoras: ¿Seremos capaces de desandar lo andado, o mejor decir
desasnarnos para decirlo con Rousseau? Segundo y es capital, la crítica y la
autocrítica, no solamente proponer con argumentos críticos, reevaluar lo
pensado y caminar de otro modo el pensamiento y la reflexión. Y en tercer lugar
establecer puentes, de lo particular y singular a lo universal y global, de lo
micro a lo macro y viceversa, de Latinoamérica a Europa y de una geografía a
otra. Según Sanín Cano, antes que administrar, liderar o gobernar las
instituciones universitarias se debe tener talla intelectual, vale preguntarse
entonces: ¿Tienen los candidatos a la rectoría de la UdeA tal talla
intelectual? No es con títulos universitarios que se tiene tal talla, es con la
magnitud del pensamiento que se forja mediante la lectura, el estudio y la
producción intelectual, de la cultura oral a la cultura escrita, no se es
universitario solamente por el verbo, se es por la acción del pensamiento y
ello se puede realizar con las ideas y con la escritura. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Sin duda, la conferencia de Sanín hace cien años nos
invita a repensar y reflexionar nuestra coyuntura universitaria, los conflictos
externos son minúsculos, ante los internos, de modo que más allá de lo
electoral, de campañas publicitarias para obtener el favor de los votos en el
consejo superior, una cosa es ser candidato a la rectoría y ser rector (o
rectora), otro muy diferente es llegar a la rectoría con talla intelectual, con
una capacidad pensante y reflexiva, no con lugares comunes y con demagogia para
solazar las multitudes de la comunidad universitaria. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">La talla intelectual no la da la respuesta inmediata de
la entrevista para medios y redes, ni los foros con los estamentos, lo da un
recorrido de formación, una apropiación intelectual y de visión de la
universidad, pero lo estimula y lo nutre, ante todo la autocrítica, la
capacidad que se alcance de <i style="mso-bidi-font-style: normal;">desdogmatización</i>
y una perspectiva carente de extremos, amplia, abierta, generosa y en especial
que comprenda - y ante todo sepa resolver que los males y conflictos de la
uni-, están por fuera cierto, pero los más endémicos y terminales están dentro
de ella misma, <i style="mso-bidi-font-style: normal;">hiperburocratización,
corrupción, clientelismo, conformismo </i>y en especial<i style="mso-bidi-font-style: normal;">, </i>una<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> privatización</i> del
entorno y del hacer público de la universidad, un aparente e indestructible soberanía
de grupos privados que son legales e ilegales: ¿Tendrá esa capacidad
intelectual, el próximo o la próxima rectoría? ¿Dirigir la UdeA es un asunto
exclusivo de lo administrativo y burocrático (claro que sí), pero más allá de
lo anterior, el próximo rector o rectora de nuestra universidad será capaz con
mirada humanista e intelectual sortear los conflictos externos, pero sobre todo
los internos que son más agudos y graves que las </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">amenazas foráneas</span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">---------</span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 17.3333px;">1. Sanín Cano, Baldomero. “Las revoluciones Hispano-americanas”. Madrid: ediciones de la Unión IberoAmericana. 1924</span></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 17.3333px;">2. Ibid. p. 5</span></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-43491167063076407772024-02-29T19:17:00.004-05:002024-02-29T19:17:16.669-05:00<p><b><span style="color: #ffa400;"> <span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; text-align: justify;">ACERCA DE AMNISTÍAS </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; text-align: justify;"> </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; text-align: justify;">Y DE VACÍOS</span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; text-align: justify;">
</span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; text-align: justify;">JURÍDICOS</span></span></b></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><span style="color: #ffd966;">Darío Ruiz Gómez<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">“La impunidad es la
manifestación más evidente de la injusticia y la materialización más extrema de
la desigualdad” recuerda Guadalupe Sánchez en “The Objetive”.”La impunidad
nunca da la cara y se camufla bajo distintos ropajes institucionales: la
amnistía, el indulto y el derecho de gracia” El intento de Pedro Sánchez de
acomodar la Constitución española a sus objetivos de conceder la amnistía a los
terroristas catalanes para continuar en su puesto ha llevado a intensos
pronunciamientos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>por parte de prestigiosos catedráticos de
Derecho, filósofos, prestigiosos catedráticos de ética, de Derecho
Constitucional <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>quienes alzan su voz para
que no quede el Estado de Derecho y la separación de poderes en manos de <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>oportunistas. Funcionarios encargados de la
tarea de hacer pasar como correcto lo que es indecorosamente incorrecto, y por
encima de todo la defensa de una democracia cercada por los separatistas en su
afán de desmembrar el territorio español. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>“En un Estado de Derecho el<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>fin no justifica los medios” ya que como
recuerda Manuel Aragón.”Amnistiar <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a
quienes subvertieron el<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>orden
constitucional y que además han reiterado su propósito de volver a hacerlo es
indigno” <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El recurso <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>del dictador<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>en ciernes <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>es desvirtuar
recurriendo a juristas vendidos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el
espíritu de la Constitución <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>en España como lo recuerda Enrique Gimbernat,
Catedrático Emérito de Derecho Penal, “El argumento principal es que el
artículo 62 prohíbe los indultos generales y con<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>mayor motivo <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la amnistía” <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¿No fue Santos quien amnistió de crímenes de
guerra, desplazamientos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de poblaciones,
secuestro y reclutamiento de niños al Secretariado de<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>las Farc<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>para reconocerlos como válidos interlocutores? <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¿No está sucediendo lo mismo pero ahora con
mayor impunidad cuando a dedo se les concede la categoría de interlocutores <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a malhechores <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que
después de firmar un cese al fuego han continuado asesinando, secuestrando? <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¿No es un abuso de poder perdonar <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>por anticipado a los criminales <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sin que antes hubieran rendido cuenta de sus
fechorías? Esta degradación de nuestra democracia se comprueba cuando nuestra
justicia desconoce que un Paro Armado con 70.000 personas aguantando hambre desde
hace años no puede ser amnistiable. “La amnistía es un claro ejemplo de
corrupción política”<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">El Estado de Derecho existe
para detener y condenar drásticamente el sufrimiento que se infringe por parte
de grupos armados a las gentes, a los niños que son asesinados en el ataque a
un bus escolar, en los nativos que son desplazadas en medio del terror, como lo
es el asesinato diario de desprotegidos soldados o policías a manos de los
francotiradores. “ Repito con Alain Finkelkraut, las llamadas mesas de
conversaciones <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>son un sofisma de
distracción para encubrir daños a las comunidades en su libertad de
desplazamiento, en el deterioro de sus valores culturales, en su pérdida
irremediable de referencia a un entorno tal como lo recuerda de manera explícita
la Ley de Víctimas pero lo olvida olímpicamente el madurista Ministro de
Cultura y el Ministro de Justicia. Que Iván Márquez sea impuesto contra lo
que<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>al respecto establece la ley<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>es demostrar <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que el fin justifica los medios y que por lo
tanto<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el Estado de Derecho ha
desaparecido en Colombia. P. D. “La Amnistía en España.Constitución y Estado de
Derecho” Ed. Cólex 20024<o:p></o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-6692139549160974622024-02-29T19:14:00.003-05:002024-02-29T19:14:35.268-05:00LOS INTELECTUALES Y LA PAZ / Darío Ruiz Gómez<p> </p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><b><span style="color: #ffa400;">LOS
INTELECTUALES Y LA PAZ<o:p></o:p></span></b></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";"><span style="color: #fcff01;"><b>Darío
Ruiz Gómez</b><o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";">En
un video Félix de Azua el gran escritor y pensador español y a propósito de la
salida de Fernando Savater del periódico “El País” del cual <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>éste fue columnista durante cuarenta y tres
años es decir desde la deslumbrante aparición<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>de este medio de comunicación como<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>defensor preclaro de la libertad de opinión, de la necesidad de
modernizar<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>las instituciones del Estado
ancladas aún en el franquismo y abrir un espacio propicio al diálogo de la
política y la cultura, propósito que reafirmaba mediante un gran periodismo y
la concurrencia en sus páginas de las voces de los más importantes
pensadores<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>contemporáneos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>hasta que <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>con el transcurrir de los años <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>cuando se hicieron notorias <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>las fricciones causadas <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>por una lucha interna de poderes <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>se<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>fue
mostrando que<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>esa filosofía inicial <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>se había agrietado<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ante<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>la opinión pública.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El llamado
modelo Berlusconi comenzó a desconfigurar todas las secciones bajo el dictado
de la era del consumismo para el cual era más importante la crónica del
espectáculo, la frivolidad de las varietés que la secciones de cultura. La
claridad democrática fue igualmente permeada con la irrupción del chavismo, del
peronismo, del castrismo defendidos bajo<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>el ladino sofisma de que “ es necesario escuchar todas las opiniones” <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El despido de Savater es el<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>resultado de estas derivas no resueltas como
señala Azua. Resumo aquí estas consideraciones sobre una propuesta periodística<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>los
sucesos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que terminaron por minar su
imagen democrática<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Como conocedor de
primera línea de estos contratiempos y contradicciones ya que algunos de sus
protagonistas se graduaron conmigo en la legendaria Escuela Oficial de
Periodismo a lo largo de estos años he escrito muchos artículos de análisis
sobre este amargo final.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%; mso-bidi-font-family: "Times New Roman";">Azua
quien tuvo el valor en su momento de denunciar el populismo de Ada Colau <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y de los nacionalistas catalanes y se trasladó
a vivir a Madrid para que su familia no sufriera atrocidades como la de la
imposición a la fuerza del catalán como lengua única, señala <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>quien
impone hoy<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>los contenidos políticos del
periódico<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>es el bufón del
chavistamadurista <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Zapatero, - sí el que
mandó al exilio a 10.000.000 de españoles con su quiebra económica-<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y
también <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>poderes ocultos que espantan.
¿Dineros de Maduro, de las Farc, del kirchnerisma, de Evo Morales? Ya que sus
periodistas respecto al caso de Latinoamérica han sido obstinados defensores de
estos regímenes<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>como ha sucedido en el
caso de Colombia donde<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sus enviados han
demostrado desde hace años su solidaridad con la guerrilla tal como el
corresponsal que denuncié en su momento y que a cinco días antes<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de que reventara el llamado “estallido
social” <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ya informaba por anticipado<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>en
Colombia había comenzado<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la más violenta
represión policial”. La identificación total de “El País” con Sánchez y con<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el sanchismo ha llevado a una<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>necesaria <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>toma de posiciones de muchos catedráticos,
intelectuales colaboradores de sus páginas<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>a renunciar a sus columnas ya que no se puede<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ser cómplice de esta astracanada <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de la<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>amnistía a los terroristas del <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Tsunami
<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de los enemigos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de España que han terminado por destruir económica
y culturalmente <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Cataluña , de los cómplices de las fechorías de Putin como Puigdemont.
De izquierda no es el sanchismo quien intenta acabar con el Estado de Derecho <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y a favor de la paz no pueden estar los
áulicos del nacionalismo de Eta, de la Cup: quiénes seguimos por t.v esas
intensas jornadas de terror con corte de carreteras y<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ensañamiento <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>contra quienes<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>hablan<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>español, no podemos
agachar la cabeza y aceptar que en nombre de la paz eso “no sucedió”. La tarea
del intelectual en estos momentos consiste en su defensa de la libertad de
expresión, en la condena <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>abierta<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>del terrorismo y en denunciar <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a una justicia de pandereta. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>La pluralidad social y no un multiculturalismo
pernicioso. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Postdata: la información
sobre la relación de Puigdemont con Putin antes de las jornadas de terror las
hizo<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Michiko Kakutani en su texto “La
muerte de la verdad”. Ediciones Galaxia Gutenberg 2019<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-62447610699777987162024-02-10T22:01:00.005-05:002024-02-11T15:38:23.934-05:00Las rectorías para las universidades públicas del país. / Rafael Rubiano Muñoz<p> </p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgqrC4HJal3LaJ6vXv8b4Usm2F6mrhOqXn9DBxt4XuiEsnuBiVa6pWBTqrT2xc3kF4ZU5ehISTX5q9E4Yw-AtA64Nz5puLsR-AWq2FYlIyFZKL3gDHUEbeiX-xGv1uQ4AY6H_Y-qvkdB3B23bK7dUj6kKymKsD6UauzZReYHDuP4el0N_iF-M0Kzc28KAc/s461/este.gif" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="372" data-original-width="461" height="516" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgqrC4HJal3LaJ6vXv8b4Usm2F6mrhOqXn9DBxt4XuiEsnuBiVa6pWBTqrT2xc3kF4ZU5ehISTX5q9E4Yw-AtA64Nz5puLsR-AWq2FYlIyFZKL3gDHUEbeiX-xGv1uQ4AY6H_Y-qvkdB3B23bK7dUj6kKymKsD6UauzZReYHDuP4el0N_iF-M0Kzc28KAc/w640-h516/este.gif" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Wiesław Wałkuski</td></tr></tbody></table><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><b><span style="color: #ffa400;"><br /></span></b></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><b><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjLhW3_8za0sRv3pe8NmccPS1CtK1Nf5cWvgxlKQh9DLKzmAJ55VZZo6MXo1etMIjusr5_OYV4eUSM3VjQcj-bnE8oRNKXTsxoTUpqlhpLoa7IVtPzzgJfb54N2jQkuaVaGNVw6gCMPRjWurFUfPQEY3KdEhgf2d952FOGGrroC3dcfoDwymojf3Jn7-VQ/s240/RAFA..gif" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="240" data-original-width="200" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjLhW3_8za0sRv3pe8NmccPS1CtK1Nf5cWvgxlKQh9DLKzmAJ55VZZo6MXo1etMIjusr5_OYV4eUSM3VjQcj-bnE8oRNKXTsxoTUpqlhpLoa7IVtPzzgJfb54N2jQkuaVaGNVw6gCMPRjWurFUfPQEY3KdEhgf2d952FOGGrroC3dcfoDwymojf3Jn7-VQ/s1600/RAFA..gif" width="200" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Rafael Rubiano</td></tr></tbody></table></b><b style="font-size: 13pt;"><span style="color: #ffa400;"><br /></span></b></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><b style="font-size: 13pt;"><span style="color: #ffa400;">Las rectorías para
las universidades públicas del país.</span></b></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><span style="color: #fcff01;">Rafael Rubiano Muñoz </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><span style="color: #fcff01;">Profesor titular,
UdeA. </span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><span style="color: #fcff01;">Doctor en Ciencias
Sociales (Flacso-Argentina) <o:p></o:p></span></span></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><br /></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><i>“Si las humanidades y
las ciencias se apartan no habrá sociedad capaz de pensar con cordura</i>”. Alfonso
Reyes. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">Este año tiene
especial connotación para algunas universidades públicas del país y es la
ocasión (no debería ser la primordial) para reflexionar sobre su acontecer y
sus desafíos. Entre los procesos de designación a las rectorías que implican
procesos electoreros, por fuera en algunos casos de los propios estamentos de la
universidad, asuntos de capital importancia se mueven como el magma a punto de
estallar en el corazón mismo de las universidades públicas. Es cierto que
factores externos tienden a desestabilizar el espíritu y la razón de ser (y el
deber ser) de la institución pública: la dinámica del mercado, la
globalización, la virtualidad, las redes sociales, así mismo la injerencia
política a nivel local, departamental y nacional, sin embargo, se entrecruzan
otras formas de inestabilidad que ya constituyen enfermedades crónicas de la
institución de educación superior.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Y si bien, algunos de los factores externos
sabemos que desestabilizan (comentarios de políticos, movilidad del mercado
local e internacional, avances científicos técnicos, digitalización de la vida
cotidiana), hay muchos otros factores internos que son ya costras que
arrancadas vuelven a poner en carne viva, los problemas de las universidades
públicas en más de tres décadas. Por ejemplo, la <i style="mso-bidi-font-style: normal;">hiperburocratización</i> administrativa que afecta la labor y el papel
de la ciencia, la investigación y lo académico. En los años 90 denunció Rafael
Gutiérrez Girardot cómo después de mayo de 1968, la burocratización (no
entendida en el sentido de Max Weber, es decir, esa forma racional de la ética
del funcionario público por encima de los intereses y de las pasiones
personales) matarían la democracia y de paso el humanismo como fuente y valor
del <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Alma Mater</i>. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">Gutiérrez se refería
al humanismo de la modernidad renacentista e ilustrado, no al humanismo
cadavérico que se pregona hoy con artificio en los recintos universitarios y se
usa como falso escudo de retóricas circunstanciales y de programas. El humanismo,
por el contrario, es aquel que construye una percepción universal de la vida,
del hombre y la sociedad, humanismo quiere decir, la capacidad de ver en lo
parcial lo universal (o viceversa), el sentido de lo humano como diálogo sólido
entre la visión científica- técnica con visión social y humana. El deterioro de
esa visión es perceptible en las apuestas de la universidad, en sus propósitos
misionales y en las mallas curriculares, una cosa es pregonar y otra la
voluntad efectiva de colocar como objetivos y metas las aspiraciones humanas,
desde el aula hasta los consejos académicos de facultad y otras instancias. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">Otro factor interno.
El clientelismo y la perversión de elección de los cuerpos colegiados de la
administración académica. En la tradición sociológica que va de Emile Durkheim,
a Max Weber, de Max Horkheimer a Pierre Bourdieu y Françoise Dubet, se puede
examinar que las instituciones (públicas y privadas) más allá de su
funcionamiento aparentemente racional de estatutos, normas, reglas o
procedimientos regulados por leyes, funcionan a partir de afectos, pasiones y
de lealtades, más que de competencias o de méritos. Allende la calidad
objetiva, lo que prima es la servidumbre y la obediencia a jefes, directivos o
de quienes tienen el liderazgo de los organismos colegiados, o aun estando en desacuerdo
se asume la actitud de la inhibición o el silencio, que es inmoral y antiético,
porque nada tan vil es callar por complacencia y por mantener un puesto de
trabajo. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">No es anormal la
fidelidad basada en la ciega subordinación, aunque proporcionalmente es absolutamente
normal que quienes ocupan los cargos directivos de los estamentos universitarios
tiendan a elegir en sus respectivos subcargos, a aquellos que no les sean
rivales superiores, en términos intelectuales (no es una cuestión de títulos,
aunque se cree en esta villa universitaria que por ser doctor o doctora, ya se
pueden sentar en las cumbres del olimpo del saber, prejuicio y falsa
conciencia, ojalá ojearan <i style="mso-bidi-font-style: normal;">El Príncipe</i>
de Maquiavelo, les serviría mucho a ciertos directivos o directivas). No se
elige a aquellos competentes específicamente, por experiencia o por la
capacidad reflexiva o analítica, por su producción científica en un campo o por
su trayectoria, sino por inexperiencia, por poca experiencia) para poder
ejercer el dominio o el mando que se desea. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">En fin, en los
subcargos (y hay que cuestionar la competencia de quienes asumen los altos cargos
universitarios) se designan personas (algunas, no todas valga decir) que no
tienen el carácter, los derroteros y la trayectoria para ejercer en esos
organismos administrativos y académicos, y si son coronados allí, para decirlo
con Paul Benichou(1), es más por complacencia, por el pago de una deuda o por
sobrevivencia para los programas que se pretenden desarrollar. La corrosión
clientelar de las instituciones universitarias públicas para el ejercicio y
función de todas las actividades científicas, técnicas, y lo que queda de lo
social y humano cadavérico es un factor más negativo que las amenazas de la
globalización y la virtualidad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">No es insólito que
quienes dizque estudian e investigan, enseñan en las aulas los fenómenos de
corrupción, clientelismo, prevaricato, y otras actitudes sociales y políticas
ligadas a las visiones antidemocráticas e irracionales, sean quienes
desgañotados en sus denuncias propias de demagogos y de profetas (falsos
demagogos y profetas diría Weber) sean los adalides de la corrupción y el
clientelismo en las instituciones universitarias (¡quien no está conmigo está contra
mí! Consigna de Núñez y Caro desde la <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Regeneración</i>
que no ha fenecido en la universidad pública en la actualidad).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">No obstante todo lo
anterior habría que agregar que muy por encima de las campañas electoreras de
los candidatos que se postulen a las rectorías de las universidades públicas
del país hay tres desafíos mucho más exigentes, por un lado el liderazgo
universitario, que debe tener presente una capacidad no solamente de gestión
financiera y administrativa, el rector (o la rectora de hoy) debe tener una
capacidad personal e intelectual para establecer un diálogo y una efectividad
nítida entre la política y la ciencia (administrar la institución logrando
comprender y resolver las ráfagas de los factores políticos tanto externos como
internos, es decir, el liderazgo ha de centrarse en ser competente para
afrontar los conflictos). La universidad de cara a los conflictos, no solamente
la universidad de cara a la virtualidad, las regiones, las violencias, la
globalización mercantil y digital, por ello es esencial proponer la Universidad
frente a los conflictos de cara al siglo XXI – que no son solamente lo de las violencias
y guerras como se ha pretendido durante lustros - y saberlos reflexionar,
analizar e investigar pero sobre todo, asumir y solucionar, bastaría que
candidatos y candidatas leyeran un poco de sociología, quizás Georg Simmel (2)
o Lewis Coser (3). <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">El desafío de los
relevos generacionales. Pese al concurso de méritos, uno de los elementos<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> ultracorrosivos</i> de las instituciones de
educación superior ha sido el proceso de jubilación y la perdida de quienes por
tres, cuatro décadas o más invirtieron en su existencia y su experiencia y sus
conocimientos se desvanecen cuando llega el día de su partida laboral por una
de las calles que circundan la universidad. La imposibilidad de normalizar el
acumulado científico e intelectual de las profesoras y de los profesores, de
atesorar y de hacer fructífero su legado es un desafío que no se compensa con
publicaciones parciales y marginales, con homenajes o con una selectividad al
servicio de las visiones clientelares personales o de lealtades particulares
por afectos o por sentimentalismo espurio. A lo anterior el despilfarro del
saber existencial de profesoras y profesores, se incluye que, no es anormal que
esa universidad que debe encarar los conflictos en dos siglos sea una
universidad anclada en la aplicación de conocimientos y paradigmas fundados en
el imperialismo colonia (Sergio Bagú) en paradigmas, conocimientos foráneos y
que en dos siglos no haya hecho un diálogo estimulante, enriquecido y ante todo
prospectivo con el pensamiento colombiano y latinoamericano. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">No es utilizar a
ultranza el saber ancestral, el indigenismo o los conocimientos, las lenguas, y
las prácticas de las comunidades étnicas como sicarios intelectuales. La
universidad pública del siglo XXI, está llamada a propiciar (ni siquiera
fortalecer) cátedras, seminarios, foros, cursos, materias, eventos, en fin que
no solamente inviten como maquillaje a la apropiación del saber y pensamiento
del país sino del pensamiento latinoamericano. Una universidad pensante que
dialoga entre lo ajeno y foráneo con lo propio, de seguro candidatas y candidatos
rectorales no saben (o no quieren saber) de la existencia de un Andrés Bello,
José Martí, Baldomero Sanín Cano, Rafael Uribe Uribe (se cumple este año ciento
diez años de su muerte asesinato en Bogotá) o de Luis Tejada (se cumplen cien
años de su muerte), ni hablar de Gabriela Mistral, Victoria Ocampo, Teresa de
la Parra, Clorinda Matto de Turner, María Cano, Virginia Gutiérrez de Pineda,
entre otras, porque su obsolescencia, inutilidad y vejez, aunque hay que
afirmarlo, si los aspirantes a rectoría leyeran estos personajes, cambiaría más
su pensamiento y percepción, su arrogancia y pedantería creyendo que son los primeros
en formular y posiblemente solucionar los problemas universitarios, porque sencillamente
ellas y ellos ya pensaron y dejaron un legado incuestionable e irrefrenable en términos
de la solución a los problemas educativos de Colombia y América Latina, El
desafío que es de considerar capital será realizar una administración pero con
un liderazgo que replantee el diálogo ciencias naturales y ciencias sociales;
ciencia y técnica-ciencia humanismo y no es insulso pensar que esa universidad
de cara a los conflictos, si pretende mantenerse como mito y realidad, como <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Alma Mater</i>, debe recomponer los lazos
rotos de la ciencia (natural y social) con lo humano. Sin duda hay – al parecer
– suficiente inteligencia para que ese diálogo sea repensado, reasumido,
reapropiado y revertido, ya que, en la actualidad, el abismo de esos dos
referentes vitales de la universidad (ciencia y humanismo) no solamente están
rotos, hay una distancia importante en quien asume el saber y el conocimiento
como mercenario intelectual (temas o problemas de moda) o quien los asume como
vocación en el sentido de Marx (4) y Weber (5)<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">¿Seguiremos en esta
decadencia universitaria de artificios y pomposidades? ¿de cara a qué deben hoy
los aspirantes a rector y rectora concebir no sus programas electoreros, sino
la universidad en medio de una pluralidad conflictiva recabar lo que ha sido la
riqueza de su existencia, una visión humana que se entiende no es piedad, es
visión universal dentro de lo singular, es la prospectiva del futuro a partir
de la aprehensión del pasado siendo actualidad, la utopía universitaria se
define en que, es la anticipación en la imaginación de algo que cambiaremos en
las actitudes y la vida práctica. Serviría mucho que las candidatas o candidatos
a rectoría si de verdad tienen la vocación y el liderazgo, no el oportunismo
para rendir culto a sus egos y a sus corifeos de leales o de fieles, de
creyentes de ocasión, miraran de fondo los conflictos de la universidad, que no
son pocos, y tuvieran el decoro por lo menos de si como panfletarios hablan de
humanismo, lo hagan con lectura, juicio, moral, ética, responsabilidad y
sabiduría. Les serviría mucho leer a Alfonso Reyes, o a José Luis Romero o a
Sanín Cano, por ejemplo, un librito muy útil de reflexiones sería el de Rafael
Gutiérrez Girardot. (6)<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">¿Continuaremos en
esta decadencia de instituciones insepultas? En esta coyuntura de factores externos
e internos que complejizan los niveles de conflictividad de la universidad
pública es imposible eximir el intelecto y el sentido común, los conocimientos
teóricos y prácticos, los administrativos con los académicos, los científicos
técnicos con los humanos, lo denunció hace décadas Jürgen Habermas (7).<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">Ahora una universidad
de mediaciones, no de extrapolaciones y de extremismos, una universidad de
diálogos eficaces, con una narrativa o retórica amplia y generosa de la vida
colombiana y de la latinoamericana, podrá ser la clave en parte para resolver
sus más urgentes tragedias y calamidades. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">No es la postura <i style="mso-bidi-font-style: normal;">decolonial</i> al uso, aquella de odio y
venganza la que hay que pregonar, hay que <i style="mso-bidi-font-style: normal;">descolonizar</i>
sí, pero viendo enriquecido el diálogo de lo propio con lo ajeno, no como el
sicario asesino, quienes alardean que lo que debemos destruir, dicen estos
fanáticos e idólatras, según su ira, es el legado de la ilustración, el
racionalismo y la cultura occidental, de eso no se trata. Universidad,
conflictos, pensamiento colombiano y latinoamericano, equilibrará el <i style="mso-bidi-font-style: normal;">colonismo</i> intelectual y el carácter
dominante de hacer de lo ajeno lo propio y de hacer de lo propio algo ajeno,
extraño, inútil y subdesarrollado, lo propio es pobre, lo ajeno es lo rico.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">Un desafío más.
Emanciparnos mental y culturalmente es uno de los retos, más y más pensamiento
colombiano y latinoamericano, en diálogo con otros pensamientos, eso es lo que
se llama pluralismo universitario. Una adenda más. En el pequeño volumen
titulado El mito de la universidad (8), hay una variedad de ensayos
seleccionados por Claudio Bonvecchio en los que se eligen algunos ensayos
analíticos de quizás los letrados y letradas más representativos de lo que se
podría denominar la modernidad europea occidental, en el impreso se destacan:
Madame de Stäel, Wilhelm von Humboldt, F. G. W. Hegel, H. Heine, V. Cousin, A.
Schopenhauer, F. Nietzsche, Labriola, M. Adler, M. Weber, J. Ortega y Gasset y
T. Mann. Por su labor constante frente al humanismo y las ciencias son notables
las reflexiones de W. von Humboldt, Max Weber, José Ortega y Gasset, y T. Mann,
quienes respectivamente combinaron sus actividades científicas con los
problemas políticos de su tiempo y el ámbito universitario, serían referentes
estimulantes para los fututos rectores.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">Para compensar esas
lecturas sería obligado la variedad de escritos del mexicano Alfonso Reyes, <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Universidad, política </i>y<i style="mso-bidi-font-style: normal;"> Pueblo</i> (9), por su calidad y por su
visión de futuro, por su intención prospectiva y utópica, por los problemas que
se reflexionan allí, podría ser una fuente para candidatas y candidatos, no
necesariamente una guía de concina, sino, valga reiterar, un referente de
reflexividad, análisis y horizontes de decisiones prácticas y políticas. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">Ni hablar si leen a
José Luis Romero (10). Se indica a Reyes por ser uno de los referentes que al
día de hoy ha nutrido las generaciones universitarias de América Latina por
décadas, pero la lista de nombres podría agrandarse en lo que respecta a los
temas de universidad y política. En general, la lectura completa de ambos
libritos permite reflexionar agudamente sobre cómo se generó la metamorfosis de
la universidad, aquella que transformó la institución bajo una mirada humanista
y científica a una de burócratas antiweberianos, tecnocracia y mercado. ¿Por
qué hoy ningún candidato habla del legado de la Reforma Universitaria de
Córdoba de 1918? No es raro, es normal.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">……………<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; line-height: 107%; mso-bidi-font-size: 13.0pt;">1 Paul Benichou. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">El Tiempo de los profetas: doctrinas de la
época romántica</i>. México: Fondo de Cultura Económica. 1984.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; line-height: 107%; mso-bidi-font-size: 13.0pt;">2 Georg Simmel. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Sociología: estudios sobre las formas de
socialización</i>. Madrid: Revista de Occidente. 1926-1927. 6 v.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; line-height: 107%; mso-bidi-font-size: 13.0pt;">3 Lewis Coser. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Las funciones del conflicto social. México</i>:
Fondo de Cultura Económica. 1961.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; line-height: 107%; mso-bidi-font-size: 13.0pt;">4 Karl Marx. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Reflexiones de un joven al elegir profesión</i>
(1835). En: <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Escritos de juventud</i>.
México: Fondo de Cultura Económica. 1982.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; line-height: 107%; mso-bidi-font-size: 13.0pt;">5 Max Weber. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">El político y el científico</i>. Barcelona:
Altaya. 1985.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; line-height: 107%; mso-bidi-font-size: 13.0pt;">6 Rafael Gutiérrez
Girardot. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">La encrucijada universitaria</i>.
Colección Asoprudea - GELCIL – Grupo de Estudios de Literatura y Cultura
Intelectual Latinoamericana. Primera edición, octubre de 2011.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; line-height: 107%; mso-bidi-font-size: 13.0pt;">7 Jürgen Habermas. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Teoría y praxis: estudios de filosofía
social</i>. Madrid: Editorial Tecnos. 1987.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; line-height: 107%; mso-bidi-font-size: 13.0pt;">8 Claudio Bonvecchio.
<i style="mso-bidi-font-style: normal;">El Mito de la universidad</i>. Bogotá:
Siglo XXI. 1991.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; line-height: 107%; mso-bidi-font-size: 13.0pt;">9 Alfonso Reyes. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">Universidad, política y Pueblo</i>. México:
UNAM. 1967.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; line-height: 107%; mso-bidi-font-size: 13.0pt;">10 José Luis Romero. <i style="mso-bidi-font-style: normal;">La experiencia argentina y otros ensayos</i>.
Buenos Aires: Taurus. 2004<o:p></o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-27363439218247383142024-02-07T15:06:00.008-05:002024-02-07T20:02:23.919-05:00La música que es como la vida Orlando Mora / Víctor Bustamante<p> </p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjD5k0-G7le8BTH_HBKC4qcgLybhLHSpaV8Gd1E5e5B_yBsBiRjh4ijnHVwO_vS2sE0Rx_2gBgfih4Fe6bQtTbQmIwXRjUIlYALWxYf6PxToWVJnmVgGmLBWnuN8Wwmhzu84yBx__qIJ_w6xTZ_238Osq9GVtGiqsrtBf1vHCN-HIIxHCRSQYCGjFYxQzM/s745/moraf%20-%20gif.este.gif" style="display: block; margin-left: auto; margin-right: auto; padding: 1em 0px; text-align: center;"><img alt="" border="0" data-original-height="487" data-original-width="745" height="418" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjD5k0-G7le8BTH_HBKC4qcgLybhLHSpaV8Gd1E5e5B_yBsBiRjh4ijnHVwO_vS2sE0Rx_2gBgfih4Fe6bQtTbQmIwXRjUIlYALWxYf6PxToWVJnmVgGmLBWnuN8Wwmhzu84yBx__qIJ_w6xTZ_238Osq9GVtGiqsrtBf1vHCN-HIIxHCRSQYCGjFYxQzM/w640-h418/moraf%20-%20gif.este.gif" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Orlando Mora</td></tr></tbody></table>
..
<iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="" frameborder="0" height="720" src="https://www.youtube.com/embed/u1-oXXfBEeI" title="La Música que es como la vida de Orlando Mora / UNAULA" width="1280"></iframe>
..
..
<div><br /></div><div><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><a name="_Hlk158204203"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><b><span style="color: #ffa400;">La música que es como la vida </span></b></span></a></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><a name="_Hlk158204203"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><b><span style="color: #ffa400;">de</span></b></span></a></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><a name="_Hlk158204203"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><b><span style="color: #ffa400;"> </span></b></span></a><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"><span style="color: #ffa400;">Orlando Mora</span></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="color: #fcff01; font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 17.3333px;">Víctor</span><span style="font-size: 13pt;"> Bustamante</span></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="color: #f1c232; font-size: 13pt;"> <b><i>Para Luz Esther Castañeda</i></b></span></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">La
música se instala sin ser invitada, simplemente al escucharla nos atrapa y al
atraparnos y volver a ella, nos cuenta no solo su historia, la de sus músicos
como intérpretes, sino que nos lleva de su mano a sus autores, también nos
cuentan de donde vino. Cuantas veces caminando por las calles, nos atrapa una
melodía casi inaudible, y la cual se nos queda todo el día, hasta que
averiguamos su nombre, y desde ese instante en que la reencontramos, sabemos
que se instala en nosotros, casi como una maldición porque ya ahora es parte de
nosotros mismos. Otras veces la encontramos, hallazgo imprevisto, en algún bar
cuando en una conversación o en nuestro profundo silencio llega esa que no es
invitada y de inmediato necesitamos averiguar con el barman o el mesero que cómo
se llama esa canción. Así el azar se
convierte en una celestina que nos entra en el mundo desconocido y profundo de
esa música que nos llega. Otras veces es una recomendación de algún amigo,
otras la publicidad que exhibe sus garras comerciales.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">Es
vasto el mundo de la música, y aun así es más misterioso y lleno de momentos
abruptos y dulces. La música tiene tantas aristas para indagar, la música posee
tantas significaciones, tanta presencia en cada uno, que nos remite a esa
palabra y actitud que parece ser avasallada por lo fugaz sin retorno del
momento en que vivimos. y es que la música se instala en nosotros, y en
definitiva nos acompaña, nos alerta, nos altera los sentidos, ante un estado de
cambio repentino de ánimo. Quien no haya vivido es que no tiene la música como
un punto de referencia, así la música nos remite a cada uno a una época
personal de brillo, de indagaciones, la música abre sus caminos, hacia la sensibilidad, la música nos trae presencias
de personas, momentos, estados de ánimo, y como no tiene imagen, la música no
envejece, siempre está presente y nos cala y nos aclama ya que la música es el único
arte que nos acompaña cuando estamos en alguna desazón o la inicua melancolía
nos arredra.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">Todo
lo anterior para referirme a esa sensación que advierto al leer, <i>La música que es como la vida</i> de Orlando
Mora (UNAULA, 2023). Orlando nunca ha caído en el vicio del coleccionista que
refiere su catálogo de discos de 78 o de elepés, que nos hacen sentir desamparados
porque posee un único ejemplar de determinada canción, él la comparte en su
estudio, pero nunca da una copia.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">Por
el contrario, Mora reflexiona sobre la música que lo ha acerado y nos da su apreciación
sobre el sentir y lo que le inspira cada uno esas canciones que lo arredran,
que lo acompañan. De ahí que sea tan personal este libro, en sus apreciaciones,
en sus disquisiciones, en su dureza cuando advierte el caso de Goyeneche, que así
da la medida del autor, ya que este libro ha sido reflexionado, escrito de una manera
lenta, precisa, lo cual permite al lector que, al leerlo, es como si estuviera con
su autor, siempre tan fugaz cuando se quiere conversar con él.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">Así,
con sus códigos de interceptaciones, testigo de primera línea, Orlando, detecta
y nos acerca a esa diferencia entre el caf<a name="_Hlk158198037">é</a> y las
heladerías. Y a medida que reflexiona sobre la música y sobre la ciudad y sus adláteres,
sus testigos, da la medida de sus gustos, el cual nos lleva de su mano a
indagar sobre esos cantantes y canciones que lo embargan, cuando por consejo de René Cabel le habla de Elena Burke.
Entonces debemos indagar sobre ella, como si remontáramos el rio de la memoria
que crecido y violento se lleva de paso lo que encuentra, para destrozarlo,
pero así mismo arrastra, contradictorio, esa memoria, la música que hemos
escuchado y nos ha formado, música que alerta y disputa y lleva esos cajones de
la memoria y que por supuesto permanece intacta en nosotros. Así Orlando nos
desafía a buscarla, a escucharla para comprobar como la historia de la música y
otras historias mantienen su catálogo de olvidos y desalojos. Lino Borges
también llega con su voz pausada, Esther Borja, de ese recuento, al mencionarla
Orlando, y también debemos buscarla para saber y comprobar que la historia de
la música posee sus secretos y aun mal, olvidos y desalojos <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">Lo
mismo le digo a Orlando cuando refiere y conoce un poeta en la cita de Thomas
Elliot, cuando refiere un músico, un cantante, una canción se ensancha la vida,
así como otras presencias, una de ellas la de esa voz cálida de Raúl Shaw
Moreno, y en el tango, caro y presente, cuando nos entrega la presencia de
Roberto Rufino en la Gardeliana, y una frase que es un reto. “Nunca podremos
decir con certeza y de manera irrevocable quien ocupa la segunda línea después
de Gardel”, lo que daría motivo para escribir un tratado sobre el tango.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">Así
en este reencuentro con la música, digo reencuentro porque este libro es una cara
reminiscencia que nos lleva a indagar sobre el bolero y el tango, y algunas
baladas y así, es una summa de la música popular, aquella que se establece en
el tiempo y la memoria recuperada y se convierte en algo indeleble, los caminos
tortuosos e irredentos de la vida. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_oUwNttT8hc0uGqrMVGKNLUD5fZ0CH-1xFGBTjmuztYjpWV67WQwK28BzHUuowB_yESe_6fLGDxdlSuEQAiZ99SJaBMvdVxYFhK88rp_XP9onoXrXu3Si0eHPeY3oLZ9OwUdLMApbW6XcTDIGWbRIXLw5uKy7aJ3MKqpqaRew1I0RjqzpvhJ8dl_3srU/s525/la-musica-que-es-como-la-vida.png" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="525" data-original-width="346" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_oUwNttT8hc0uGqrMVGKNLUD5fZ0CH-1xFGBTjmuztYjpWV67WQwK28BzHUuowB_yESe_6fLGDxdlSuEQAiZ99SJaBMvdVxYFhK88rp_XP9onoXrXu3Si0eHPeY3oLZ9OwUdLMApbW6XcTDIGWbRIXLw5uKy7aJ3MKqpqaRew1I0RjqzpvhJ8dl_3srU/w422-h640/la-musica-que-es-como-la-vida.png" width="422" /></a></div><br /><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><br /></span><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">Así,
este hermoso y aún más grato libro facilita, así, un auténtico acercamiento con
su autor, ya que en él deja e imprime su huella, es decir sus reflexiones y de
una manera total y afectuosa su sentimiento, con esas músicas cercanas que
perduran en su memoria, y que él nos comparte. Así en la música las fechas, aunque
bastante cercanas, con los días se vuelven indeterminadas, ya que la música,
nuestras músicas violan el tiempo, incluso cuando parece que sean próximas aún más
y así, caemos en cuenta que es algo cierto, la música aún posee ese carácter de
ese encuentro aun en su lejanía. Esa lejanía que nos atrapa a pesar de ser
algunas de esas músicas creadas en la extraterritorialidad que sucumbe y nos
hace sucumbir a su encanto, siempre las sirenas y su canto regresan cuando
viajamos en esa nave de olvidos y presencias que es la vida.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">Algo
es cierto, la música crea verdaderamente una sensación de proximidad. Más bien
de presencia o, más precisamente, de aparición. Antes que esas obras, por el
movimiento despiadado del olvido, ya que la música en ese movimiento sin fin,
casi perpetuo que arrastra su perdición, hace dejar de lado lo que ayer fue un
éxito, eso sí digo éxito, no obra maestra. Así Mora, </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">que ha </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">sacado a la luz, sus gustos musicales, no deja
que se borren de la historia de la música, porque es quizá necesario precisar que
al mencionarlas las justifica y las coloca cerca, dándonos esa impresión de
cautivarnos, de estar cerca, de que esa música aparezca, llegue, perdure ,en un
interregno, puede ser de casualidad, trazado sin primera por un instante, ese instante
trazado de encuentros con amigos, y para ese instante, amigos nocturnos, vueltos
visibles por la apertura instantánea de la música en esa noche perpetua que es
la vida misma. Ya que la noche y la música se conjugan para ese canto a la
amistad o a la casualidad de un encuentro que llega y se torna memorable.</span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">Luego
desfilan y nos hablan: Álvaro Dalmar, Lucho Bermúdez, Esthercita Forero, Frank
Domínguez, Armando Manzanero, Susana Rinaldi, Mario Clavell.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">Entrevistas,
conversaciones, encuentros que nos dan la medida de cada uno de ellos, como si
en un amplio salón estuvieran cada uno de ellos, relatándonos sus experiencias
no solo de vida, sino su acercamiento con la música y que Orlando mora los
lleva de la mano para saber mas de ellos, ya que cada compositor, cada artista
posee detrás de su talento, una historia que lo ha llevado a crear un
personaje, eso sí sin la máscara que los adula sino en la certeza de su arte. <o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">De
ahí esa sensación de esas presencias, hechas de convicción, de equilibrio, y
que resplandece lejos de las apariencias, mucho más evidentes que cualquier personaje,
un autor, que lleva a vivir en una zona invisible. De ahí que aparece esa
impresión que entrega su arte elaborado con un fervor inusitado. Ya que su
música, esas músicas se reafirman, y como ciertas músicas, ya sean boleros,
sones, tangos o baladas, que nos fascinan en la medida que nos dicen algo ya
que además nos han acompañado desde hace tiempos, ya sea en nuestra ambición de
la soledad o en la compañía de los caros amigos que se cultivan con el tiempo.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><i><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">La música que es como
la vida</span></i><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">
de Orlando Mora, enciende de golpe la luz de los cafés, con largas
conversaciones o acentúa los lánguidos intersticios del silencio, evocando la
oscuridad momentánea de las heladerías. A veces nos trae a Obdulio y Julián, y
eso sí afirma la música con su autoridad y permanencia, ya que no da sitio a la
duda ni a las correcciones. Simplemente está ahí para acompañarnos desde
latitudes lejanas. Y, sin embargo, sabemos, e incluso sentimos, que este arte, la
música, no se detiene, que Orlando Mora nos susurra que este arte ha comenzado
desde hace mucho tiempo y llega muchas veces a nuestros oídos y se empoza para
siempre sin ser invitada. Música que es única, pero no está sola porque también
acompañan a los solitarios en la mesa del café, o en lo trepidante de los
conciertos, o los que se encapsulan en sus cuartos. Hace tanto tiempo que el
hombre compone, escribe, graba, traza historias, colorea partituras, frota melodías,
todo para representar el sentimiento, tan humano, que nos da un violín en la
noche en una plena calle, o cuando se cuela un leitmotiv de un tango desde una
cantina y el cual nos obliga a detenernos para escucharlo, o cuando un bolero
nos araña o aún más cuando leemos este libro y Orlando, nunca furioso, nos dice
con rigor y con sorpresa, yo estuve ahí para contarlo.</span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">Adenda:
Orlando Mora nos debe un libro sobre la música de sus películas favoritas.</span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><br /></p></div>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-62558989197039578322024-02-02T23:05:00.002-05:002024-02-02T23:05:31.872-05:00EL PAISAJE Y LAS LICENCIAS DE CONSTRUCCIÓN / Darío Ruiz Gómez<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhw8oEiE9iUfVTifTA6PUZuBAFZcm94djDCai11UT7f4pqMS5J7w1FUmEkPDpQV7r7FU4WbYoXS096wSgJM35Kd_bsKAcxU780bXVeVnl5UIQmVlEwb12jeHhzUcWKolGOLKaHcHhy_wwTmbY8z6xZyXjKA16JfvxQCd734GhSbjlAOinAosZ44uuo1xWw/s642/GRG2COLOR.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="306" data-original-width="642" height="306" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhw8oEiE9iUfVTifTA6PUZuBAFZcm94djDCai11UT7f4pqMS5J7w1FUmEkPDpQV7r7FU4WbYoXS096wSgJM35Kd_bsKAcxU780bXVeVnl5UIQmVlEwb12jeHhzUcWKolGOLKaHcHhy_wwTmbY8z6xZyXjKA16JfvxQCd734GhSbjlAOinAosZ44uuo1xWw/w640-h306/GRG2COLOR.gif" width="640" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;"><span style="color: #ffa400;"><b>EL PAISAJE Y LAS LICENCIAS
DE CONSTRUCCIÓN<o:p></o:p></b></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;"><span style="color: #fcff01;">Darío Ruiz Gómez<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;">“Abría la ventana y me
quedaba mirando la lejanía de las montañas, la luz del atardecer” me cuenta una
amiga que vive en una población de Oriente y<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>para la cual la contemplación del paisaje se convertía en un estado de
ánimo que equilibraba su espíritu. Ahora, me señala, a causa de las licencias
de construcción concedidas para edificios de cinco pisos de una urbanización el
paisaje<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>desaparecido y en lugar<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de la tranquila presencia de esas montañas <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>lo que veo es una fea muralla<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ya que con total impunidad los constructores
elevaron la altura de los edificios a nueve pisos sin que nadie les llamara la
atención. Y esta agresión se repite a lo largo y ancho de toda la meseta de
Oriente rompiendo con la altura debida de las edificaciones<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y sobre todo ignorando olímpicamente el Sky
Line <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que es una norma universal<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>en defensa de la escala<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que se debe mantener<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>respecto a un<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>entorno de<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ciudad<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>o del área rural <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sancionando debidamente a quienes<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>atenten <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>contra ella tal como pasó con la ofensa cometida
por el llamado edificio Acuarela en Cartagena que no respetó la escala de la
Ciudad <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>histórica ni la volumetría<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>del soberbio Castillo de San Felipe. En un
boletín de Urbanistas leí hace poco que la responsabilidad <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>respecto al caos urbanístico <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y la destrucción del paisaje<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>no es <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>solamente<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>de los especuladores de lotes <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sino
de quienes desde las <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>oficina de
Planeación otorgan a granel licencias de construcción olvidando lo<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>establecido por los POT respecto a los
debidos retiros frente a las quebradas, ríos, caminos o carreteras
consideradas<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>implícitamente como un <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Patrimonio Cultural de las Comunidades <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ya que bajo este reconocimiento no solamente
se tiene en cuenta los considerados bienes <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>muebles e inmuebles sino de manera primordial
el paisaje que es un valor intangible construido a lo largo del tiempo, una
referencia sentimental de quienes lo recorren y lo han recorrido.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;">El paisaje es más necesario
que el pan decía René Char el gran poeta ya que el pan puede amasarse de nuevo
mientras un paisaje que ha sido agredido ya nunca podrá recuperarse. El
lamentable caso de Llano Grande donde la perversa norma de uso<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>mixto permitió que fueran<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>apareciendo <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>en un desorden terrible<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>chatarrerías, ventas <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de materiales de construcción, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>garajes de mecánica, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>etc, hasta hacer desaparecer la belleza que la
carretera había enmarcado con setos y floraciones, árboles memorables.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>De esta agresión vulgar ya nadie podrá
recuperar lo que supone<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el valor <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de un paisaje que no podría ser clasificado <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>como propiedad privada ya que para los
habitantes<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que recorrían<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>estas distancias era parte de su experiencia
de vida.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>¿No se había planificado antes
el territorio para salvar el paisaje, para racionalizar el proceso de las
nuevas construcciones, remitiendo al Sky Line que impone, repito, una medida
del orden impidiendo la <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>desmembración
del territorio en lotes insulares, ajenos unos de otros? La carretera que va de
la Fe al Retiro por su belleza es una lección de paisajismo que llegó a ser
considerada - recuerdo en esto la intervención del gran Jaime Tobón Villegas- como
Patrimonio cuando hace quince años comenzó la primera y feroz oleada de
invasiones inmobiliarias. Hoy cuando observo la irracionalidad con que de nuevo
se destruye un territorio tiemblo cuando veo un bosquecito de árboles y
trepadoras florecidas, un remanso visual que enaltece el sentimiento de común
belleza – Santuario de la Virgen- y tiemblo al pensar que pronto la
retroexcavadora lo doblegará ya que como en una célebre caricatura donde
dos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>promotores <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que miran un hermoso arbolito <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>uno de ellos le dice al otro. “Sí hay que
arrancarlo ya que aquí<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>va <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la zona verde de la “Urbanización”<o:p></o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-18874814872332042702024-02-02T22:40:00.001-05:002024-02-02T22:40:11.501-05:00“A Thomas Bernhard le resultaba difícil soportar la cercanía” / Peter Fabjan<p> <table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhuRoxor3DO3MVkqVy71HkKfLNlXajlUk3VxOSJ5KGxlsEPWMRzQH9KvJswxhsW2AZx4JgTMZRFRSH5XmVTWlVl5b1Ka1QOeuMLmk9aWJCpGIEmt0nUW9_nC0m5G-asOJaYI8BVE-NNgN5qZ_lRBksvCo-4aO7TWGV_gBDmJs0qOWiF4PXXvTdhKu83jsg/s1200/fabjan_1612630487846398_v0_h.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="675" data-original-width="1200" height="360" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhuRoxor3DO3MVkqVy71HkKfLNlXajlUk3VxOSJ5KGxlsEPWMRzQH9KvJswxhsW2AZx4JgTMZRFRSH5XmVTWlVl5b1Ka1QOeuMLmk9aWJCpGIEmt0nUW9_nC0m5G-asOJaYI8BVE-NNgN5qZ_lRBksvCo-4aO7TWGV_gBDmJs0qOWiF4PXXvTdhKu83jsg/w640-h360/fabjan_1612630487846398_v0_h.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Peter Fabjan y Thomas Bernhard</td></tr></tbody></table><br /></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;"><span style="color: #ffa400;">“A Thomas Bernhard le resultaba difícil soportar la cercanía”<o:p></o:p></span></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-size: 17.3333px;"><span style="color: #fcff01; font-family: Book Antiqua, serif;">Peter Fabjan</span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">Peter Fabjan (83), medio hermano de Thomas Bernhard, escribió una
“relación”. Una conversación sobre una relación difícil y una “familia
encantada”.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">Peter Fabjan es un hombre amigable que irradia gran calma, pero cuando
habla da miedo. Porque entonces crees que estás escuchando a Thomas Bernhard,
su medio hermano. El tono de voz, el color de la voz y, sobre todo, ese “no”
seguido del signo de interrogación al final de casi todas las frases. Así
sonaba y hablaba Thomas Bernhard.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">Pero eso es todo por las similitudes y similitudes. Porque Peter Fabjan,
nacido en 1938, y Thomas Bernhard, nacido en 1931, eran dos mundos que no
podían ser más diferentes. Fabjan estudió medicina y trabajó como internista
hasta 2001. Después de la muerte de Bernhard en 1989, se convirtió en su
administrador de bienes. La constelación familiar: el padre biológico de Thomas
Bernhard se llamaba Alois Zuckerstätter. La madre, Herta Bernhard, se casó con
Emil Fabjan en 1936 después de una relación fallida. De este matrimonio
nacieron dos hijos: Peter y Susanna, nacidos en 1940. Herta Fabjan murió en
1950 y su marido Emil en 1993.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">Peter Fabjan ha publicado un libro sobre su estrecha pero difícil relación
con su medio hermano Thomas, en el que aborda la conflictiva historia familiar.
La primera frase: “El camino de mi hermano fue un único esfuerzo por liberarse
de los restrictivos lazos familiares y luchar por una vida como artista”.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">¿Por qué subtitulaste este libro “A Rapport”?<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">PETER FABJAN: Porque es uno, un informe. Y porque no pretendo ninguna
formulación literaria.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">En un momento usted escribe: “Mi vida era una vida con un fantasma, incluso
un demonio a mi lado”. También habla de “comportamiento vampírico”. ¿Qué
quieres decir exactamente con eso?</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">PETER FABJAN: La forma en que interactuaban entre sí era todo menos
cotidiana, a veces extraña. A veces necesitaba personas y, en cuanto ya no le
eran útiles, las abandonaba.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">¿Podría ser el siguiente título del capítulo de su libro un breve
psicograma de su medio hermano: “Thomas Bernhard, el amante, el que odia, el
herido que se salvó escribiendo y pensando”?</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">PETER FABJAN: La respuesta es breve: sí.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">En una carta dirigida a usted, Thomas Bernhard escribió la siguiente frase:
“Mi enfermedad es la distancia”.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">PETER FABJAN: La distancia significa que la cercanía en las interacciones
diarias con las personas, especialmente la cercanía física, le resultaba
difícil de soportar. Provocaba desconfianza, pero sobre todo miedo a que la
otra persona pudiera “quitarte algo” si te permitías estar cerca.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">Thomas Bernhard: provocador con pasión</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">En este libro ha registrado sus recuerdos de esta “familia encantada” y sus
protagonistas: la madre que murió prematuramente, el amado (y fracasado) abuelo
escritor Johannes Freumbichler, el despreciado padrastro.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">PETER FABJAN: Toda la familia estaba formada básicamente por una sola
persona, el abuelo, su idea fija - mostrar al mundo el camino correcto con la
sabiduría de los agricultores adquirida durante siglos - y su creencia en lo
"superior", en el arte y en el ser. Captó un sentido de misión.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">¿Sus recuerdos de Thomas Bernhard se componen de numerosos mosaicos? ¿Puede
siquiera haber un “panorama general”?</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">PETER FABJAN: El panorama general es el de una persona que no se sentía
parte de la familia y siempre se sentía un extraño en la sociedad, pero al
mismo tiempo quería ganarse el respeto y el reconocimiento dentro de ella. Y
que siempre se vio a sí mismo como nuestro hermano, no como un medio hermano.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">“Es una lástima que tuviera tan poca fuerza para lidiar con esta situación
aparte de una lealtad estancada”. Por “esta situación” probablemente te
refieres a la relación con tu hermano en su conjunto. ¿Qué podría haber hecho
diferente al tratar con Thomas Bernhard?</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">PETER FABJAN: Ser un hermano equivalente a él habría significado lidiar
intensamente con sus escritos más allá de tu propia vida, convertirte en un
compañero de conversación con él.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">Acompañaste a tu hermano hasta su muerte. “¡Me salí con la mía!”, fue la
última frase de Thomas Bernhard antes de morir. Que quiso decir con eso?</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">PETER FABJAN: Lo que probablemente quería decir es que, a lo largo de su
vida, lo más importante para él era el éxito, sus propios logros en el arte, y
por eso sólo podía mostrar poca consideración por los demás.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">“¿Tiene Thomas Bernhard algún mensaje?”, le preguntaron una vez. ¿Qué
respondiste?</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">PETER FABJAN: Respondí: “Él mismo dijo: No. Pero pienso: toda su vida es un
mensaje”.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">¿Qué tan pesada es la carga de ser hermano de Thomas Bernhard?</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">PETER FABJAN: Para decirlo dramáticamente, ¡es asesino!<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">¿Y tu propia vida?</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">PETER FABJAN: En cierto modo fue un éxito gracias a muchas coincidencias y
ayuda.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; mso-ansi-language: ES;">Traducción de Klieine Zeitung / </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 17.3333px;">Bernd Melichar</span></span></p><div style="text-align: justify;"><br /></div>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-89885761663668026922024-02-02T22:10:00.005-05:002024-02-02T22:12:19.008-05:00<p> </p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEht0fUzwHywHKOR2Gs_yV_u5obLkRuVWMGZuYLyv-mq8_4AeSfK18UIEarjGDlSNcKtVSYiUjUYl_HKmuqtAa-HXrRCxrlvLUluvbqExbTkHOqix_osGaog_fdw_gRRft1zdaUw_ND43LOh1wiw5AP-ui_GVf0KOr8FLcm1wLTxHw4QLWejKFVDn2nGBRs/s540/tb.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="540" data-original-width="340" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEht0fUzwHywHKOR2Gs_yV_u5obLkRuVWMGZuYLyv-mq8_4AeSfK18UIEarjGDlSNcKtVSYiUjUYl_HKmuqtAa-HXrRCxrlvLUluvbqExbTkHOqix_osGaog_fdw_gRRft1zdaUw_ND43LOh1wiw5AP-ui_GVf0KOr8FLcm1wLTxHw4QLWejKFVDn2nGBRs/w402-h640/tb.jpg" width="402" /></a></div><br /><p></p>
<blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; mso-ansi-language: ES;"><i>"¡Difusión! Y no sólo en todo el mundo,</i></span></p></blockquote></blockquote></blockquote><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; mso-ansi-language: ES;"><i>sino universalmente. Cada palabra un éxito.</i></span></p></blockquote></blockquote></blockquote><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; mso-ansi-language: ES;"><i>Cada capítulo una acusación mundial.</i></span></p></blockquote></blockquote></blockquote><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; mso-ansi-language: ES;"><i>Y todo junto una revolución mundial total</i></span></p></blockquote></blockquote></blockquote><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; mso-ansi-language: ES;"><i>hasta la extinción total".</i></span></p></blockquote></blockquote></blockquote><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><blockquote style="border: none; margin: 0px 0px 0px 40px; padding: 0px; text-align: left;"><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; mso-ansi-language: ES;">Thomas Bernhard</span></p></blockquote></blockquote></blockquote></blockquote>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;"><span style="color: #e69138;"><b>Observación
preliminar</b><o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;">El viaje de mi hermano Thomas fue un
único esfuerzo, liberarse de los constrictivos lazos familiares y luchar por
una vida como artista.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;">Cuando miro las fotografías de
quienes han marcado mi vida y aún hoy lo hacen, a diferencia de Thomas Thomas
Bernhard, no siento la presión de convertir a estas personas en figuras
ficticias para "deshacerme" de ellas. Así que yo, que tuve la
oportunidad de ser médico, carezco de la base para una vida de artista. Thomas
Bernhard a pesar de su necesidad de distancia, también tenía una gran capacidad
de empatía. Empatía, para mí era un requisito profesional.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;">También tenía talento para el
análisis y la abstracción. Una y otra vez se me instaba a compartir mis
recuerdos de esta familia "encantada", sus protagonistas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;">Hablar o escribir sobre ellos los hace tangibles, hace que pierdan su lado
misterioso en el inconsciente, sino que lo debilita.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;">En una conversación con el periodista Kurt Hofmann en su casa de Ottnang,
Thomas Bernhard respondió a la pregunta de qué tipo de relación tenía con su
hermano: "Bueno, una relación fraternal. Es tan esporádica, normal, y
luego es tan contraria. En realidad, es muy agradable. Como son tan diferentes,
no hay problemas. Es así".<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;">En la lucha de toda la vida para encontrar una persona a su lado que le
acompañara en su viaje, su abuelo materno, abuelo por parte de madre, el poeta
de Salzburgo Johannes Capistran Freumbichler, su "compañera de vida",
la viuda sin hijos viuda de la alta burguesía vienesa, Hedwig Stavianicek, era
de la mayor importancia. Un hermano moldeado por él No podía ser un hermano
moldeado a su imagen, pero sí un ayudante en tiempos de necesidad. Un dibujo
que hice de él de un cuaderno de los años sesenta me muestra como un cubo
muerto con cubo con brazos y piernas, Thomas como un "salvaje", una
criatura a la que temer.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;">Una vez dijo: "No quiero que vosotros dos (refiriéndose a nosotros,
los hermanos, es decir hermanos, es decir, Susi y yo) os pregunten por mí un
día os pregunten por mí y os digan algo. Por eso mi autobiografía. Si no, no
sabrías de dónde de dónde viene todo esto". No obstante, quizá pueda
aportar algo contribuir al "de dónde viene", yo, que en su empresa como
"el querido hermano" en su empresa y que era en última instancia responsabilidad
de su legado literario e inmóvil.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;">recayó en mí. Me dijo que tendría una "segunda carrera". Cuando
le pregunté "por qué", respondió: "Porque el dinero no es tan
importante para usted". Actuando con este espíritu sigue hasta hoy. Era y
sigue siendo una vida al margen de la sociedad.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal;"><b style="mso-bidi-font-weight: normal;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;"><span style="color: #f6b26b;">Thomas Bernhard, un reto para la sociedad, un golpe de
suerte para la literatura<o:p></o:p></span></span></b></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;">Los copilotos de la sociedad son los outsiders, los intelectuales, los
enfermos y los artistas. Provocan disturbios y cambios cambio, a veces por
grandes catástrofes en el desarrollo de la humanidad, otras veces por logros
máximos en ciencia, filosofía, religión y arte.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;">ciencia, la filosofía, la religión y el arte. Convierten la sociedad
respectiva en una nación, en última instancia humanidad. Como líderes políticos
o religiosos, influyen en el destino del pueblo; en las artes, ya sean activos
como artistas o creadores, dan su tiempo el rostro de su tiempo, en algunos
casos incluso con rasgos proféticos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;">Las personalidades con gran poder de sugestión pueden ejercer una gran
influencia en tiempos de impotencia histórica y desorientación a la gente hacia
el abismo, colmar su anhelo religioso o o producir obras que fascinen, sirvan
de ejemplo y den valor. Todos ellos son copilotos junto a los pilotos que
mantienen las cosas en marcha. Uno de ellos copiloto fue Thomas Bernhard. Un
día cerró la puerta puerta del púlpito un día, se aisló de la sociedad y
decidió no abandonar este mundo, cuya normalidad era mundo sin causar revuelo.
Pero no el avión lleno de queroseno sin miramientos fue su solución, sino el pensar
y componer por medio del lenguaje, su literatura como legado, es decir, lo que
su mentor y querido abuelo había pasado su vida buscando en vano. Quería
conseguir lo que el otro no había logrado, y así devolverle el amor que había
experimentado. El niño malicioso que había en él en él permaneció vivo durante
toda su vida. Con su trabajo, su amor crítico y su respeto por el gran arte, se
ganó el reconocimiento del mundo entero.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><br /></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-19867468597837500232024-01-28T10:03:00.001-05:002024-01-28T10:03:14.706-05:00Explorando el París de Samuel Beckett / William Triplett<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7um3JFplTPMc0mlWyN4UQKb8kTMzU_5FglclmdwMjQp6mIUHoRPCMXTXEhuWk_tUVkvB0UtUSMuUXxC0JKiwtxHQjC-sAGIztlGOAP2Am7uXHp6OgJ4E7rdyVT0UTPiCw9-4B6XtppC3mMrJPg0PKSW1nSipt9lw0Rxr_9CLVDQ1BIdQDYshck4Q4ULI/s615/SB33.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="615" data-original-width="448" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7um3JFplTPMc0mlWyN4UQKb8kTMzU_5FglclmdwMjQp6mIUHoRPCMXTXEhuWk_tUVkvB0UtUSMuUXxC0JKiwtxHQjC-sAGIztlGOAP2Am7uXHp6OgJ4E7rdyVT0UTPiCw9-4B6XtppC3mMrJPg0PKSW1nSipt9lw0Rxr_9CLVDQ1BIdQDYshck4Q4ULI/w466-h640/SB33.gif" width="466" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><span style="color: #ffa400;">Explorando el París de
Samuel Beckett<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><span style="color: #fcff01;">William Triplett<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">Si alguna vez uno tiene la
sensación de haberse metido en una obra de teatro absurda, supongo que lo más
apropiado es que me ocurra lo que me ocurrió a mí en una tarde fría y lluviosa
en París, el pasado diciembre, en el distrito 14 de la orilla izquierda, donde
recorría el precioso paseo arbolado que divide los carriles de tráfico de la
avenida René Coty, en busca de la Allée Samuel Beckett.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El Premio Nobel de
Literatura, autor de "Esperando a Godot" y otras muchas obras que
evocan un mundo escaso de sentido, pero lleno de desesperación y sufrimiento,
vivió en la Ciudad de la Luz durante más de 50 años, hasta su muerte en 1989.
Pero mucho antes de que la fama se apoderara de él, París había bautizado una
callejuela -una allée- en honor al irlandés por su servicio en la resistencia
durante la II Guerra Mundial.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Deseoso de ver lo que
quedaba del París de Beckett, me empeñé en encontrar y recorrer este trozo de
hormigón, por estrecho o pequeño que fuera, pero resultó ser tan
enloquecedoramente escurridizo como la fama de su solitario tocayo. Sin
embargo, sabía que estaba por aquí, probablemente en una calle lateral. Mi mapa
Michelin, salvador de los perdidos y desorientados, así lo indicaba. Pero no
muy claramente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Volví al paseo, un poco
descontento, y vi un pequeño cartel azul con letras blancas que decía:
"Allée Samuel Beckett". El nombre del paseo. Con una espeluznante
sensación de inutilidad, me había estado preocupando por no llegar a algún
sitio en el que ya estaba, por no hacer algo que ya había hecho, por una razón
que el propio Beckett probablemente habría dicho que, como la mayor parte de la
vida, carecía de sentido... y entonces se habría reído.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Un paseo en el distrito 14
de París, que lleva el nombre de Beckett en honor a su servicio en la
resistencia durante la Segunda Guerra Mundial. (William Triplett para The
Washington Post)<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Desde que era niño he tenido
la suerte de venir muchas veces a esta seductora ciudad, una de las mejores del
mundo para pasear, y he visto buena parte de ella desde muchos ángulos. Pero
nunca había seguido las huellas de un artista cuyo arte se forjó de alguna
manera viviendo aquí.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Por ejemplo, el parque
Montsouris. La alameda de Beckett, como descubrí, conduce a la entrada de este
pequeño y agradable oasis de verdor, hoy lleno de familias y niños, donde el
autor conoció a su contacto durante la guerra. Fuentes de la zona
proporcionaban a Beckett información sobre los movimientos de las tropas nazis;
él, que hablaba francés con fluidez, lo traducía todo al inglés y se lo pasaba
a un agente conocido como Jimmy el Griego, que luego enviaba la información a
Londres. Era un trabajo peligroso. Pero también le enseñó, según dijo más
tarde, a escribir con economía.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Desde el parque me dirijo
hacia el norte por la avenida René Coty, pasando por una larga sección de
bodegas y patronatos, y giro hacia el oeste por la calle Rémy Dumoncel, donde
encuentro Le Tiers Temps, una modesta residencia de ancianos con una fachada
limpia. Beckett pasó aquí sus últimos días. Se te perdonaría que pasaras de
largo y no te dieras cuenta.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Curiosamente, a unos 600
metros de distancia, un poco más arriba de la Avenue du Général Leclerc, en una
calle sin salida llamada Villa Coeur de Vey, Beckett estuvo a punto de morir en
1938, mucho antes de hacerse un nombre. Una noche, mientras paseaba con unos
amigos, un chulo apareció de la nada y lo apuñaló casi mortalmente.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Dejo Villa Coeur de Vey y
sus edificios de apartamentos de poca altura, y vuelvo a la Avenue du Général
Leclerc, serpenteando por una de las calles más antiguas de París. Me acerco a
la plaza Denfert-Rochereau, donde, si uno lo desea, puede adentrarse en las
Catacumbas de París, el osario subterráneo que alberga los huesos de unos 6
millones de almas. Al pasar por delante, me doy cuenta de que sería el lugar
perfecto para una producción de la obra de Beckett titulada, bueno,
"Obra", con tres personajes cuyas cabezas sobresalen de urnas
funerarias.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Giro a la derecha por el
Boulevard Saint-Jacques y recorro la corta distancia que me separa del edificio
de apartamentos en el que Beckett vivió desde 1960 hasta que tuvo que
trasladarse a la residencia de ancianos. Al igual que la residencia, el 38
Blvd. Saint-Jacques 38 es un edificio discreto que, de otro modo, pasaría de
largo.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Y, curiosamente, no muy
lejos se encuentra la Prison de la Santé y sus altos muros de piedra; el
posible asesino de Beckett fue capturado y recluido aquí. Curioso por saber por
qué el proxeneta le había clavado un cuchillo, Beckett se reunió con él tras
recuperarse y le preguntó por qué. La respuesta, según "Condenados a la
fama: The Life of Samuel Beckett", de James Knowlson: "No sé por qué,
señor. Lo siento". Beckett no le vio sentido a presentar cargos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Es una vuelta fácil hasta la
Place Denfert-Rochereau, donde cojo el Boulevard Raspail y sigo hacia el norte
hasta la última residencia de Beckett, el cementerio de Montparnasse. Se dice
que declaró que la lápida de su tumba "podía ser de cualquier color
mientras fuera gris". Aún no he encontrado una fuente que lo confirme, pero
es sin duda el tipo de cosa que cabe esperar de un dramaturgo que, además de
meter a los personajes en urnas, los entierra irónicamente hasta el pecho en
tierra ("Días felices") o los hace vivir en cubos de basura
("Final de partida").<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La lápida de Beckett, una elegante
losa de piedra, es en efecto tan gris como una nube de lluvia. Su nombre y el
de su esposa, Suzanne Déchevaux-Dumesnil, fallecida pocos meses antes que él,
están grabados en ella. Aunque no es tan conocido como el cementerio más grande
de París, el de Père Lachaise, Montparnasse tiene su cuota de famosos
literatos, artistas e historiadores. El poeta Charles Baudelaire también está
enterrado aquí, al igual que el filósofo y dramaturgo Jean-Paul Sartre y la
escritora feminista Simone de Beauvoir, que mantuvieron una relación incómoda
con Beckett. También se encuentran las tumbas del dramaturgo Eugène Ionesco,
del ex militar Alfred Dreyfus (víctima del tristemente célebre caso Dreyfus) y
de la crítica y ensayista Susan Sontag, entre otros.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Desde aquí, continúo hacia
el norte por el Boulevard Raspail hasta su intersección con el Boulevard du
Montparnasse, cruzando hacia el distrito 6, donde encuentro un grupo de
cafés-restaurantes-bar -La Coupole, Le Select, Le Dôme y Le Falstaff- en los
que Beckett pasaba horas bebiendo sobre todo vino blanco. También están a un
paseo de mi hotel de la Rue de la Grande Chaumière, que reservé sin saber que
Beckett había vivido brevemente en la misma calle: primero en un pequeño piso,
y luego, unos 20 metros más allá, en el Hotel Liberia, ahora el Hôtel A La
Villa Des Artistes.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Cerca de allí, en la esquina
del Boulevard de Montparnasse y la Rue de Chevreuse, se encuentra Tschann
Librairie, una librería literaria fundada por un matrimonio en 1929. Su hija,
me cuenta el gerente, era una apasionada defensora de Beckett mucho antes de
que el mundo -o incluso gran parte de París- quisiera comprar su obra.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Veo una estantería repleta
de lo que parecen copias recién impresas de obras de teatro y novelas de
Beckett de su editorial francesa de toda la vida, Les Éditions de Minuit.
Beckett empezó a escribir en francés cuando descubrió que le ofrecía la
oportunidad de escribir "sin estilo", como él decía. Encima de la
librería hay una gran fotografía del propio Beckett -en tonos grises, por
supuesto- que lanza una mirada adusta por encima de las cabezas de los clientes
que hojean las páginas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">En una nueva mañana, me
dirijo hacia el Boulevard Raspail y su mercado al aire libre, adentrándome en
el distrito 6, famoso desde hace tiempo por su alta concentración de artistas e
intelectuales. De hecho, atravieso la rue de Fleurus, donde Gertrude Stein y
Alice B. Toklas tuvieron su célebre salón a principios del siglo XX. Mantengo
mi rumbo hasta llegar al 38 Blvd. Raspail 38, donde el teatro occidental cambió
profundamente en enero de 1953 con el estreno por el Théâtre de Babylone de
"En Attendant Godot", su título original.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Unas puertas verdes dobles
se abren a un patio, donde brotan plantas y pequeños árboles. El Babylone hace
tiempo que desapareció, pero miro a ver cuál de los muchos negocios que hay
ahora aquí podría estar utilizando el antiguo espacio del teatro. Una mujer que
parece dirigirse al bulevar se detiene y me pregunta si puede ayudarme. Esta es
una de las cosas que más me gustan de los viajes: Alguien que parece despistado
con un mapa en la mano puede evocar la simpatía de gente que, de otro modo,
tendría más sentido común que hablar con un extraño en una gran ciudad.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Le digo que busco un teatro
que ya no existe e inmediatamente me dice: "¡Le Babylone!". Me dice
que trabaja en el antiguo espacio de Babylone -ahora es la sede de una firma de
diseño de moda, Maison Rabih Kayrouz- y se ofrece a llevarme dentro.
Marie-Christine Violon, jefa de contabilidad y administración, según su tarjeta
de visita, me conduce por unas escaleras hasta una zona diáfana llena de
maniquíes, mesas, personas, telas y cintas métricas, por no hablar de los
enormes ventanales que van del suelo al techo. Me dice que estamos en lo que
antes era el escenario y me señala el lugar donde probablemente estaban los
asientos.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Miro silenciosamente a mi
alrededor, pensando que estoy en el lugar donde los actores representaron por
primera vez un enigma sin precedentes, una obra sin argumento ni desarrollo de
personajes, a veces con gran indignación. En su biografía de Beckett, Knowlson
relata los gritos y silbidos del público, así como las peleas físicas entre
partidarios y detractores de la obra.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">De vuelta al exterior, me
dirijo hacia el este, hacia la Rue de Rennes, por la que giro hacia el norte,
con destino a algunos lugares clave del barrio de moda de
Saint-Germain-des-Prés, todavía en la Sexta. Tomo algunas calles laterales,
cada vez más estrechas, donde se multiplican las galerías de arte y las tiendas
de moda. Finalmente, llego a la calle Bernard Palissy, una pequeña calle que,
tras una modesta puerta rojo oscuro en el número 7, alberga Les Éditions de
Minuit.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Desde aquí, sólo hay un
corto paseo hasta la intersección del Boulevard Saint-Germain y dos de los
cafés más famosos de la historia de la literatura: Les Deux Magots y, bastante
cerca, el Café de Flore, ambos favoritos de Sartre, de Beauvoir, Albert Camus,
Ernest Hemingway y muchos otros de su calaña. Les Deux está enfrente de la
iglesia de Saint Germain des Prés, del siglo VI, cuyo interior ha sido
rehabilitado recientemente de forma espectacular. Es una de las iglesias más
antiguas de París y una de las últimas estructuras románicas de la ciudad.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">A Beckett se le podía ver
ocasionalmente por la zona, pero era más frecuente verle en el número 12 de la
Rue de l'Odéon, antigua dirección de la famosa librería Shakespeare & Co.
Situada ahora en la Rue de la Bûcherie, junto al Sena, la librería fue abierta
originalmente por Sylvia Beach, que también publicó, cuando nadie más lo hacía,
"Ulises", de James Joyce, el héroe de Beckett y otro escritor
irlandés expatriado que vivía en París. La tienda es también el lugar donde
Beckett conoció a Hemingway por única vez, ya que el corpulento estadounidense
desestimó la obra de Joyce, que Beckett admiraba profundamente y emuló
brevemente. El local, en otra calle encantadora, es ahora una tienda de ropa.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Más al sur, en la Rue de
l'Odéon, se encuentra el Odéon-Théâtre de l'Europe, uno de los teatros más
antiguos y prestigiosos de la ciudad y productor de obras de Beckett. Justo
detrás del teatro, al acercarse al fabuloso Jardin du Luxembourg, encontrará el
número 7 de la Rue Corneille. Hoy es un restaurante asiático, pero en 1930 era
el Cochon de Lait, uno de sus locales favoritos -sobre todo porque era barato y
Beckett estaba casi arruinado en aquella época-, donde escribió buena parte de
su primer poema publicado, "Whoroscope".<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Mantengo la dirección sur,
ahora por la rue de Médicis, para retomar la rue Soufflot con el Panteón a la
vista. Bajo su augusta cúpula descansan los restos de Voltaire, Rousseau y
Victor Hugo, entre otros muchos leones de la cultura francesa. Mi destino, sin
embargo, es la rue d'Ulm, donde se encuentra la École Normale Supérieure, lugar
donde Beckett obtuvo su primer empleo (profesor) y su primera vivienda en París
a su llegada en 1928. Me interesa sobre todo ver las verjas de hierro de la
entrada de la escuela, de unos seis metros de altura. Durante su estancia allí,
Beckett tuvo que escalarlas con frecuencia después de una noche en la ciudad
bebiendo más allá de la hora de cierre.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Quedan otros dos sitios en
mi lista. Uno, en el distrito 14, es la segunda residencia de Beckett en la
ciudad (de 1938 a 1959, aproximadamente), en el número 6 de la Rue des
Favorites. Había regresado a Irlanda tras abandonar la École Normale Supérieure
en 1930. Pero, con el tiempo, el deterioro de la relación con su madre y su
país le hizo regresar definitivamente a París.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">Justo al lado de la
concurrida Rue de Vaugirard, el número 6 de la Rue des Favorites parece una
ruina fantasmal. Sólo queda la silueta de un "6" en la mugrienta
pared sobre el portal; los cubos de basura esperan a ser vaciados; y un
aparcamiento abandonado al otro lado de la calle parece que vaya a derrumbarse
en cualquier momento. Beckett escribió algunas de sus obras más célebres e
hilarantemente sombrías mientras vivía aquí: "La última cinta de
Krapp", "Molloy" y "Malone muere", así como
"Final de partida" y "Godot".</span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Mi destino final está justo
al norte, en el distrito 7, al que se llega a través de una sucesión de grandes
bulevares que comienzan en la Rue de Vaugirard y terminan en la Avenue Bosquet.
Así se pasa por Les Invalides, donde se puede saludar a los restos de Napoleón.
Cerca de la avenida Bosquet se encuentra 2 Square de Robiac, donde Joyce y su
familia vivieron de 1925 a 1931. Cuando no daba clases en la École Normale
Supérieure, Beckett pasaba horas con Joyce ayudándole en la investigación de su
última novela, entonces en curso, "Finnegans Wake". Beckett y Joyce
también daban largos paseos juntos por la Avenue Bosquet hasta Quai Branly, a
orillas del Sena, con la Torre Eiffel asomando en lo alto.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Beckett había llegado a
París sin planes de convertirse en escritor, pero tras haber pasado tanto
tiempo con Joyce y haber descubierto la proliferación de pequeñas prensas y
revistas en la ciudad, se sintió inspirado para tomar la pluma y el papel justo
antes de marcharse. Como era de esperar, Beckett se refirió a su primer tramo
en París, 1928-30, como "los años de Joyce".<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Desde 1937 hasta su muerte,
sin embargo, fueron los años de Beckett, y París fue su hogar. Según todos los
indicios, aquí se sentía como en casa, pero sospecho que a su manera
inimitable. En su novela "Molloy", el personaje del título dice: "Porque
en mí siempre ha habido dos tontos, entre otros, uno que no pide nada mejor que
quedarse donde está y otro que imagina que la vida podría ser un poco menos
horrible un poco más allá".<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p><i> Traducción de B. Rojas para Neonadaismo (The Washington Post /enero 2002)</i></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-3120811588478552172024-01-28T09:44:00.002-05:002024-01-28T09:44:50.835-05:00SOBRE LA JUSTICIA / Darío Ruiz Gómez<p> <table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhc3OrAaF8X4-Y4kP3mqPpku5QFX_rHCUfIts7285whwLoUV9qlJ-1u3lUHKTN5gH_vREhr00dyCCAIyd2afNO1O1WjY1_4dLDluN52kkUwESkH7QdHTwM9GoXDKVJdXYUZ4FXdCNGxu6j8vtbQHi5kxB3Dj786QGjEIwoi2hH3CuwNhOQ_SuWtNbp6zMI/s456/drg.gif" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="361" data-original-width="456" height="506" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhc3OrAaF8X4-Y4kP3mqPpku5QFX_rHCUfIts7285whwLoUV9qlJ-1u3lUHKTN5gH_vREhr00dyCCAIyd2afNO1O1WjY1_4dLDluN52kkUwESkH7QdHTwM9GoXDKVJdXYUZ4FXdCNGxu6j8vtbQHi5kxB3Dj786QGjEIwoi2hH3CuwNhOQ_SuWtNbp6zMI/w640-h506/drg.gif" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"></td></tr></tbody></table><br /></p><p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><b><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><span style="color: #ffa400;">SOBRE LA JUSTICIA<o:p></o:p></span></span></b></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><span style="color: #fcff01;">Darío Ruiz Gómez<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-top: 12pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">Cada día que pasa se
descubre un nuevo horror de parte de la Alcaldía<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de Quintero y en renglones de la
administración que creíamos serian intocables para un grupo de supuestos
adolescentes , que bajo el modelo del partido Podemos de España con el cual
mantuvieron un permanente y estrecho intercambio;<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>pareció que iban a encargarse de la tarea de
renovar la anquilosada y desacreditada izquierda terminando no por atacar la
miseria y la explotación de los llamados oprimidos a nombre de los cuales
peroraron desaforadamente en las universidades y en las plazas públicas<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sino convertidos en una burocracia paranoica
radical, sin relación alguna con la problemática que iban a enfrentar. De
buenas intenciones está empedrado el infierno. Estos muchachos y muchachas
surgidos de la nada, indicaron este propósito renovador desde el cual la idea
de ciudad democrática se justifica, pero los días fueron pasando y el fervor y
el entusiasmo revolucionario se fueron apagando rápidamente y no sus viajes
viaticados generosamente al exterior ni sus exigencias de vehículos lujosos, ni
su derecho a estar siempre en una eterna francachela bajo el lema de que “lo
que nada nos cuesta volvámoslo fiesta”. El dicho popular logra describir
objetivamente las reacciones de esta inesperada burocracia que llegada al poder
fue embriagada totalmente por éste al encontrarse de buenas a primeras con un
sueño de vida que solamente acontece en las películas.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">Pero también ha quedado en claro que la
realidad social exige un compromiso radical al gobernante que no puede
enfrentar sin un<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>estudio permanente <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de la realidad urbana: la movilidad, el avance
de la tugurización, el poder de las organizaciones criminales, las
expropiaciones y desplazamientos de población mediante la violencia con fines
de especulación urbana, y un aspecto claro, la cultura de la ciudad y su
conexión con el mundo para no caer en el degradante provincianismo en que hemos
venido cayendo; la importancia entonces, del Evento cultural de una ciudad al
olvidar la tarea de integración con el mundo y la promoción constante de
nuestros talentos en todo orden. La tarea decisiva de los trabajos de extensión
cultural en la misión de ahondar la voluntad cívica y crítica necesaria para la
interrelación social. Quintero bajo razones de demagogia populachera con fines
electoreros abandono la alcaldía: ¿Qué significa entonces por un lado el haber abandonado
su tarea de gobernar más allá de un abuso de poder?<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Abandonar la responsabilidad de gobernar una
ciudad sin haber elevado ningún estándar de calidad -de salud, educación,
movilidad, belleza urbana, etc-, constituye un delito moral de tanto alcance que
no puede reducirse a las sanciones previstas y clasificadas por la justicia
ordinaria. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">No puedo referirme a un culpable o a unos
inculpados de delitos contra la comunidad sin haber sopesado lo que esa
agresión supone en la realidad cotidiana como por ejemplo los asesinatos en
atracos por negligencia de las autoridades, lo que significa el estupor de una
familia ante los asesinatos selectivos por el no pago de vacunas, pero también
los muertos en accidentes por el no mantenimiento de las vías y malas
señalizaciones, la desaparición de las escuelas. ¿Qué ha supuesto lo que se ha
llamado la banalización de la justicia en este sentido cuando se juzga a un
gobernante únicamente bajo parámetros políticos, olvidando que debe ser juzgado
por los daños y ofensas que ha causado a la ciudadanía? Esta es, recordemos de
nuevo, la gran lección de la Justicia Universal hasta hoy donde un delito
municipal puede ser elevado a un delito contra la humanidad. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El mal que se le ha hecho en estos últimos
cuatro años a Medellín por parte de seres racionales, exige una sanción de la
justicia proporcional a los daños intangibles causados a la sociedad. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><o:p> </o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-10984178621907592132024-01-26T20:58:00.002-05:002024-01-26T21:00:57.332-05:00REMEMBRANZAS DE LA PANDEMIA / Efraín Alzate S<p><b><span style="color: #ffa400;"> </span></b></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihN9eoXOK9jlRHXwjX-XUymYCba22620QWHNZNk2Gmp_-yhfvgq1o-vNLziTObc-jXCwcNgsykKawF9dd9LimVIEeTiuxxZhcn5OdP6thVxFEiqn1aMR8R9MUV5Wo3Siw4GerFi60gT1Td2r9cAFUf3FOupwzSK5ImNEFMQcUVuGTAwi1EHKoh12zteVs/s497/gifPlakat_Danton.gif" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="497" data-original-width="346" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihN9eoXOK9jlRHXwjX-XUymYCba22620QWHNZNk2Gmp_-yhfvgq1o-vNLziTObc-jXCwcNgsykKawF9dd9LimVIEeTiuxxZhcn5OdP6thVxFEiqn1aMR8R9MUV5Wo3Siw4GerFi60gT1Td2r9cAFUf3FOupwzSK5ImNEFMQcUVuGTAwi1EHKoh12zteVs/w446-h640/gifPlakat_Danton.gif" width="446" /></a></td></tr></tbody></table><p></p><blockquote style="border: none; margin: 0 0 0 40px; padding: 0px;"><div style="text-align: center;">Danton, Wiesław Wałkuski</div></blockquote><p> </p><div><p><b><span style="color: #ffa400;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; text-align: justify;">REMEMBRANZAS
DE LA PANDEMIA</span></span></b></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><span style="color: #fcff01;"> Efraín Alzate S <o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">“El
diccionario de la RAE define el confinamiento como acción y efecto de confinar.
Este verbo hace referencia a recluir a alguien dentro de límites o a
desterrarlo a una residencia obligatoria La palabra confinamiento es utilizada
comúnmente para describir la acción de confinar; sirve además para referirse al
hecho de recluir o encerrar a alguien en un sitio, apartándolo de su libertad.
En el aspecto judicial implica una sanción decretada por un tribunal, que es
quien establece el tiempo que debe permanecer una persona confinada en un sitio
estipulado para ello”. Diccionario de la RAE Por mi condición de vida como
personaje citadino en la terrible pandemia, extrañé la ciudad que me cohibieron
al recluirme en casa por asuntos que a decir del gobierno eran para preservar
la vida de los ciudadanos. Estoy seguro de que recorro la ciudad para
encontrarme en ella, me busco a mí mismo en sus laberintos y cotidianidades, o
quizá trato de encontrar respuestas a inquietudes que llevo en mí como
ciudadano, aunque lo que surgen son nuevas preguntas. Ítalo Calvino al respecto
dijo: “De una ciudad no disfrutas las siete o setenta y siete maravillas, sino
la respuesta que da a una pregunta tuya. Disfruto la ciudad recorriéndola por
sus calles, carreras, centros comerciales, catedrales y demás A veces creo
conocer la ciudad, no tengo lugares que me atemorizan al recorrerla. Sigo
atentamente a los vendedores ambulantes, las prostitutas del raudal y la
Veracruz, los maricas notorios de los alrededores de la catedral metropolitana,
los cambalacheros y vendedores de cachivaches del viaducto, los artistas de la
calle, los pillongos de la bolita, los gringos y gringas de pies largos y
pálidos mascando chicle mientras los guías turísticos de la alcaldía con
actitud sumisa les muestran las estatuas de Botero; extrañé y de qué manera en
el encierro viral, las marchas y la protesta social a las que ya estoy
habituado, como ciudadano inconforme con estos gobiernos que desde hace 200
años vienen haciendo de los colombianos una sociedad abrumada en la pobreza y
en la injustica social. Pero además desde esa terrible reclusión obligada
extrañé la Universidad, sus contradicciones, los debates académicos al ritmo de
un café, las miradas temerosas de quienes ven amenazada en cada pasillo su
trinchera laboral, los profesores apresurados con sus exámenes confusos para
contar los perdedores, o aquellos que se perciben dialogantes con los párvulos
para animarles en el logro feliz de los saberes; extrañé de manera muy especial
las empleadas del aseo, los guardias de seguridad, los trabajadores de las
cafeterías y fotocopiadoras y los empleados de oficios varios en quienes tengo
mis mayores afectos. Extrañé, además, las secretarias y auxiliares con sus
uniformes recién planchados y con su sonrisa bien maquillada; se extrañó
también, al rector y demás jefes de alto rango, otros de baja estatura con sus
corbatas de colores, o con las togas graduándose en cada programa en repetidas
ocasiones al lado de los que culminan un programa.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">Siempre
me he preguntado por este simbolismo que a veces no logro entender. Pienso que
debiera existir un chaleco institucional para los directivos con los colores
distintivos de esta, y se vería mejor la presencia simbólica de ellos en
ceremonias de grados. Extrañé también del trasegar cotidiano los y las jefes
que pasan con sigilo husmeando por los corredores pisando duro con sus zapatos
de tacón alto, como si llevaran herraduras sonoras a ritmo marcial militar. Hoy
recordando el encierro por la atroz pandemia, creo con mayor firmeza que la
sabiduría, la inteligencia y la sencillez son el auténtico vestuario para
asistir a fiestas, halagos, galardones, ceremonias y demás cotidianidades de la
vida. De nada sirve atuendos estrambóticos y vistosos para mostrar autoridad
cuando lo que se percibe a simple vista es la poca cercanía con el ser humano,
lo que es de por si una absoluta falta de inteligencia y sabiduría. “Le Voubier
nos decía: “la modestia es el complemento de la sabiduría” Quizá por estas
percepciones un tanto desabrochadas merezca la hoguera, o que se me tilde de
profano. O sencillo, ni lean este texto. (Fontenelle, 1800). No fui ajeno a los
sofocantes atuendos en diferentes eventos a los que era necesario llegar de
corbata y bien perfumado, para poder estar a la altura de los que manejan el
poder. En una lectura a Paul Taborì, “historia de la estupidez humana” leí algo
sobre la extraña costumbre en la sociedad al confundir la inteligencia y la
autoridad con la calidad del atuendo que se lleva puesto. Me fui desprendiendo
lentamente de esos incomodos atavíos que asfixian e impiden la movilidad
corporal y la clara expresión de las palabras. Aun así, no queda duda que al
final lo que extrañamos en la pandemia, fue la universidad de estatus de poder
en donde hoy se asiste más a trabajar y menos a pensar. La mayoría de las veces
nos la pasamos juzgando y prejuzgando sobre los que representan la autoridad y
la forma de actuar de los gobernados. Es posible que esta obsesión sea una
cercanía con la condición de esclavo que llevamos inmerso en nuestro ser. En mi
caso he sido un permanente crítico de los que gobiernan en el Estado y en las
demás instituciones. Quizá desde esta percepción radical, no me he dado cuenta
del esclavo que habita en mí. Hegel, pensador de la filosofía de la historia
nos advertía: “estar obsesionado en la diferencia es ser esclavo; ser libre
respecto a la diferencia es ser amo”. Pero, en la tarde de la vida es complejo
desautorizar lo que hemos hecho y vivido; por ello ya no se entenderían
posturas serviles y silenciosas; no queda duda que con la pandemia logró el
capitalismo el silencio que quería en su afán por posesionarse de nuevo en el
mundo. Además, se franqueó el camino para el regreso y afianzamiento a “la
Universidad condicionada y plana”; el primer logro del Coronavirus, fue el
silenciamiento de los movimientos sociales y el posicionamiento de la banca
privada.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">Basta
con recordar las piruetas del gobierno de Duque en Colombia en su protección a
los gremios económicos y a los dueños de los bancos, para saber que lo que se
viene es la catástrofe para los más pobres. Los que no arrasó la pandemia los
arrasará la pobreza y la miseria motivada por el capitalismo depredador y atroz
que se posesionó de todo aprovechando el miedo que nos legó el Covid 19 Al
respecto el siempre vigente K Marx pensador de la lucha de clases, nos lo dijo
en el capital: “El capitalismo tiende a destruir a sus dos fuentes de riqueza;
la naturaleza y los seres humanos. En este sentido, no puede extrañarnos a lo
que en adelante concurriremos en la Universidad del post-covid ahora con más
fuerza mediante medidas calculadas del Estado para la Educación Superior.
Seguiremos viendo pasar las horas y los días en discusiones banales sobre
acreditaciones, llenando cuadros y diagnósticos de cosas que se hacen, pero no
de trasformaciones que se logran. Esto no le importa al Estado y la abruma en
cuadriculas acabando su autonomía para obstaculizar su histórica razón de ser.
De las banderas enarboladas a nivel del mundo por una Universidad con autonomía
y sin condición la pandemia nos dejó una Universidad intimidada. La Universidad
sin condición no existe ni existirá “Esta universidad sin condición no existe,
de hecho, como demasiado bien sabemos. Pero, en principio y de acuerdo con su
vocación declarada, en virtud de su esencia profesada, ésta debería seguir
siendo un último lugar de resistencia critica”. (Derrida, 2010) Aun así, en
medio de este pesimismo motivado en parte por el encierro y el encuentro
conmigo mismo al lado de algunos libros mientras la amiga de silencios “Juana
mi gata” me miraba, volví con mi pensamiento a los pasillos de la Universidad
en donde he pasado la mayor parte de mi vida en debates, controversias y
construcciones pedagógicas. En la pandemia, las paredes de la casa me hicieron
recluso en cárcel cómoda en la que iba venía pasando las horas, los minutos,
los segundos unas veces sentado en el sillón abordando alguna lectura, comiendo
un helado o merodeando con bulimia lo que quedaba de mercado. En este sentido,
ya lo dijo juan Villorro en la parábola del pan: “La mitad de nuestra
existencia es imaginaria: el sabor del pan depende de la libertad” Quizá es
mucho mejor un buen café al lado de compañeros y amigos con quienes se puede al
menos sonreír mientras se conspira o se narran picardías cotidianas. (Villorro,
2020) Soy de la vieja guardia, aterricé en las nuevas tecnologías como avión
que pierde su tren de aterrizaje. Aun así, lideré y lidero hoy algunas acciones
en la Universidad con programas que tienen que ver con manejo oportuno y
adecuado de las metodologías flexibles movilizadas desde las nuevas
tecnologías. De igual manera lideré la creación del departamento de idiomas y
de la primera sala de informática con aparatos para el ejercicio con la segunda
lengua. Aun así, no soy bilingüe, pero en su momento y hoy más que nunca creo
que es necesario el acercamiento a la segunda lengua para todos los programas
que ofrece una universidad.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">En
la pandemia culminé el proceso y me gradué como Magister en Educación en la
Universidad Católica de Oriente, lugar que me indicó caminos para desaprender y
escuchar nuevas ideas en el campo de la educación. Por mis gruesos años llegué
a creer que todo estaba dicho y que muy poco había por aprender sentado
juiciosamente en pupitres cotidianos. El humanismo de los docentes y la
convicción en sus saberes me llevaron a declinar mi postura soberbia frente al
conocimiento. Nunca es tarde para aprender y remover las malezas que han
crecido en nuestra vida y que nos impiden acercarnos a nuevos saberes. Por ello
me inscribí además en un “Centro de Idiomas”, para intentar quitar las taras y
prevenciones que se tienen frente a la dificultad que uno por los ya abultados
años de vida tiene para llegar a tatarear algunas palabras en otro idioma. El
mayor problema lo noté cuando los técnicos y expertos en inglés, tienen la
convicción de que este es una ciencia. Siempre he sostenido y sostendré que más
allá de la importancia que el inglés tiene a nivel universal, no deja de ser
mas que una herramienta lingüística que afianza el colonialismo universal. Y lo
mas grave en estos casos es que los docentes que llegan a los centros de idiomas
no aplican las mas mínimas herramientas pedagógicas para que el aprendiz se
atreva al menos a incursionar a la cultura de una segunda lengua. La
globalización ha llevado a la necesidad de estos aprendizajes, por ello las
carreras de pregrado y posgrado tienen en su proyecto académico niveles
estructurados de inglés. Pero no lo han hecho desde herramientas didácticas y
pedagógicas sino a partir de exámenes estandarizados que terminan fastidiando
al estudiante y en muchos casos llevándolos a desertar de sus carreras. Todas
las universidades deben revisar el horizonte de sus centros de idiomas,
teniendo en cuenta que un estudiante se matricula a una carrera profesional y
no para ser bilingüe. A lo que deben apuntar a partir de los niveles que se
exigen, es a crear las bases motivacionales hacia una cultura de la segunda
lengua, ya cada profesional tomará la decisión en su momento para buscar el
lugar adecuado y estudiar el idioma que quiere conforme a los proyectos de vida
que surgieron después de su formación profesional. En este sentido, el
confinamiento me llevó a asumir algunos retos de Vida. Pero ante todo lo digo
con franqueza: “el pandémico encierro me llevó a descubrirme en el tipo de
persona que soy”. Prometí en medio del encierro y después de superar el Covid,
que sería mejor ser humano en cada faceta de lo que queda de mi precaria vida,
si una vez superada la pandemia no quedaba en el inventario de los que se
fueron. En ello ando, buscando reinventarme para vivir con soltura los últimos
días de mi vida, más allá de cotidianidades burocráticas. <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"> </span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"> ...</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><br /></span></p>
<span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-CO; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-bidi-theme-font: minor-bidi; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US; mso-fareast-theme-font: minor-latin;"><span style="color: #bf9000;">Bibliografía:</span></span><div><span style="color: #bf9000; font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 17.3333px;"><br /></span></span><div><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-CO; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-bidi-theme-font: minor-bidi; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US; mso-fareast-theme-font: minor-latin;"> Diccionario de
la RAE </span></div><div><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-CO; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-bidi-theme-font: minor-bidi; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US; mso-fareast-theme-font: minor-latin;">Fontenelle, Bernard Bouyer (1800) Entretiens sur la pluralité des
mondes: augmentés des Dialogues des morts, Lyon, Leroy </span></div><div><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-CO; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-bidi-theme-font: minor-bidi; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US; mso-fareast-theme-font: minor-latin;">Derrida, Jacques (2010)
Universidad sin condición, trad. Cristina de Peretti y Paco Vidarte, Madrid,
Trotta </span></div><div><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-CO; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-bidi-theme-font: minor-bidi; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US; mso-fareast-theme-font: minor-latin;">Freire, Paul. (1997). Pedagogía de la Autonomía. México DF: Siglo XXI </span></div><div><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-CO; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-bidi-theme-font: minor-bidi; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US; mso-fareast-theme-font: minor-latin;">UNAULA (2020) Centro de Idiomas, Medellín, Universidad Autónoma
Latinoamericana, consultado en: https://www.unaula.edu.co/centro_idiomas </span></div><div><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%; mso-ansi-language: ES-CO; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-bidi-theme-font: minor-bidi; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US; mso-fareast-theme-font: minor-latin;">Villoro, Juan (2020) Parábola del pan, México, Reforma, consultado en:
https://www.reforma.com/aplicacioneslibre/preacceso/articulo/default.aspx?__rval=1&urlredirect=https://www.reforma.com/parabola-del-pan-2020-04-24/op178741?referer=--7d616165662f3a3a6262623b727a7a7279703b767a783a</span></div></div></div>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-24810287859029763212024-01-26T20:28:00.007-05:002024-01-26T20:28:56.333-05:00 Cioran: Ventana a la nada / Fragmentos / <p> <table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjMcEQLbgIcNUq35hDmxlnCubLckSdXCZQalxq5w4DPComCIZmiSz9907uPw_fMjCRhjllcKWeD2_dzJrnRlWpqOns1hLH1Z5PV4CCIr4Cb-V44D4ZaogN73OLX_gUgrS5aAZOE79joPuhYXYXEgG7rerNL_GVq3UulaEAxMgO7uoVSW3Lo7tPIfb8DQeo/s403/12gig.gif" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="343" data-original-width="403" height="544" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjMcEQLbgIcNUq35hDmxlnCubLckSdXCZQalxq5w4DPComCIZmiSz9907uPw_fMjCRhjllcKWeD2_dzJrnRlWpqOns1hLH1Z5PV4CCIr4Cb-V44D4ZaogN73OLX_gUgrS5aAZOE79joPuhYXYXEgG7rerNL_GVq3UulaEAxMgO7uoVSW3Lo7tPIfb8DQeo/w640-h544/12gig.gif" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Cioran</td></tr></tbody></table><br /></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="line-height: 107%;"><span style="color: #cc0000; font-family: Book Antiqua, serif; font-size: large;"><b> Cioran: Ventana a la nada / Fragmentos / </b></span></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;"><br /></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La
imbécil basa su existencia en lo que es. No ha descubierto lo posible, esa
ventana a la Nada...<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La
imbecilidad es el arraigo supremo, innato, una </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">indistinción
de la naturaleza, y se vanagloria de los </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">peligros
que ignora. Puesto que no hay nadie menos </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">oprimido
que el imbécil, y la opresión es señal de un </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">destino
alejado de la indolencia y del anonimato de la </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">felicidad.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Los
celosos sufren de un exceso de imaginación. Se </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">complacen
en lo que no ven. Los celos no son más que </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">el
tormento de los sentidos en lo invisible. Nada los </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">perturba
más que la certeza. Un celoso absolutamente </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">seguro
de no ser engañado no puede amar, porque no </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">podría
hacer nada sin la tortura de lo probable. En </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">una
época de suplicios en la que la tentación de la </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">mujer
no definiera su aliento, sería un mártir. Hay en </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">los
celos un deseo [dor]1 de sufrir a toda costa.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El
más mínimo pensamiento presente en el seno de </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">la
sexualidad refleja insinceridad. Las mujeres saben </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">muy
bien por qué sienten horror por los filósofos...</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La
mayoría de la gente cuya boca se deprava oculta</span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">así
la vergüenza que siente al decir: corazón. Chapotea en la pornografía por
exceso de pudor. He encontrado más lágrimas entre los cínicos que entre
aquellos que tienen el deseo en los labios.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Solo
he tenido tiempo para las decepciones. Lo que </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">no
tenía que ver con ellas me parecía ofrecer un respiro insultante para el sudor
de los mortales. Cuando </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">hacer
algo —hacer cualquier cosa— es una fuente de </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">angustia,
la amargura se convierte en la justificación </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">de
tu ausencia.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Solo
he conocido una pródiga e insistente languidez </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">[dor]
por las mujeres y por la nada.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Me
he tomado la muerte en serio. Me he impuesto </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">sobre
ella.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Nuestra
incapacidad para aullar hace de nosotros </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">unos
asesinos virtuales.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">No
hay nada, en todo aquello que le sucede a la gente, </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">que
merezca ser elevado al rango de concepto. En </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">todas
partes no son más que cosas de los sentidos...,</span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">pero
que se redimen en su locura. La intensidad es la</span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">única
excusa de esta vida efímera.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Caminando
por la calle, a menudo me hago preguntas sobre el esfuerzo cultural que priva a
los mortales </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">de
los escupitajos de asco o de piedad que inspiran, y </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">me
pregunto si la sinceridad tiene un enemigo mayor </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">que
la urbanidad...</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Esas
banales melodías que transforman el último elemento de nuestra sangre en
símbolo de lágrimas, y </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">ciudades
costrosas en Venecias, e intoxican nuestro </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">aliento
con su irrealidad...</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Fuera
del amor y del sufrimiento, el universo parece </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">un
triste marco forjado por la imaginación de algún </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">topo.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Ninguna
palabra bajo el sol está a la altura del alma.</span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">Y
cuando falta la clave de la locura sonora, se encuentra en el pesar [dor] de
las lágrimas un consuelo </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">a
esa impotencia lingüística.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Lo
sublime lo pierde todo cuando es expresado. No<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">tiene
estilo. Trasladados a la palabra humana, los últimos paisajes de la naturaleza
o del corazón se asemejan a desastres de mal gusto, o bien a terribles bobadas.
La perfección excluye cualquier susurro.<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">El
encanto de la música </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">nos colma porque
esta flota </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">por
encima de la bajeza de las existencias controladas. Escapa tanto al ser como al
no ser. Es el único arte que tiene que ver no con lo que existe, sino con </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">nuestro
devenir en lo irreal.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Esas
horas que pasas consumido por el ardiente remordimiento de no haber encontrado
un lugar donde </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">morir,
de haber arruinado tu final por pereza... Son </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">las
horas del amor.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Entre
todas las fórmulas de la salvación y yo se interpone un alma que está tan
empapada de nada como </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">de
existencia.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">La
muerte es la prolongación —sin conciencia— de </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">un
implacable insomnio..., una vigilia eterna fuera del </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">espíritu.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El
amor es la demencia de las fosas nasales. Ese efímero aroma de carne y de
putrefacción... </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">Pero sin él, respirar sería una depravación indecible.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">*</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Las
mujeres me han inspirado más la sensación de </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">mi
desaparición que todos los cementerios de la Tierra. Si no, no habría
multiplicado los argumentos </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">para
excusar a esa criatura accidental, contra la evidencia del vacío.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">El
hombre se salvaría si las lágrimas sobrevivieran a </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">los
ojos. Pero de Níobe y de Hécuba no hemos hecho </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">más
que estatuas. Las mayores compasiones solo duran lo que dura un monumento.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">No
habría sacrificado tanto tiempo al amor si no hubiera visto en él la prueba más
solemne y más inútil </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">que
existe bajo el sol. Desde el encuentro de Adán con </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">Eva,
la cadena de la vanidad suma un eslabón con </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">cada
desesperación.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">*<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">Cada
mañana, mis ojos se abren con más curiosidad </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">que
el primer día de la Creación del mundo y con más </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">indiferencia
que el día de su Finalización.</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">...</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">Cioran emplea aquí el término «dor», sin equivalente en </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">francés
pero que a menudo se compara (lo hizo Cioran) con la </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">saudade
portuguesa o bien con la Sehnsucht alemana: está </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">em</span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">parentado
con «el deseo doloroso, con el duelo, con la tristeza, </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">con
la melancolía, con la nostalgia, con la languidez, con la </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">morriña,
con el estado afectivo del deseo erótico, con el dolor </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">interior»
(según Anca Vasiliu en el Vocabulaire européen des philosophies, Seuil / Le
Robert, París, 2004, pág. 326). Cioran le </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">consagró
un artículo publicado en 1943: «Le “dor” ou la nostalgie» (en Œuvres,
Gallimard, Bibliothèque de la Pléiade, París,</span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;">
</p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 107%;">2011,
págs. 1259-1263). (Todas las notas corresponden a la edición original
francesa.)<o:p></o:p></span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm;"><o:p></o:p></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-54344382236858360302024-01-23T23:10:00.003-05:002024-01-23T23:10:57.946-05:00LO QUE DEJASTE SIN HACER / Darío Ruiz Gómez<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh8J3Et71ZzsEU1JBwxEkc2f-a3QtnISZl1u8LKltAAn-FMOYqf5DpoA5wJRTNroFgXouvhLzO8MZ10iaujIGluJM0OBlJdsXvRWEBe0JE13HzMD6dVaHL0KyRUgmiKfWdPv0o0An5JJgBC_7bJZNF3PrOL_OVWvgFVMusE8q0PEwDWXbr9r3VTstqJO1I/s442/GIG.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="442" data-original-width="291" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh8J3Et71ZzsEU1JBwxEkc2f-a3QtnISZl1u8LKltAAn-FMOYqf5DpoA5wJRTNroFgXouvhLzO8MZ10iaujIGluJM0OBlJdsXvRWEBe0JE13HzMD6dVaHL0KyRUgmiKfWdPv0o0An5JJgBC_7bJZNF3PrOL_OVWvgFVMusE8q0PEwDWXbr9r3VTstqJO1I/w422-h640/GIG.gif" width="422" /></a></div><br /><p></p><p><br /></p><p><b style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; text-align: justify;"><span style="color: #ffa400;">LO QUE DEJASTE SIN HACER</span></b></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;"><span style="color: #fcff01;">Darío Ruiz Gómez<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>A <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>un
Alcalde <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>se le atribuye <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>dar<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la
desdichada respuesta cuando llegó a la Alcaldía de Medellín rodeado de un
destacado grupo de jóvenes profesionales que propusieron un modelo nuevo de
ciudad con su plan de bibliotecas barriales, sus replanteamientos paisajísticos
del espacio público,<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la defensa del
peatón como protagonista principal en el camino hacia la construcción de una
ciudad más humana, con una más intensa integración de los barrios propiciando
recorridos para convertir la inter relación social en una realidad fundamental,
<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>cuando <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>dijo refiriéndose a algunos proyectos como el
de la Avenida la Playa que el Arquitecto Laureano Forero había felizmente
intervenido, que no lo completaría “Porque ese proyecto no es mío” Actitud
que<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>permitió que algunos observadores
políticos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>recabaran sobre lo que había
venido sucediendo en la ciudad donde cada Alcalde hacía borrón y cuenta nueva
de lo que habían hecho o habían dejado sin terminar <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>las anteriores <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Alcaldías <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>para, en un gesto adánico, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>estar<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>siempre comenzando de nuevo. Sorprendido por su nombramiento Fico en su
primera Alcaldía recurrió como es natural a gentes de su confianza que no
siempre estuvieron respaldados por una experiencia necesaria en lo referente a
las distintas problemáticas urbanas como el eterno rescate del Centro, el metro
de la 80 y la culminación de una obra decisiva como Parques del Río. “Fue –dijo
un comentarista- el único Alcalde que no terminó lo que había comenzado” Lo
cual no constituye recriminación alguna pues muchos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>proyectos urbanos son pensados a futuro<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>si ese futuro está respaldado por la
viabilidad técnica y económica <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>del
proyecto y el respaldo de la comunidad <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y
no por los contratistas. Ahora Fico se encuentra ante una ciudad que durante
cuatro años de gobierno populista y con un gabinete de vivos oportunistas dejó <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a la ciudad, abandonada a su suerte tal como
lo he venido comprobando en sucesivos recorridos: la<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>espléndida intervención de Nano desapareció
por completo y hoy a un cúmulo de basuras, a un quiebre de los bordes
sigue<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la afrenta de <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>cuerpos de <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>mendigos muriéndose de hambre. Lo que fue una avenida
emblemática en la continuidad de los recorridos gracias a un gran diseño es
ahora una calle de Calcuta no por casualidad sino por la acción de un
desgobierno fríamente calculado por burócratas resentidos. El proyecto de
normalizar el flujo de gentes de los barrios altos con la Playa quedó en el
aire gracias a esa insultante decisión de “Esto no lo hice yo” que en el caso
de Quintero fue un desafiante “no me da la gana de hacerlo”<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;">Contratar una obra urbana sin
antes prever su diseño para no impactar negativamente a las Comunidades
impidiendo una condenable fractura de la malla urbana, el desplazamiento inicuo
de vecinos ¿Para qué entonces existen los planes de ordenamiento territorial,
sino para dar paso a <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>una idea de ciudad
que debe nacer de la lectura precisa de lo existente? ¿No es necesario
replantear la función de los Planes Parciales? Partir de una falsificada idea
del “Medellín de ayer” es abocarse a un fracaso insultante ya que tal como lo
puede uno observar las invasiones se han expandido escandalosamente en las
laderas, los antiguos bordes han sido sobrepasados, han surgido nuevas
economías y nuevas centralidades, nuevos grupos de cultura urbana que la
Oficina de Planeación debe reconocer y ordenar<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>ahora que ya la gentrificación de barrios como Manrique, Aranjuez, Belén
es un hecho. Y en estas instancias lo escandaloso es que el deprimido de la
Avenida Oriental siga a oscuras y las salidas de Medellín hacia el Sur y hacia
el Norte sean cada vez un problema que se acrecienta y que no se resuelve
gracias a un oscuro contratismo y al olvido de las tareas del Área
Metropolitana.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%;"><o:p> </o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-36696246991664570822024-01-23T22:58:00.001-05:002024-01-23T22:58:09.877-05:00Bernardo Angel / Manifiesto a todos los actores<p> <br /><br /></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiCOz533vGUR7bhU_xcG1QNiIp-oqqwNSWhpFIdUNezPkO3aL68AvJfg1lUvIBWdgpG7K_BmSMV1arNk2P_4Tls_dt5vE25_vBpRSCNG2kHFXhQvStQmx_SVPQBNYlYwUtrxEHCLDa-PXkjKsWfOUvrQ_OFmbqcdgwzLOE_FUy-1EhUxmi_gjdFzsv_C8s/s519/ba.gif" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="519" data-original-width="409" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiCOz533vGUR7bhU_xcG1QNiIp-oqqwNSWhpFIdUNezPkO3aL68AvJfg1lUvIBWdgpG7K_BmSMV1arNk2P_4Tls_dt5vE25_vBpRSCNG2kHFXhQvStQmx_SVPQBNYlYwUtrxEHCLDa-PXkjKsWfOUvrQ_OFmbqcdgwzLOE_FUy-1EhUxmi_gjdFzsv_C8s/w504-h640/ba.gif" width="504" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Bernardo Ángel</td></tr></tbody></table><br /><div><br /></div><div><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi9UErWoKt72_mKMR9XS0HU0dbPBPHmupl1yq2wzJXGnJ0t4sDrn-pYO153-XCnxpHBiMczkgbILLUXpqWwfimk2pNlEGBT-IShBoa456N7H1ggR4k4nJpaTNqVeLZVhD4jHAJP1gZTrdA-yETo3_UtusKyQqNIORiz-40j1kLhyphenhyphenhUB6i-_7l_3ZfeqEyA/s1600/93a1eeae-d4c9-4114-aea8-6b628c381bfe.jpeg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="1236" height="518" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi9UErWoKt72_mKMR9XS0HU0dbPBPHmupl1yq2wzJXGnJ0t4sDrn-pYO153-XCnxpHBiMczkgbILLUXpqWwfimk2pNlEGBT-IShBoa456N7H1ggR4k4nJpaTNqVeLZVhD4jHAJP1gZTrdA-yETo3_UtusKyQqNIORiz-40j1kLhyphenhyphenhUB6i-_7l_3ZfeqEyA/w400-h518/93a1eeae-d4c9-4114-aea8-6b628c381bfe.jpeg" width="400" /></a></div><div><br /></div><br /><div><br /></div><div><br /></div><br /><div><br /></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEil-WYcIWTrl0CCLIlQMp0dLUxiMc8qXfRJuuMWoXYi9ipwzvJh9Bjn4HEOSNq4Ya4VQGjtvqqi4d9q8VpOWbjKz1T-jf6VcBtBu6nLRJFyeXiEQSyokl_s5kPq9WJfQ25-dqCw-QDK6jDLO5SsHQVYAuJNixRi_sY1kyXmdkeNL7y7HLAwHvOtfmFc5NM/s1600/6124d136-2b88-4afa-b785-054dc8858098.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1600" data-original-width="1236" height="496" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEil-WYcIWTrl0CCLIlQMp0dLUxiMc8qXfRJuuMWoXYi9ipwzvJh9Bjn4HEOSNq4Ya4VQGjtvqqi4d9q8VpOWbjKz1T-jf6VcBtBu6nLRJFyeXiEQSyokl_s5kPq9WJfQ25-dqCw-QDK6jDLO5SsHQVYAuJNixRi_sY1kyXmdkeNL7y7HLAwHvOtfmFc5NM/w383-h496/6124d136-2b88-4afa-b785-054dc8858098.jpeg" width="383" /></a></div><br />Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-23748843326956577402024-01-16T23:27:00.002-05:002024-01-16T23:39:36.670-05:00NOCHE EN PRAGA Jana Putrle Srdić<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjP4mqVwsCMjdnGdsbe6nYxFpAtmE9Uojbf-ubVvibXps62jfslCLlcmKfTm4KxSqS5-1Cr02BjRL5xeXnCUf-D_AgbAvja0bxAQ2bPesKq2XPrLErFqYaKnpJDFC9691KMtkg2Jz6_Awn4jz8d3VVQt0YGp2Pqc2YnR1xPL7D54cwF7ZEgEWY71RPh91E/s275/jana2.gif" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="183" data-original-width="275" height="426" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjP4mqVwsCMjdnGdsbe6nYxFpAtmE9Uojbf-ubVvibXps62jfslCLlcmKfTm4KxSqS5-1Cr02BjRL5xeXnCUf-D_AgbAvja0bxAQ2bPesKq2XPrLErFqYaKnpJDFC9691KMtkg2Jz6_Awn4jz8d3VVQt0YGp2Pqc2YnR1xPL7D54cwF7ZEgEWY71RPh91E/w640-h426/jana2.gif" width="640" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><span style="color: #ffa400;">NOCHE
EN PRAGA</span><o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><span style="color: #fcff01;">Jana
Putrle Srdić<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;"><o:p> </o:p></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">Ciertamente
cayó nieve</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">a
través del velo dorado de la luz<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">los
copos retirados <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">silbando
en la plaza<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">el
silencio de una gran ciudad<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">crea
intimidad entre desconocidos<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">nadie
te ve cuando <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">haces
el amor sobre las baldosas rojas del metro<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">y si
consigues detener la constante </span></p><p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">de
unos cuantos praguenses al otro lado de la plaza,</span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">si
haces sonreír a las vendedoras<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">de
amor en las esquinas,<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">si
en los pliegues de cada casa pones besos,<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">le
das la espalda y dejas <o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">manos
cálidas para acariciarla<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">desnúdala<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">y si
a veces cuando vuelves lo haces<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">intercambiar
algunas miradas con todos los pasajeros<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">con
todas las frentes arrugadas compradas a las cinco<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">entonces
tal vez<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">sabes
lo suficiente<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0cm;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; line-height: 107%;">para ser un extranjero<o:p></o:p></span></p><br /><p></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-25802119276527201642023-12-31T17:26:00.002-05:002023-12-31T17:48:03.801-05:00UN CANTO POR LA LECTURA Antonio Arenas<p> </p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLDrabBgoEqH8EoMnz_SdQnx_leGBjO4n4NJiqKNwovWGbHIp26U7p1LdSnpFZZusqpE-1Dtoae_7kyVdcUeKVZPnTjZTopjUIBPJ0m3TLJHyRziTbi6hIExXCzlUVpTilZ-lnTekHghV45FYJ6dkkgMiVwDGYB3__TG1EIKH8l8AiYdmQFkMcC-irKeU/s454/12387914_schermata-2019-06-25-alle-20-42-43.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="437" data-original-width="454" height="616" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLDrabBgoEqH8EoMnz_SdQnx_leGBjO4n4NJiqKNwovWGbHIp26U7p1LdSnpFZZusqpE-1Dtoae_7kyVdcUeKVZPnTjZTopjUIBPJ0m3TLJHyRziTbi6hIExXCzlUVpTilZ-lnTekHghV45FYJ6dkkgMiVwDGYB3__TG1EIKH8l8AiYdmQFkMcC-irKeU/w640-h616/12387914_schermata-2019-06-25-alle-20-42-43.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="color: #161616; font-family: Barlow, sans-serif; font-size: 18px; text-align: left;">Pawel Kuczynski</span></td></tr></tbody></table><br /><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br /></div><br /><p></p><p align="center" class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: center;"><u><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"><span style="color: #ffa400;"><b>UN CANTO POR LA LECTURA<o:p></o:p></b></span></span></u></p>
<p align="center" class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: center;"><b><u><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;"><span style="color: #fcff01;">Antonio Arenas</span><o:p></o:p></span></u></b></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;"><span style="font-size: 13pt;">Antes que nada, debo deciros que
hablo, leo, escribo y discuto y eso les pasa a muchos o quizás a una pequeña
minoría de escritores. Estamos habituados a decir las cosas impulsivamente y de
una manera que raya con la realidad. Hoy en la sociedad digital y de la
información, lo que importa es la productividad, el rendimiento y el dinero. No
hay tiempo para el ocio y el amor, el arte, la música y la lectura. Tengo un
deber de gratitud con los niños, las mujeres y los hombres. El temperamento de
las personas antes era diferenciador, ahora vivimos el infierno de lo mismo y
la tecnología nos convierte en un dato o un macrodato. La vida esta edificada
sobre la vida y no sobre la muerte y el beneficio. No hay otro país más
hermoso, rico, ni con más capacidad de mostrar las emociones que el nuestro;
pero Thanatos abunda entre nosotros y hemos edificado sobre lo siniestro y no
sobre el amor y la lectura. El calor y el viento ya no tienen música y el
sonido de los niños se escucha a lo lejos. La pasión artística y el sentimiento
de la turbación y la alegría que es como decir el sentido de la vida, vale poco
para muchos hombres. Porque en el país no hay más que vida y muerte. Deberíamos
glorificar la vida. Decirle si a la vida aún en los momentos difíciles,
construir “una voluntad de vida”. Me gustaría que volviéramos a los rituales, la
lectura, las fiestas, a leer alrededor de una hoguera y narrar historias. No
solo de pan vive el hombre, necesitamos libros y lectores, reclamaciones
culturales, donde el hombre quiera saber a través de los libros y la
experiencia. Hay que enriquecer el espíritu humano. Libros y libros y más
libros he ahí lo asombroso para que todos lean. Amor y libros es lo que
deberían pedir los pueblos. Como diría el gran escritor Fiódor Dostoyevski,
quien logró captar el alma humana: “Enviadme libros, libros, muchos libros para
que mi alma no muera”. Tenemos celular, drogas, y criminales, pero no tenemos
libros. Es decir, no llegamos a los espíritus de los niños, jóvenes, adultos y
viejos, hoy los centros comerciales estos llenos de lugares donde se vende y
paga la tecnología, pero no y hay librerías, entonces como queremos lectores y
que comprendamos que sentido tiene la lectura. Finalmente, como diría el poeta:
</span><b style="font-size: 13pt;">“¡Libros!, ¡libros! He ahí una palabra mágica que equivale a decir: amor,
amor, y que debían los pueblos pedir como piden pan o como anhelan la lluvia
para sus sementeras”. Agua para la Guajira y libros para el pueblo</b><b><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></b></span></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;"><span lang="ES" style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt; mso-ansi-language: ES;"><b><span style="mso-spacerun: yes;"></span>antonioarebe1@hotmail.com<o:p></o:p></b></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-158307197472504782023-12-31T17:21:00.001-05:002023-12-31T17:45:14.264-05:00RECONOCIÉNDONOS DE NUEVO, DE NUEVO SALUDÁNDONOS / Darío Ruiz Gómez<p> <table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgKh2G6YFUk04-97RyBrNLNTfb7ocH_i6heG4_gJ3qBYxxqxuP7vFlCDiWCh3M3XNPWE01ci4wgvsYMvLvxgsd8v3_YtM4cA2KQwMNDWVcGnUM4vBHTQAzWi2Cm5saWZZKCj0kh-EWh8FwRa2J8vQLr0N2xKefsuHE26Ld2H0dVxSMtT3-llKo2ElOVvd0/s437/Pawel-Kuczynski-guerra.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="437" data-original-width="350" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgKh2G6YFUk04-97RyBrNLNTfb7ocH_i6heG4_gJ3qBYxxqxuP7vFlCDiWCh3M3XNPWE01ci4wgvsYMvLvxgsd8v3_YtM4cA2KQwMNDWVcGnUM4vBHTQAzWi2Cm5saWZZKCj0kh-EWh8FwRa2J8vQLr0N2xKefsuHE26Ld2H0dVxSMtT3-llKo2ElOVvd0/w512-h640/Pawel-Kuczynski-guerra.jpg" width="512" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="color: #161616; font-family: Barlow, sans-serif; font-size: 18px; text-align: left;">Pawel Kuczynski</span></td></tr></tbody></table><br /></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><b><span style="color: #ffa400;">RECONOCIÉNDONOS DE
NUEVO, DE NUEVO SALUDÁNDONOS<o:p></o:p></span></b></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;"><span style="color: #fcff01;">Darío Ruiz Gómez<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">A fuerza de tanta
estupidez como la que diariamente nos regala el gobierno, de tanto desatino por
parte de funcionarios y funcionarias <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>oficiales cuya demostración de mínimos índices
de conocimiento para ejercer su puesto, no ha dejado <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de fastidiarnos hasta<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>llevarnos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a elegir conscientemente<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que lo mejor es que nuestra vida continúe con
sus contenido habituales, olvidándonos<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>de estos esperpénticos personajes de sainete, de la masacre que han
hecho unos y otros de la función pública. Es la reconfortante impresión <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que siento cuando he regresado a los espacios
públicos que el coronavirus <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>nos había
robado y me encuentro que la peste con su brutal aislamiento colectivo no pudo
doblegarnos como se pensaría que haría. Nunca fuimos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sumisos y en este intervalo<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>aprendimos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a conocernos como seres capaces<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de dialogar desde<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>un<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>silencio desde <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el cual volvimos a
escuchar las voces <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de nuestros parientes, de aquellos compañeros
de colegio cuya común experiencia en los grandes temas de la existencia, marcó
para siempre la ética de la amistad y hemos comenzado a llamarlos para tener en
vida a quienes se fueron para siempre . Pero la foto de la promoción del
colegio donde estamos juntos al terminar bachillerato se impone como un
presente que nada ni nadie puede <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>erosionar. Porque si algo descubrimos después
del <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>aislamiento es que la confianza de
volver a vernos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ha sido más contundente <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>frente a la Historia, frente a la política, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ya que como la vida es sagrada <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>lo humano ha salido triunfante. Y <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>las<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>astracanadas <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de los asesinos y
corruptos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>nada<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>pueden <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>frente
a la insobornable <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>firmeza<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que supone el <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>habernos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>recuperado <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>como una gran <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>comunidad <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>humana <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y que ya por lo tanto <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>nada nos impedirá salir con la familia por las
carreteras , ni nadie impedirá que las mujeres de edad se hayan apoderado de
las ciudades <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y el nombre de los asesinos
y de quienes los propician ya los tengamos con nombres y direcciones. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Ante<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la
mentira utilizada como estrategia <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>poder político, paradójicamente y afortunadamente <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>lo
primero que se ha resquebrajado para siempre es <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el edificio de la retórica de<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>los poderes, de esos falsos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>medios de comunicación y al volver a sentirnos
dentro de una <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>comunidad hemos vuelto a
crear los lenguajes secretos de los perseguidos que desde las catacumbas crean
signos y símbolos imposibles de entender para los policías <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>del lenguaje. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>La lengua <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de quienes hoy están<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>comprobando que los territorios no están ya
ubicados en un punto preciso sino que van desplazándose con nosotros, tal como
va con nosotros la casa en que primos y primas crecieron y se han mantenido
desplazándose para que esta imagen de nuestra tradición <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>no sea convertida en propiedad privada. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El país que está permanentemente<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>escapando <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a sus captores, el pueblo que era necesario
crear desde nuestras<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>esperanzas y desde la
confianza en la primacía de nuestros afectos<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>como <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>una patria real pero no como<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>un territorio que se pone en alquiler.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13pt;">¿Qué ha significado
hasta aquí llamarnos colombianos? Un big data a comodidad para que los verdugos
nos ubiquen. Pero este país oficial, centralista, abstracto, de burócratas feos
y de feos asesinos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>es el que se ha
venido abajo cuando se <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ha muerto nuestra
confianza en sus falsas promesas de mejores días de prosperidad.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>La felicidad es un anhelo imposible de
cuantificar<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>o de legislar como derecho
inalienable<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de cada ser humano ya que es
ese súbito estallido de una luz que nos ha permitido volver a reconocernos en
los otros, a saludarnos, a mirar a Dios. PD: Estaré dos semanas de vacaciones.
Buen año <o:p></o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-16689033182228461952023-12-31T17:16:00.002-05:002023-12-31T17:16:31.504-05:00INOLVIDABLE IMAGEN DE LA IMPUNIDAD / Darío Ruiz Gómez<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi5iPn597oSaT_SYJN7w_sV5ve3bVUu33tfZY2u20axnPNE623Jvy9g0UUmRstastSIBsijgi006TDBIqau_sReZXXFlMYASY59immPOuOnqwdbH9IZpQY2nH0gSJW2xo2PTg9hRmDV6LY0OeBdWNLf7FTYAN8ZaOJvc-lua51Cg9YgZPyp7W1CVAPhSrw/s599/56b8cd51d2769%20-%20copia.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="300" data-original-width="599" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi5iPn597oSaT_SYJN7w_sV5ve3bVUu33tfZY2u20axnPNE623Jvy9g0UUmRstastSIBsijgi006TDBIqau_sReZXXFlMYASY59immPOuOnqwdbH9IZpQY2nH0gSJW2xo2PTg9hRmDV6LY0OeBdWNLf7FTYAN8ZaOJvc-lua51Cg9YgZPyp7W1CVAPhSrw/w640-h320/56b8cd51d2769%20-%20copia.gif" width="640" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><span style="color: #ffa400;"><b>INOLVIDABLE IMAGEN DE
LA IMPUNIDAD<o:p></o:p></b></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><span style="color: #fcff01;">Darío Ruiz Gómez<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Un policía liberado <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>en la genial<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>operación Jaque <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>cuando un Comando
del Ejército<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>se hizo pasar por una <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>misión de la Cruz Roja Internacional <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y engañó a un Comandante de las FARC
haciéndole creer que iban a trasladar a quince secuestrados por órdenes de su
Comando Mayor ; <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y quien había
permanecido <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>secuestrado <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>durante <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>penosos ocho años sometido <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>seguramente a tratos terribles, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>encadenado de pies y manos, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>atado a un árbol <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>durante las noches, vejado inmisericordemente;
hace poco días le <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>contaba <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a un medio de comunicación que después de<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ser <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>liberado <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>seguramente <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>después <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>someterse a tratamientos médicos y
psicológicos para recuperarse de las torturas e insanias<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>físicas<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>y psicológicas<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>en uno de los
Gulags del el Mono Jojoy <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la vida había
continuado. El espléndido testimonio de Ingrid<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Betancourt <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>escrito por un
escritor<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>fantasma <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>es<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el
análisis <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>formas
de <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la violencia <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>fariana calcada <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>del régimen soviético o de del Pol Pot y<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>aplicadas en Colombia con una mayor
rigurosidad. Lo más conmovedor <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de esta
historia acontece cuando, tiempo después, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el militar es encargado de la seguridad de los
congresistas y al entrar en el recinto sagrado de la democracia descubre
estupefacto que allí están varios(as) de sus<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>torturadores (as) vestidos de padres y madres de la Patria ya que el
Acuerdo de Paz <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Santos-Timochenko<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ha<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>premiado su crueldad <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>con una
curul en el Congreso. En un flas back –volver atrás- de un hipotético <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>guión cinematográfico<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>este<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>policía <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>mientras observa a sus
captores <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>disfrutando de todas las
prebendas que se les ha<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>concedido,<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>siente que<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>se le agolpan en el cerebro las imágenes de esos espantosos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>días<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>en
los cuales<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>fue sometido a toda clase de
bajezas por sus captores. Las lágrimas no serán la respuesta <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sino<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>su
interrogante sobre lo que <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>puede significar
<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la Justicia en un país donde quienes
como servidores públicos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la defienden <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>con su vida y no llegan a entender que los
verdugos sean reconocidos por el Estado mientras miles de policías y soldados
continúan siendo tumbas anónimas. ¿No es la tarea de la Justicia Transicional
“resolver los problemas<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>derivados de un
pasado de abusos a gran escala a fin de que todos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>los responsables <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>rindan cuentas de sus actos”?<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">“La impunidad se
define-acudo al diccionario Google elaborado por verdaderos juristas- como la
situación en la que una persona que cometa un crimen o un acto ilegal o
reprobable queda sin castigo por lo hecho”. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Escandalizados moralmente<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>acabamos de asistir con estupor al crimen de
una adolescente a manos de un pervertido sexual que después de violarla la
descuartizó. El unánime <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>grito de
indignación no se ha hecho esperar pero es desde este caso para cuyo autor
material unánimemente se pide la mayor de<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>las condenas, tal como yo mismo lo hago, que <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>otra
vez<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>llamo la atención sobre el brutal
descuartizamiento de 10 niños indígenas y de ocho adolescentes <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>afrodescendientes <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a manos directas <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de Iván Mordisco y que no ha despertado la
misma reacción de público repudio <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>como
no la ha despertado <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>tampoco<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el cobarde <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>asesinato de un padre y un hijo secuestrados
por la<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Jaime <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Martínez en Jamundí. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>“La impunidad daña no solo el desarrollo de los
individuos sino a toda la sociedad” La ejemplaridad de la justicia queda en
entredicho <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>como lo pone de presente la
JEP que<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>contando <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ya con las confesiones <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>personales <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de Comandantes(as) de las FARC reconociendo
ser <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>violadores de niñas y de niños, descuartizadores
<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>al hacer un aborto, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>documentos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que todos hemos visto en la t.v.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>se está negando a condenarlos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>creando frente a la opinión pública <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>una grave ambigüedad jurídica al no dejar en
claro con su versión de la justicia <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Transicional
si a los descuartizadores <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>un niño o una niña se los exonera de sus
crímenes<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>por razones políticas <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>mientras solamente<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>se condenan<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>con el rigor debido<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y por<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la justicia ordinaria las monstruosidades de
un individuo. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-74833943102637319162023-12-31T17:00:00.001-05:002023-12-31T17:00:06.636-05:00EL PAÍS A LA INTEMPERIE / Darío Ruiz Gómez<p><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; text-align: justify;"><span style="color: #ffa400;"></span></span></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="color: #ffa400;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgNewySwZjsgVRt_PkQLB7mCLakpXpHjBUCv4VMWXTtxaZZqYpryrJsHnHfG51I6TSQj2YYa6npJLvy4iQE8EBkAGGvRO2jVcIFxgrfKwW6CQcRoTElh6YEjmgZMMM9ITHqAw7LNgjLiPTua-jK64uxqxoOVoL34y8RGusW3fj3tGqS9sdbPvWLiCM18ns/s477/13%20-%20copia.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="248" data-original-width="477" height="333" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgNewySwZjsgVRt_PkQLB7mCLakpXpHjBUCv4VMWXTtxaZZqYpryrJsHnHfG51I6TSQj2YYa6npJLvy4iQE8EBkAGGvRO2jVcIFxgrfKwW6CQcRoTElh6YEjmgZMMM9ITHqAw7LNgjLiPTua-jK64uxqxoOVoL34y8RGusW3fj3tGqS9sdbPvWLiCM18ns/w640-h333/13%20-%20copia.gif" width="640" /></a></span></div><span style="color: #ffa400;"><br /><b><br /></b></span><p></p><p><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt; text-align: justify;"><span style="color: #ffa400;"><b>EL PAÍS A LA
INTEMPERIE</b></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><span style="color: #fcff01;">Darío Ruiz Gómez<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Alejo Vidal-Quadras
acaba de sufrir un atentado en una calle del madrileño barrio de Salamanca
donde un sicario a bocajarro le disparó, Vidal-Quadras instintivamente movió la
cabeza y la bala a pesar de que le atravesó la mandíbula no causó graves daños
de manera que satisfactoriamente hoy se repone en un hospital. En principio se
pensó que había sido un sicario colombiano ya que los sicarios
colombianos no suelen fallar pero la torpeza del autor del atentado fue tan evidente que de inmediato se descartó esta
sospecha. Vidal-Quadras quien miró a los
ojos al sicario supo de inmediato que era un comando iraní el encargado de
eliminarlo. Alejo como lo llaman sus amigos es además
de un notable columnista cuyos análisis de la actual política
española son admirables en el sentido de que se proyectan desde la complejidad
del enfoque filosófico, ético del pensamiento
moderno. “España ha banalizado el mal” Físico, profesor de Física
Nuclear en Estrasburgo y Dublín, Legión de Honor del Gobierno Francés,
Europarlamentario, autor de varios libros de pensamiento político, defensor de la resistencia del pueblo iraní contra los
Ayatolás, fundador de Vox, brillante
pensador . Con un diagnóstico premonitorio en sus observaciones sobre la azarosa escena política española de la cual se han
apoderado los independentistas, un
bolivarianismo ya imposible de negar y
la permisibilidad de lo que llama Democracia claudicante para
arrodillarse ante los enemigos de la nación. Vidal-Quadras es un pensador imposible de
imaginar en una escena como la colombiana dominada precisamente por un revolucionarismo que ha devenido en
pistolerismo, por le ceguedad condenable de la justicia ante la violencia o
sea por una justicia incapaz de asumir su responsabilidad ante la destrucción
de una nación.<o:p></o:p></span></p>
<span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt; line-height: 115%; mso-ansi-language: ES-CO; mso-bidi-font-family: "Times New Roman"; mso-bidi-language: AR-SA; mso-bidi-theme-font: minor-bidi; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-fareast-language: EN-US; mso-fareast-theme-font: minor-latin;"><div style="text-align: justify;"><span style="font-size: 13pt;">“Los cimientos del edificio
constitucional </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">- vuelvo a citar un
artículo suyo de comienzos de este año - han sido sacudidos, cómo las leyes
eran ignoradas, cómo las normas eran retorcidas y cómo los supuestos que
creíamos indubitables </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">eran pisoteados
con sucio descaro. Hemos contemplado con angustiado asombro cómo golpistas
culpables de de atentar contra el núcleo más esencial de nuestro ordenamiento, </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">la indivisible unidad de España, hecho en el
que descansan nuestras libertades y derechos, han sido exonerados de un delito
tan execrable a cambio de un efímero disfrute del poder, cómo asesinos en serie
de la peor especie han sido tratados con grandes miramientos o puestos en
libertad sin más para ser objetos de homenajes, cómo la Historia ha sido
reescrita con ánimo cainita para abrir viejas heridas ya cicatrizadas” </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">Decir con la boca llena como siempre lo hace
nuestro </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">Ministro de Justicia que bajo
este gobierno las matanzas y asesinatos han rebajado sustancialmente</span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">cuando es lo contrario</span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">o</span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">como
el abogado</span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">Ministro de Defensa al
admitir que hubo un acuerdo con Iván Mordisco para retirar el Ejército del Cañón
del Micay </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">por donde salen hacia el
Pacífico los grandes envíos del narcotráfico, </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">dejando abandonados </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">a sus pobladores, es decir convirtiéndolos en
ciudadanos de tercera clase, </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">sometidos
por</span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">la fuerza a </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">las tropelías de estos narcotraficantes</span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">lo</span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">cual
constituye </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">en una Democracia militante
nada menos que una traición a la Patria. </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">Desmantelar las Fuerzas Armadas,
politizar</span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">y envilecer</span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">la justicia, acelerar la fractura social bajo
la consigna estaliniana de “divide y controlarás” es ya la demostración de que
el Estado de Derecho no existe porque no existe la separación de poderes y de
que los colombianos somos hoy un País a la intemperie. P.D El fracaso vergonzoso
en las pruebas Pisa de nuestros estudiantes </span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">es el triunfo clamoroso de Fecode y del Gordo
Alarcón</span><span style="font-size: 13pt;"> </span><span style="font-size: 13pt;">destruyendo con la ignorancia y
las infinitas huelgas de profesores(as) nuestro “burgués” sistema educativo</span></div></span>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-53647622468386849192023-12-31T16:34:00.002-05:002023-12-31T16:34:40.159-05:00EL ALBOROTO DE LA TRIBU / Darío Ruiz Gómez<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgiVzzGdznuVbbhn7Syesk30MDwXIulX-Ev3s8YqCiyD1xvCkZ8a6pZ2I29bPibO3GhIvVzGAIAg30vM1uhPQe26z6JDYLyFaBkwCw6gFcksDyaj58VJt2emJMXeFns_8RLuZaOosS8lDXvBCTIBaHOEMyL6tk4ruoojYAv4JZobcjinYKpwrtxdJ-PBaw/s307/978612434933.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="307" data-original-width="202" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgiVzzGdznuVbbhn7Syesk30MDwXIulX-Ev3s8YqCiyD1xvCkZ8a6pZ2I29bPibO3GhIvVzGAIAg30vM1uhPQe26z6JDYLyFaBkwCw6gFcksDyaj58VJt2emJMXeFns_8RLuZaOosS8lDXvBCTIBaHOEMyL6tk4ruoojYAv4JZobcjinYKpwrtxdJ-PBaw/w263-h400/978612434933.gif" width="263" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><span style="color: #ffa400;"><b>EL<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ALBOROTO <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>DE LA TRIBU<o:p></o:p></b></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><span style="color: #fcff01;">Darío Ruiz Gómez<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">El<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>luminoso ensayo de Mario Vargas Llosa, “El
llamado de la tribu” es la defensa del pensamiento liberal y del individuo
pensante desde Adam Smith,Ortega y Gaset,Hayek, Popper, Raymond Aron, Isaiah
Berlin y Jean Francois Revel frente a los totalitarismos nazi, leninista,
maoísta, castrista, madurista y la historia de los obstáculos, de las ofensas
que las<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>tribus al<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>servicio de estos totalitarismos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>le han y le seguirán<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>infringiendo a los defensores de la libertad,
del <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>individuo en la defensa de la
Democracia. Recordemos que el actual gobierno sacó a Colombia de la Otan y la
inscribió en el bloque de Irán, Siria, Venezuela, Nicaragua, de Hezbolá y Hamás
o sea del terrorismo como metodología del exterminio de sus enemigos. Les <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>aclaro que decir hordas como decir tribus como
decir masas no se refiere exclusivamente a la visión de esas multitudes que a
su paso intentan arrasar todo lo que ven sino también a las llamadas clases
ilustradas <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>por incapacidad de pensar por sí mismos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>terminan como recuerda Popper en “La<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sociedad abierta y sus contradicciones”
justificando<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la barbarie<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>amparados <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>por una retórica infame que manipula<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la
mentira volviéndola <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>verdad, cegando
moralmente a la ciudadanía para que no vea la realidad de los hechos como<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ahora en Colombia donde el discurso oficial y
los “intelectuales” a su servicio tratan de que no veamos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la ofensa al ser humano de los desplazamientos
de campesinos, el confinamiento de poblaciones en el Chocó y el resto del país <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y callen ante el inconcebible crimen que
supone el secuestro. ¿No<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>lo hacen ahora
justificando igualmente el tenebroso totalitarismo de Maduro, poniendo de
ejemplo a los abyectos intelectuales maduristas<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>e implícitamente <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>condenando a científicos,
escritores, pensadores <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>libres que el
tirano ha enviado al exilio? <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Frente al
terrorismo de Hamás y de Hezbolá y su<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>cruel matanza de civiles israelíes, y<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>su incesante terrorismo, el<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>secuestro y asesinato de niños, nuestra izquierda boba ha reaccionado
histéricamente <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>pidiendo lo que
precisamente busca el terrorismo de Hamás, hacer desaparecer<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a los judíos del la tierra. “Se ignora
al<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>agresor y se culpa al agredido” Y se
olvida que Israel es una democracia desde la cual puedo criticar abiertamente a
Netanyahu mientras bajo esas teocracias <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>fundamentalistas cualquier crítica es
sancionada con la muerte.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">El ilustre politólogo
Manuel Arias Maldonado señala con certeza el origen de esta exacerbada retórica.
“Significados vacíos que se llenan con cualquier contenido: <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a un individuo que piensa<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>le responde una tribu enfurecida” y lo
detalla con más lucidez:”Porque el militante no es un demócrata pluralista,
sino el miembro de una tribu política que cierra filas con los<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>suyos hagan lo que hagan y pase lo que pase”
¿Qué les puede enseñar a nuestros escritores(as) el remedo de literatura del
madurismo <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sino a ponerse de rodillas
ante los Comisarios de Cultura que les advierten <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que si no siguen fielmente<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>las normas del totalitarismo <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>deben también pensar en el exilio? La
literatura como la cultura es <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el logro
de la libertad personal, las escrituras disidentes<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y no el regreso a lo más primitivo que es la
negación del pensamiento. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En el
periódico español<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>“El País”<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>tan abierto a estas retóricas leo un artículo
de cuyo autor prefiero olvidarme y cuyo título reza: “Crece la violencia
simbólica contra Petro” y resulta que cuando uno espera que se refiera a quemas
de muñecos en aquelarres de la derecha<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>lo<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que para el autor<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la violencia <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que denuncia y ante la cual está asustado<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>no es otra que el derecho de la ciudadanía a
manifestar públicamente en los estadios, en las plazas públicas su repudio a un
gobierno con cuyos resultados y manipulaciones ideológicas no está de acuerdo.
¿Violencia simbólica la libertad de expresión?<o:p></o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-60202343306742996632023-12-22T02:25:00.002-05:002023-12-22T02:25:26.022-05:00LAS SUPERESTRUCTURAS URBANAS DEL DESORDEN 7 Darío Ruiz Gómez<p> </p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrErl_t_MimgL3oaJflkOdIk-wpe_32I4PW4seuHeNOtRrI6hGsaBKK247_sqZ5Lv00k64rZxlQknj9s1-lxASvgBZsN_OObsLIamR2ZHm8XF2fEJCzHdSwZe4XBAM3Q3zIEMNr4rhfajKPgv81_zbM0Bq1eu2JJSszihiTLCFM7_AXJinujXXUKmf-0c/s383/20231003_142129.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="311" data-original-width="383" height="520" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjrErl_t_MimgL3oaJflkOdIk-wpe_32I4PW4seuHeNOtRrI6hGsaBKK247_sqZ5Lv00k64rZxlQknj9s1-lxASvgBZsN_OObsLIamR2ZHm8XF2fEJCzHdSwZe4XBAM3Q3zIEMNr4rhfajKPgv81_zbM0Bq1eu2JJSszihiTLCFM7_AXJinujXXUKmf-0c/w640-h520/20231003_142129.jpg" width="640" /></a></div><br /><p></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><span style="color: #ffa400;"><b>LAS SUPERESTRUCTURAS
URBANAS DEL DESORDEN<o:p></o:p></b></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><span style="color: #fcff01;">Darío Ruiz Gómez<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Desde cualquiera de
los miradores de Medellín al Occidente o al Oriente cuando se contempla la
ciudad ultracompacta alrededor de las orillas del río y cuando se asombra uno
de la cantidad de<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>invasiones <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que han seguido ascendiendo por las laderas
sin reglamentación alguna que lo impida y cuando sobre los<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>cerros emblemáticos se ciernen las heridas de
las canteras, la tala de los árboles, entendemos que lo que llamábamos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>hace veinte años aún, cota urbana para aclarar
que hasta donde podían llegar los servicios de luz, agua, pavimentación
podíamos considerar que<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>se daba la
ciudad humana. De ahí en adelante lo indeterminado, lo sin nombre, la invasión
agresiva de lo rural como resultado del <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>diario arribo de desplazados del campo
impulsados por los llamados coyotes. Ya hemos comprobado sobre el terreno que esta
población ha ido<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>desestabilizando<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>las <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>laderas, haciendo de las quebradas verdaderos
estercoleros infectos y construyendo un deshilvanado laberinto de callejuelas
con puentes, trampas, garitas mediante las cuales las Bandas siguen dividiendo
los territorios y estableciendo nuevas fronteras invisibles a pesar de que hoy
se diga que ya no existen. De hecho la centralidad de Medellín <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>dejó de ser hace más de una década lo que
llamábamos Centro <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Histórico alrededor de
los Parques de Bolívar y Berrío, de la Playa,<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>ya que hoy esa centralidad la ha ocupado <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la Comuna Trece, lo cual constituye una
bofetada contundente al urbanismo que planteó una ciudad<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>moderna<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>planificada, sectorizada con <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>parques, calles arboladas y una tipología
magnífica de la Arquitectura Moderna. Junín como nuestra mainstream. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Esa ciudad<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>agredida y desfigurada por el desinterés o por intervenciones
superficiales <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>solamente logran verla
quienes la vivieron y gozaron porque fue <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>una gran ciudad. ¿Ccuál puede ser <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el urbanismo que nazca del desorden y<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>del reconocimiento<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>los
nuevos contenidos espaciales?<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">Desde hace treinta
años otras ciudadelas <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sin planeación alguna<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>fueron<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>asentándose desordenadamente <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>–algún imbécil la llamó “ciudad difusa”- hasta
plantear a los urbanistas modernos una lectura que su racionalismo<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>académico <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>no pudo ni ha podido leer y ante la que la
sociología seudomarxista se estrelló ya que a partir de las <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>apabullantes economías del narcotráfico la <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>histórica clase trabajadora –nuestro
proletariado- <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>desapareció con el modelo
industrial <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ahora<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el
empleo surge <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>precisamente de <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>estas <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>economías
que han establecido <span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>formas de servidumbre social, espacios de
segregación más inhumanos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>que los del
antiguo capitalismo. No nos enfrentamos entonces<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a marginaciones <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>urbanas <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>como<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>las <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>llamadas “ciudades miseria”
sino a formaciones que han estructurado<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>la
presencia<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y la vigencia<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>del desorden propio de grupos étnicos, de
desplazados de economías precapitalistas, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>desconocedores de lo que llamamos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el urbanismo moderno. “Acosados por la
privatización –anunciaba Richard Sennet- la planificación urbanística obsesiva,
la vigilancia policial, la especulación, los espacios que habitamos se vuelven
cada día recipientes cerrados que coartan la acción<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y limitan la experiencia vibrante que
constituían la riqueza humana de las grandes ciudades” La policía ha sido
sustituida en estos territorios por la “seguridad” que dan los pequeños y
grandes Capos, la especulación ahora en manos de capitales globales empezará a
hacer la <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>renovación urbana que nunca se
hizo por las Oficinas de Planeación, decretando bajo un nuevo dominio
territorial que los barrios de la malla urbana reconocidos por<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>su uso del espacio, sus arquitecturas de
vecinos, <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>han entrado <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de lleno en el mercado de la nueva
especulación urbanística. De ahí la importancia de un Gabinete municipal
compuesto por verdaderos expertos para recuperar la ciudad para todos los
ciudadanos y no de muchachitos que<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>con
prohibir los vehículos e imponer el uso de las bicicletas <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>creen que<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>están resolviendo este desorden y esta violencia.<o:p></o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-26543925531716218492023-12-22T02:16:00.002-05:002023-12-22T02:16:22.626-05:00¿ A CUÁL CIUDAD ESTAMOS REGRESANDO? / Darío Ruiz Gómez<p> <table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEik7bDnJeSGmoHPE5O2kcUcPM4j9QpjDBfatWPlGM2TTq7zO42v2uDml5JWdq8yeKBmGyiV9fDwa30bN0tyz5A3Q-gbQZbbvTKObRSQcpxsmxwXqQltJvx3T28wVkUpakYYbLm3I5WEC_0RDTuo_FwzDuqmhapfY3ctnmlOxxy47y4pKLS7EmB75qpwbto/s437/20230921_125122.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="216" data-original-width="437" height="316" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEik7bDnJeSGmoHPE5O2kcUcPM4j9QpjDBfatWPlGM2TTq7zO42v2uDml5JWdq8yeKBmGyiV9fDwa30bN0tyz5A3Q-gbQZbbvTKObRSQcpxsmxwXqQltJvx3T28wVkUpakYYbLm3I5WEC_0RDTuo_FwzDuqmhapfY3ctnmlOxxy47y4pKLS7EmB75qpwbto/w640-h316/20230921_125122.jpg" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"></td></tr></tbody></table><br /></p><p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><b><span style="color: #ffa400;">¿ A CUÁL CIUDAD
ESTAMOS REGRESANDO?<o:p></o:p></span></b></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><span style="color: #fcff01;">Darío Ruiz Gómez<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">A medida que vamos
conociendo la terrible dimensión</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">de los
delitos</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">de los cuales se señala</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">a </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">Quintero y sus colaboradores(as) </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">no salimos del asombro de que tales desmanes </span></span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">hayan
estado prácticamente</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">sucediendo ante
nuestros ojos y </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">ante la supuesta
fiscalización</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">de</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">los Entes de Justicia </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">que no profundizaron</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">en cada uno de</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">estas denuncias; </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">delitos cometidos en medio de un carnaval </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">de irresponsables que convirtieron el
presupuesto municipal en un derroche</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">de
malversaciones </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">amparados en su condición
de jóvenes que habían sido</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">ungidos </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">por Petro para </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">“condenar la corrupción imperante” y terminaron</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">deslumbrados </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">por los viajes de turismo, los vehículos de
lujo, las grandes comilonas. </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">Toda una
comedia de Almodóvar. </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">O sea </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">una demostración de plebeyismo delirante
teniendo en cuenta sus orígenes sociales de clase media o clases populares cuya
representatividad </span></span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">reclamaban y a la cual
rápidamente traicionaron porque el hecho es que cuando</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">ahora cesa su gobierno estos </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">muchachos(as) ya no pueden volver al barrio,
ya no pueden recorrer</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">a </span><span style="font-size: 17.3333px;">pie</span><span style="font-size: 13pt;"> las calles
tanto es el odio que las gentes sienten por ellos(as). Y la mejor demostración
del buen gobierno</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">es la de </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">que el gobernante pueda </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">seguir confundiéndose en la calle con una
ciudadanía satisfecha. </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">Convertir</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">la Alcaldía en un búnker </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">y no volver a tener</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">la experiencia de</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">la ciudad fue entonces comenzar a desconocer
los cambios que</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">iba </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">acusando la vida cotidiana, las
transformaciones</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">que</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">en lo referente al uso del espacio suponen </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">los refugiados</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">
</span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">venezolanos, los extranjeros que al escoger Medellín como lugar de
residencia </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">han planteado </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">radicales </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">modificaciones</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">respecto a</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">
</span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">la idea de ciudad. Además de las </span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">lógicas transformaciones</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">causadas</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;">
</span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">por los desplazamientos internos de población</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">lo
cual implica la necesidad de un reconocimiento inmediato</span></span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 13pt;"> </span><span style="font-family: Book Antiqua, serif;"><span style="font-size: 13pt;">de esa nueva ciudadanía, un concepto
diferente de los territorios, de los barrios dentro de los barrios que
replantean la cartografía de lo que hemos venido llamando Comunas.<o:p></o:p></span></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;">¿Cómo enfrentar esta
problemática<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sin una teoría urbanística
de aproximación o sea sin una idea de ciudad acorde con estos shocks culturales?<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Lo que hace veinte años llamábamos la
necesidad de releer la ciudad,<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de no
confundir el<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>maquillaje de los espacios
y zonas verdes con el verdadero urbanismo que acepta con los instrumentos
teóricos debidos la complejidad de la problemática de una ciudad cuyos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>bordes tal<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>como se demuestra en el traslado de población de <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>El Poblado hacia Oriente<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>son otros <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>y habría que haber planteado a tiempo un Área
Metropolitana <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>para evitar<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>el caos que está causando la conurbación
propiciada por los <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>“urbanizadores de
lotes” que destruyen <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sin cesar el medio
ambiente y nos recuerda en este momento que el juicio a los malos funcionarios
que saquean las arcas de una ciudad es el derecho de los ciudadanos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a defender su ciudad <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>reapropiándose de sus espacios, devolviéndoles
el significado que borró el atropello de las estructuras criminales, la nueva y
salvaje especulación eufemísticamente calificada como “gentrificación” <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Esta banda de jóvenes salidos de no se sabe
qué organización capaz de darles 100. 000 votos <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>más que su contrario<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ha sido la encargada de desacreditar la
imagen de la juventud como la de una energía moral reacia a la falsedad, a la
corrupción. ¿Qué ciudad se ha entregado al nuevo Alcalde? <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Ojo: De los delitos como el amiguismo o el tráfico
de influencias <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>sólo se salva el
gobernante que gobierna para y con los ciudadanos desde el vendedor ambulante
hasta el empresario, el gobernante que escoge a los más indicados(as) y trata
de hacer realidad la ciudad que,<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>como un
anhelo, todos llevamos dentro.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 13.0pt;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></p>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2022895639394837235.post-68920201721748722522023-12-10T01:01:00.007-05:002023-12-10T02:24:20.069-05:00Astrid Acevedo -cantautora-<p></p><table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><tbody><tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgvm5FIKYa5Jf4bPsjF7g_rT4ji3P41Mq3ysR1aonzPG_vRSVvZ6BBbda7i3dSyp4cY1m4bVQ4XX2ZQbCP9V-HJ5eLO0Glus3ZNH9KBuLoBMk5TnLmD-s0GBLkIWLZeNv8QucnVOehXwWfwVXj0YBG2C4t4iZM9a-YuYF2oZpgaM8Fo9IFeAwGSsZ9OUjU/s508/astridG2%20-%20copia.gif" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="308" data-original-width="508" height="388" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgvm5FIKYa5Jf4bPsjF7g_rT4ji3P41Mq3ysR1aonzPG_vRSVvZ6BBbda7i3dSyp4cY1m4bVQ4XX2ZQbCP9V-HJ5eLO0Glus3ZNH9KBuLoBMk5TnLmD-s0GBLkIWLZeNv8QucnVOehXwWfwVXj0YBG2C4t4iZM9a-YuYF2oZpgaM8Fo9IFeAwGSsZ9OUjU/w640-h388/astridG2%20-%20copia.gif" width="640" /></a></td></tr><tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Astrid Acevedo</td></tr></tbody></table><br /><p></p>
..
<iframe allow="accelerometer; autoplay; clipboard-write; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture; web-share" allowfullscreen="" frameborder="0" height="720" src="https://www.youtube.com/embed/2fYpJzHrA68" title="Astrid Acevedo -cantautora-" width="1280"></iframe>
..
..
<div><b style="color: #ffa400; font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 12pt; text-align: justify;">Astrid
Acevedo</b></div><div>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 12.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;"><b><span style="color: #fcff01;">Víctor
Bustamante<o:p></o:p></span></b></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 12pt;">De
regreso a ese lugar de la memoria que son los poemas y los textos y, por
supuesto, algunos videos sin salir, sin mostrarlos, sin compartirlos. Fue allí
una tarde que ya se transformaba para esa esfera tan presente, En este Lugar de
la noche. Entonces, era una noche, una de esas noches nunca perdidas, sino impresa
y aún presente, además muy precisa que la devuelve, a ella, a Astrid, en su
extensión al editar este video que ella se merece, sí, Astrid Acevedo. Pero esa
noche es presencia por su llegada. Sí, Astrid que siempre destila alegría,
serenidad y, sobre todo, esa bonhomía tan difícil de encontrar en estos tiempos
tibios. Y junto a ella una de sus máximas creaciones, su balada, </span><i style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 12pt;">La noche</i><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 12pt;">, como proemio para saber que es
una gran canción, una de esas canciones que la definen y la ubican en esa parte
arisca a veces, diría, el país del corazón, donde resplandece más la música,
sobre todo otra vez la noche que arde, que apacigua que mantiene en vilo. Y es
que esta balada, en su poderosa voz, diría mejor su balada porque ella es la
autora, que en ella ha dejado esa sensación que, al calor del vino, de las
cervezas y de esos licores siempre tan espirituosos, le dan un color a esta
conversación donde ella conversa, también con un par de amigos, Carlos Alfonso
Rodríguez y Sergio López, y eso sí sirve de fondo en apariencia, porque sé que
la escuchamos no solo su canción, </span><i style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 12pt;">La
noche</i><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 12pt;">, sino que nos acompaña en esa noche, </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 12pt;"> </span><span style="font-family: "Book Antiqua", serif; font-size: 12pt;">ya tan lejana e inmersa en esa zona que se
resiste al olvido, la memoria que como una celestina afilada la devuelve.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><i><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 12.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;">La noche</span></i><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 12.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;">,
merece ser escuchada tantas veces, es su presencia, es la extensión de su
talento. ¿Por qué razón afirmo que es su
presencia? ¿Por qué, además, escuchamos con admiración sus otras canciones? Nada
menos porque son admirables, pero también porque poseen esa sustancia que las
hacen visibles, el frenesí de su voz eficaz, armónica, sensible e impetuosa.
Allí estuve, estuvimos para vivirlo de primera mano. No necesité que alguien me
dijera que la escuchara. De una vez la canción llegó y de una se ha instalado.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 12.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;">Algo
es cierto, la noche siempre regresa en ese recusable tiempo cotidiano que
vivimos, y a pesar de ser milenaria, siempre sorprende, como si tuviéramos
allí, ante nosotros, no una barrera sino un velo que es necesario plegar, como
una prueba irrefutable de que sentimos, como si aun mantuviéramos esa
curiosidad enigmática y porfiada que nos lleva a preguntar porque precisamente
la noche nos acoge, nos aísla con su color inmenso, ese color que en apariencia
uniforma el paisaje y las personas, pero que en realidad lo retrotrae , y se
vuelve una presencia cara.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 12.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;">Siempre
será un enigma saber la razón por la cual la noche nos libera como si poseyera
ese velo quimérico para escamotear el peso burlón y esencial de cada día, y que
es quizá esa pequeña felicidad que vacía y desvalija las preocupaciones y cosas
que asedian.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="line-height: normal; text-align: justify;"><span style="font-family: "Book Antiqua",serif; font-size: 12.0pt; mso-bidi-font-size: 11.0pt;">Por
lo pronto Astrid se ha inscrito en
nuestra memoria con esta canción, su canción, fulgente y macerada, apasionada y
que oprime, pero que también nos libera. Estas palabras se las debí hacer escrito
hace tiempo, pero su balada creo que merece este elogio, este destello de su creatividad
merece este saludo de diciembre.<o:p></o:p></span></p></div><div><br /></div><div><br /></div><div><br /></div>Víctor Bustamantehttp://www.blogger.com/profile/10683042426607571029noreply@blogger.com0